Efemérides (Marzo): «Jota» Mario, Jorge Oñate…

Marzo 31 de 1949: Nace Jorge Oñate

Nació El Jilguero de América, El Ruiseñor del Cesar. A Jorge Oñate 25 Discos de Oro, más de 30 de Platino y un Grammy a la Excelencia, lo convirtieron en un ídolo de la música autóctona colombiana.

Nació en Villa de la paz, hoy Cesar, y su búsqueda musical comenzó desde muy pequeño, extasiado por el canto voz en cuello y el sonido de un acordeón en pecho que su abuelo Juan Oñate visibilizaba sin parar en su tierra natal. Esas narraciones empezaron a avivar su espíritu soñador, sin que nadie se lo impusiera. Cada vez que podía se escaba para estar en la parranda, y cada llegada tarde a su casa implicaba un regaño seguro, pero no importaba mucho. Además contaba con la complicidad de Julia Martínez su tía materna, una especie de segunda mamá que desde el comienzo comprendió las andanzas del inquieto muchacho.

Cuentan que para ella no era extraño llevárselo a la escuela donde dictaba clases en el anca de un burro, y que sólo se quedaba quieto cuando ella abría sus ojos y le lanzaba una mirada que en un segundo lo ponía en su puesto. Las serenatas que su sobrino empezó a dar llegaban a sus oídos, y ella le contaba a su hermana: «Ve Delfina, sabes quien puso serenata anoche a la hija de …». Delfina sin saber de qué le estaban hablando levantaba los hombros y dejaba que su hermana le contara la historia que constantemente se repetía: «Como te decía Delfina, han hablao bonito de lo que cantó Jorge anoche en esa serenata. Ese muchacho nació para cantar. Ahora sí va a ver una voz que nos represente de verdad. Ese canta así es por su abuelo». Para controlar su forma de ser lo pusieron en internados, donde se destacaba por su forma de cantar y lo convertía en un arma para sobresalir.

En Bogotá hizo hasta la mitad de décimo, porque el llamado del acordeón fue más poderoso que las ganas que tenían su mamá y sus hermanos de verlo convertido en todo un profesional. Todas esas aventuras y trasnochos que vivió en la fría capital se vieron recompensadas cuando su pariente Alonso Fernández Oñate lo buscó para que le cantara ocho temas propios, con el acordeón de Emilio Oviedo.

Los Guatapurí fue la primera banda con la que grabó, con sonido incipiente propio de la época y sin dirección artística, pero eso no fue obstáculo para que el mundo vallenato supiera de él. Se empezó a hablar de que «nacía una voz con mucho sabor vallenato, pero que era distinta a las anteriores, en su forma de cantar». Con el paseo de Carlos Huertas Gómez, No vuelvo a Patillal, tanto él como el acordeonero, se graduaron. Entre 1972 y 1973 ganaron por primera vez de un disco de oro, en los carnavales de Barranquilla y fueron los Reyes del Festival vallenato. Todos conocemos un recorrido que es casi historia patria, y que llegó a su final en 1975. Después de esa aventura comenzó la poderosa dupla junto a Emiliano Zuleta Díaz, que al final no fue más que un paso fugaz en la vida musical de los dos. Pero el joven cantante no se detuvo, y su modernidad lo llevó a ubicarse entre las voces que se destacaban por interpretar las composiciones de generaciones anteriores. Se unió a Nicolás Mendoza, todo un gran ejecutante del acordeón. Lograron una simbiosis que les dio gran reconocimiento y no se detuvieron en la creación de nuevas obras en un medio que ya tenía un gran nicho. Sin dar razón, Jorge Oñate dio por terminada esa unión y creó un dúo con una joven promesa del acordeón, Raúl Martínez Paredes. Juntos consolidaron al vallenato romántico en todo el país.

Tuvo luego una larga ausencia de creación musical que le costó parte del reconocimiento que había construido. Se unió a algunos acordeoneros que no dieron la talla. Después de probar más de uno, el cantante eterno del vallenato decide, ante el llamado de sus seguidores, unirse a un grande del género: Álvaro López Carrillo. Fueron cinco décadas vividas intensamente, con derrotas pero también triunfos en medio de un camino en el que se consolidó como cantante, compositor, y como Jorge Oñate, el artista que estará siempre en nuestros recuerdos, entre los grandes del vallenato.

