El plebiscito, un pretexto, para polarizar el país

plebiscito

Por: Hugo Artunduaga Salas

Este medio, popular y democrático, que se bien -utilizo en 1.957, sirvió para darle vida al acuerdo entre los jefes de los partidos: Laureano Gómez y Alberto Lleras, para el regreso Democrático de elegir y ser elegido, además  para atemperar los ánimos belicosos de los militantes de los dos partidos tradicionales: el liberal y el conservador. Nació el Frente Nacional. Alternando  el poder, por cuatro períodos presidenciales y aplicando la paridad burocrática,  en las ramas: legislativa, ejecutiva y judicial, dándole al país un aire nuevo, de paz y prosperidad.
Hoy 59 años después, este mismo mecanismo, ha polarizado al pueblo colombiano, entre los promotores de refrendar con el Si, los acuerdos del fin del conflicto con la guerrilla más antigua del mundo y los del No, que creen, que se le esta dando muchas y desbordadas prebendas a los autores de vejámenes, secuestros, crímenes, traficantes de drogas, minerías  ilegales, etc., etc., por más de medio siglo.
Tenemos que diferenciar, entre el fin del conflicto y la paz . El primero, es terminar la confrontación armada, con el desarme, la siembra y tráfico de coca, el secuestro y demás delitos con que nos han azotado por tanto tiempo las Farc.
La Paz, es la reconciliación entre todos los colombianos, sin distingos de raza, credos, estratos, generó, sí, todos somos todos. Pero para lograrlo, tenemos que desarmar los espíritus, como bien lo afirma, el escritor y periodista, Germán Castro  Caycedo,» La Paz se inicia en el hogar”.
Porque no reflexionamos y nos reconciliamos? Seamos… amigos!!!

En el entretanto: 

El amor y el odio no son ciegos, sino que están cegados por el fuego que llevan dentro.
Friedrich Nietzsche 

La nación es más fuerte por  la unidad de sus hijos y los miembros de la familia, que por su poderío militar. 
Abraham Lincoln 

Benevolencia, no quiere decir tolerancia de lo ruin o conformidad con lo inepto, sino voluntad de bien.
Antonio Machado

Sobre Hugo Artunduaga

A esta edad no hay hoja de vida, solo queda un recordatorio.

Comentar