Simposio Colombia: Las crisis y el Fast Track de la riqueza

Lo peor es que un candidato en ejercicio reciba patrocinio de una empresa, sobre todo extranjera. Vivimos el Fast Track  de la riqueza.  Los cultivos ilícitos se legalizaron en la Habana. Cuando vivimos en la sociedad de los derechos y no de los deberes, la crisis es más profunda. Algunas de las conclusiones del último encuentro de los integrantes de Simposio Colombia

Simposio Colombia, dirigido por el general Manuel José Bonett y coordinado por el periodista Gilberto Castillo, sigue sosteniendo sus reuniones en el Norte de la ciudad. En él se busca debatir, de manera ordenada y amena,  diversos temas del acontecer  nacional. Obviamente, noticias como el caso Odebrech, el proceso de paz, y la reforma política y electoral, estuvieron sobre el tapete. Como siempre se contó con la asistencia de los exministros Jaime Castro, Elvira Cuervo, el exconcejal Antonio Galán, el concejal ,Roger Carrillo, el general Roso José Serrano. Las periodista: Consuelo Mendoza y Silvia Jaramillo.  El columnista y analista Pedro Medellín. El educador Gustavo Rodríguez, el ex comisionado de Paz Víctor G Ricardo, además de  otros invitados especiales.

Algunas de las conclusiones fueron:

Caso Odebrech

A sign of the Odebrecht SA construction conglomerate is pictured in Rio de Janeiro, Brazil, February 26, 2016. REUTERS/Ricardo Moraes

–Financiación indelicada de las campañas. Es costumbre en Colombia, y en muchos países del mundo democrático, pedir ayuda de empresas privadas para adelantar cualquier campaña política. Lo que es indelicado es pedirle este tipo de ayudas a una empresa que es contratista del Estado, cuando uno de los candidatos, como es el caso de Juan Manuel Santos, está ejerciendo el poder.

-Resulta más preocupante la situación, cuando quien hace esta donación es una empresa como Odebrech; pues la ley prohíbe que estas donaciones tengan origen en una persona jurídica o natural, extranjera.

– En materia electoral el país ha tenido situaciones más críticas que la actual, como es el caso del proceso 8000, cuando una curul costaba hasta 5.000 millones de pesos que eran financiados, como ocurrió muchas veces y en su totalidad por el narcotráfico, sin dejar de señalar que la situación actual no sea delicada. Por esto si algo se debe revisar una y otra vez, y las veces que se necesario, es el tema de la financiación de las campañas políticas.

– Premio Nobel, alguno de los asistentes toco el tema del premio Nobel, haciendo referencia, a que el reconocido galardón le fue entregado a un presidente que hoy está en el ojo del huracán por los dineros que de manera indebida ingresaron a su campaña. Y si bien es cierto, que una cosa es un proceso de paz y el otro un tema de corrupción, también es cierto, que la corrupción ha sido la gran generadora de la violencia y de la guerra en Colombia. Sin embargo Juan Manuel Santos lo recibe por el proceso de paz con las Farc.

Post conflicto.  A pesar de que se logra la paz, se lamenta que el país haya sido rebajado al nivel de 6400 facinerosos. Negociando un proceso de paz que tuvo como ingrediente principal una encerrona, donde se desconoció la voluntad popular, pues no se puede negar, ni ahora ni después, que el No fue el gran ganador de la consulta del 2 de octubre, pero que el gobierno, a través de un Congreso aliado, se robó esta voluntad e impuso sus condiciones, para logra una paz que no es tan efectiva en la realidad, pues los espacios dejados por este grupo “Guerrillero” han sido copados por bandas privadas como los Urabeños y otros grupos delictivos que hoy generan una violencia igual o más descarnada que la  anterior. Sin dejar de lado  que los sitios de reubicación de los  guerrilleros se pueden convertir en 20 republiquetas, de no se sabe cuánto tiempo, por los incumplimientos del gobierno que no ha sido ni siquiera capaz de armar unos cambuches a tiempo.

–legalización de los cultivos ilícitos. Se dio un plazo de un año para  sustituirlos y está ocurriendo que, durante ese año, los campesinos están sembrando más coca para recibir el cabo de ese periodo de gracia más beneficios económicos, a esto y otros factores se debe el  sorprendente aumento de hectáreas cultivadas en el país.

 -Reforma política. No pasa de ser una cortina de humo para tratar ocultar lo que se veía venir con el  escándalo Odebrech. Se creyó que la noticia de la reforma superaría la del escándalo. Ninguno de los puntos de la reforma es novedoso, ni es idea de este Gobierno, todos son refritos que se discuten desde la constituyente.

-Las cosas buenas del Proceso.  No se puede desconocer que hoy en el país se respira un situación  de paz. Mermaron, considerablemente, los atentados terroristas y los muertos que ponía la guerra con el grupo beligerante más fuerte que existía.  Gracias a esto, la imagen de Colombia ha mejorado en el extranjero y el turismo se ha incrementado en los últimos años y quizá se pueda incrementar en los próximos. Lo que hay que esperar es ¿cómo va a responder el Estado frente a los  nuevos actores armados, que afianzados en el narcotráfico buscarán copar los espacios abandonados por las  Farc. Ya se tienen noticias muy serias sobre nuevos desplazamiento generados por combates entre paramilitares y otros grupos delincuenciales.

-Crisis social muy profunda, en Colombia se da una crisis social muy profunda, principalmente porque estamos en la sociedad de los derechos pero no de los deberes, generada por una cultura ciudadana sesgada. Vivimos en la sociedad de los derechos pero no de los deberes. ¡Exigimos movilidad pero no respetamos las normas de tránsito. ¡Pedimos obras pero no pagamos impuestos! Y cuando los individuos piensan más en sus derechos que en sus deberes hay una crisis que solo se puede empezar a solucionar desde la formación misma del ciudadano. Por eso vivimos en una sociedad donde valga la frase ¡Marica el último!. Unido esto a una frase muy en boga: El  Fast Track de la riqueza, que no es otra cosa que el dinero fácil a cualquier precio.

– Crisis democrática en el mundo: la democracia representativa está viviendo una crisis mundial, en la que el político engaño al pueblo por mucho tiempo y ahora el pueblo engaña al político. Por eso las encuestas no aciertan. Por eso se dan casos como el de Venezuela o el de Trump en los Estados Unidos. Las instituciones establecidas en los países del mundo están agotadas por el mal llamado ejercicio político. Los ciudadanos en general, están cansados de sus instituciones y de sus dirigente, por eso cualquier futuro político, como en el caso de Colombia es incierto.