Había sido trasladado de urgencias de Valledupar a Medellín el 23 de febrero de este año para recibir un tratamiento médico capaz de hacer frente a las secuelas que le dejó el COVID-19. Pero perdió la batalla.

Marzo 31 de 1956: Nace “Jota” Mario

Hoy recordamos, en el que sería su cumpleaños 65, al periodista, presentador, productor y conductor de televisión colombiano. Descrito como un ser humano estricto, responsable y perfeccionista. Criticado a veces, yo me quedo con sus buenos años, aquellos tiempos de Valores Humanos, Telesemana y Domingos Gigantes, donde fue el mejor amigo de los enfermos, de los ancianos, de los niños y de las mujeres que se quedaban en las casas haciendo oficio. Me quedo con el buen colombiano que llenó muchos vacíos y soledades con sus ocurrencias, loqueras, chistes y presentaciones.

Marzo 30 de 1900

A mí me encantan las celebraciones que hace Google, y creo que hay que destacar las muchas buenas historias sobre los logros de las mujeres en cualquier campo. Cuando la historia involucra y celebra el nacimiento de una mujer que dedicó toda su vida a trabajar con la palabra y hacer accesible su poder a todos; la bibliotecaria, filóloga y lexicógrafa española que trabajó sin ayuda para crear un nuevo tipo de libro de referencia, que fue aclamado como «El más completo, más útil, más preciso, y el diccionario más divertido de la lengua española», por Gabriel García Márquez, bueno, pues hay que compartirlo con el mundo. No estamos familiarizados con su trabajo ni con su nombre, pero no es demasiado tarde para conocerla.

María Moliner nació en una provincia de Zaragoza, comenzó a trabajar como bibliotecaria a los 22 años y fue elegida directora de la biblioteca de la Universidad de Valencia en 1936. Se interesó especialmente por el proyecto de bibliotecas populares, desarrollando un plan de Bibliotecas Rurales para ayudar a promover la alfabetización y la cultura. Después de la Guerra Civil española, su familia fue sancionada por el nuevo gobierno autoritario, lo que hizo que la pasaran por alto para los ascensos de la facultad.

Comenzó a compilar su Diccionario de Uso del español en 1952, trabajando en casa antes y después de su trabajo diario. Madre de cuatro hijos y abuela, tenía un extraordinario poder de concentración; investigaba palabras leídas en periódicos o escuchadas en la calle, con el objetivo de superar el diccionario publicado por la Real Academia Española. «El diccionario de la Academia es el diccionario de autoridad. «El mío no ha tenido mucho respeto por la autoridad», dijo alguna vez. En lugar de una organización alfabética, su diccionario se agrupó en familias de palabras, ofreciendo no solo definiciones detalladas, sino también sinónimos y orientación sobre su uso. Cuando comenzó el proyecto, calculó que le llevaría dos años, pero la primera edición del diccionario de dos volúmenes no se publicó hasta 1966, un total de 15 años después.

Su vida inspiró un drama teatral, The Dictionary, así como un documental, Tending Words. Sin embargo, el diccionario en sí, que a veces es llamado «La María Moliner», es ampliamente considerado su mayor legado.

Marzo 30 de 1926: Nace Álvaro Cepeda Samudio

Nació el que es considerado por la crítica como uno de los padres del boom latinoamericano. Como escritor es visto como uno de los grandes transformadores de la literatura colombiana en el siglo XX, alejándola del costumbrismo e imprimiéndole un estilo original, urbano y muy Caribe. Álvaro Cepeda Samudio.

Este escritor y periodista nació en Ciénaga, Magdalena, aunque se consideraba «más barranquillero que el barrio Rebolo». A los dieciocho años empezó a escribir una columna en El Heraldo desde la que trataba temas políticos y sociales, y desde 1944 hasta 1955 estuvo publicando columnas y ensayos.

Algunos suponen que los escritores escriben siempre. Incluso hay escritores que lo creen. Él escribía cuando podía. Ficción, reportajes, comentarios; creía que con el periodismo también se podía contar una historia como se hacía en la literatura. Junto con Gabriel García Márquez, Germán Vargas y Alfonso Fuenmayor publicó Crónica, una revista literaria y deportiva que circuló de 1950 a 1952, y fue editor del Diario del Caribe desde 1961 hasta 1972, donde escribió la crónica «Junior es la querida de Barranquilla», en 1968, año en que vistió la camiseta tiburona, por un solo partido, el mundialista brasilero, Manoel Francisco dos Santos, el inolvidable Garrincha. No hay datos destacables sobre su primera etapa periodística antes de ir a Nueva York, donde escribió Todos estábamos a la espera.

Fue el creador del inmortal slogan de la Cerveza Águila. Plinio Apuleyo Mendoza alguna vez aseguró que la base del fracaso como escritor de Álvaro Cepeda fue el hecho de haber vendido la fuerza de trabajo, su independencia de pensamiento y sobre todo su tiempo al emporio cervecero de Julio Mario Santo Domingo. Fueron catorce años los que entregó a la publicidad de la agencia Águila y a la dirección del periódico del industrial, el Diario del Caribe.

En esos años fue él quien ingenió la publicidad con mujeres en paños menores que ahora conocemos como Chicas Águila, y los eslóganes que se volvieron lema de la empresa: Águila, sin igual y siempre igual, Costeña y Costeñita, tan buena la grande como la chiquita. Sin embargo, es en ese mismo período publicó su obra más importante y un libro de cuentos: y Los Cuentos de Juana. A pesar de su corta existencia de solo 46 años, dejó joyas en la literatura del Caribe colombiano. Todos estábamos a la espera, La casa grande y Los cuentos de Juana forman la Colección Archivos que la Unesco y la editorial española Alfaguara presentaron en el 2015. La casa grande es una novela basada en la masacre de unos huelguistas en la Costa Atlántica; (y a pesar de eso, en sus páginas solo hay quizás, un solo muerto). Cuando ocurrió lo de la masacre: «Vivía en un caserón de madera con seis ventanas y un balcón con tiestos de flores polvorientas frente a la estación del ferrocarril donde se consumó». Los cuentos de Juana son sobre una mujer mitificada que resultó ser un homenaje en clave a su amante y no tenía, según él mismo, mayor pretensión literaria. También fue un integrante, junto con Gabriel García Márquez, del Grupo de Barranquilla, que modernizó la literatura colombiana: «Una tertulia de borrachos que duró quince años con medio centenar de discutidores donde se hablaba de casi todo. En esos bares, casetas y tiendas de Barranquilla, Cepeda se volvió una leyenda», contó alguna vez nuestro Nobel.

Murió en Nueva York en 1972.

Marzo 30 del 2015: Muere Aniceto Molina

Murió en San Antonio, Texas, El Embajador de la Cumbia, El Tigre Sabanero.

Aniceto Molina hizo casi toda su carrera en el exterior, pero nació en 1939 en un pueblo que se llamaba El Campano, Córdoba, en la finca La Florida donde su padre tenía un trapiche, y donde vivió hasta los 18 años, trabajando el machete, cortando caña, sembrando arroz y ñame, arriando bueyes.

Comenzó con lo de la música a los 12 y más tarde formaron el grupo los Molina, unos jóvenes de 18. Un día llegó alguien a buscar a su hermano para invitarlo a que grabara. Pasó un mes en la finca para conseguir el permiso de su papá, y como su hermano no quiso irse, él emprendió camino, y renunció a la herencia que su padre estaba repartiendo entre los hijos. Con los años, viviendo ya en Estados Unidos, quiso recuperar la finca. La nostalgia lo mataba, pero se enteró de que estaba en manos de un sobrino que al inicio no quería vendérsela. Cuando al fin se la vendió casi toda, mandó a parar la casa igual a como era en su infancia, y la conservó hasta su muerte.

Hicieron un recorrido musical por varias ciudades, Cartagena, donde no tuvieron suerte, y finalmente Barranquilla donde sí grabaron 4 números, él tocando el acordeón. Andaban en rebusque, en los bares, de calle en calle sonando el acordeón.

Con el paso del tiempo, un día llegó el acordeonero Aníbal Velásquez del grupo Los Corraleros de Majagual a la peluquería donde dormía y vivía. El propietario se lo presentó y Aníbal le pidió que tocara su acordeón. Entusiasmado, lo invitó para que anduviera con él en el grupo, y se fue a Valledupar donde vivió y tocó 7 años en todos los eventos y bailes. Tocaban de todo en esa ciudad donde entonces había pocas casas y ni en el centro había calles pavimentadas. Pero estaba El rey de los bares, donde sonaba todas las noches.

De Maracaibo llegó alguien que lo fue a buscar, lo convenció, dejó los Corraleros y recorrió parte de Venezuela. Se estacionó en Caracas, donde trabajó en un canal de Tv como Aniceto Molina y su conjunto, tocando cumbia y porro. Terminada la gira en Venezuela regresó a Colombia. Codiscos lo contrató exclusivo y en el 70 se formaron los Caporales del Magdalena.

Se centró en Sincelejo, donde se enamoró de una muchacha que fue su esposa hasta su muerte. Un día emprendió viaje a México, invitado para dirigir un grupito que tocaba boleritos y rancheras. Llegó a un acuerdo para poder sonar su acordeón, y así fue el primer acordeonero en ese país, abriendo las puertas a otros como Alfredo Gutierrez y Lizandro Meza. Lo bautizaron El tigre sabanero porque siempre hablaba de la sabana costera colombiana donde nació. Siempre con su acordeón en el pecho explicaba en México como eran nuestros ritmos, la cumbia, el fandango, el porro, el jalaíto, el paseo sabanero y el paseo vallenato, que para él son dos ritmos diferentes. Viajaba a cantar por Estados Unidos y Centromérica, y en el 84 decidió quedarse viviendo en los Estados Unidos, desde donde organizaba sus giras por toda América. Nunca aceptó que lo etiquetran como cantante de vallenato, porque se consideraba un sabanero, que toca de todo, porque la música colombiana es polifacética. Con la frente en alto daba a conocer y representaba a su costa sabanera. Nunca negó de dónde era, y lo dejó claro en algunas de sus canciones, como El Campanero: Yo soy el campanero, soy de la costa norte de Colombia, y en todo el mundo entero, ando tocando mi cumbia sabrosa. Y El tigre sabanero: Ya llegó el hombre de la sabana, ya llegó el tigre sabanero …

Dejó 45 discos grabados y se consideraba un músico muy disciplinado, aunque al inicio como todos los jóvenes, no lo era tanto: Yo era bebedor, mujeriegio, parrandero y fumador: «Pero al pasar el tiempo, el que quiere y se da cuenta de lo que lo perjudica, aparta todo lo de atrás y comienza una nueva vida».

Marzo 30: Aniversarios

Hoy están de cumpleaños tres fantásticas cantantes.

Tracy Chapman.

«Se me acercan muchas organizaciones y muchas personas que quieren que yo apoye sus diversos esfuerzos caritativos de alguna manera. Miro esas solicitudes y básicamente trato de hacer lo que puedo. Y yo tengo ciertos intereses propios, generalmente un interés en los derechos humanos».

Si bien no se ha retirado, no ha lanzado ninguna música original desde el 2008. Sin embargo, su música resonó con gran fuerza en el 2020, e hizo un raro regreso público al aparecer en Late Night with Seth Meyers en noviembre del 2020, interpretando Talkin about a Revolution desde casa. Al finalizar su participación, salió de cuadro y apareció un anuncio con la leyenda, vota.

Céline Dion.

Contratada en el 2019 por L’Oréal para formar parte del equipo de embajadoras globales del gigante de la cosmética, dijo que consideraba su elección para el puesto como un milagro: «Cuando era joven y tenía los dientes torcidos, era demasiado delgada y siempre fui víctima de provocaciones en la escuela por mi apariencia, nunca se me pasó por la cabeza que algún día L’Oréal me llamaría para promocionar sus productos de belleza».

En el 2020 lanzó su nueva gira «Courage World Tour» en Quebec, que lamentablemente fue interrumpida por el Covid-19.

Norah Jones.

A pesar de estar en la carretera durante muchos años, nunca había lanzado un álbum en vivo. Para darles a todos una muestra de las hermosas actuaciones que realizó en los más diversos rincones del mundo, confirmó este 25 de marzo, con el apoyo de un lindo tráiler, que lanzará el primer álbum en vivo de su carrera el 16 de abril, Til We Meet Again

Marzo 29 de 1928: Nace Jorge Hugo Chagra

Nació en San Salvador de Jujuy, Argentina, uno de los mayores exponentes del folclore argentino. El artista que pintó con poesía y música a Jujuy.

Sapo de la noche, sapo cancionero, que vives soñando junto a tu laguna. Tenor de los charcos, grotesco trovero, estás embrujado de amor por la luna … Sapo cancionero, canta tu canción, que la vida es triste si no la vivimos con una ilusión.

Jorge Hugo Chagra desde joven estudió piano y violín, y también incursionó en la caricatura, dibujando a sus compañeros en horarios de clase. Contaba que muchos de ellos las conservaban. Estudió odontología en Córdoba, donde conoció al director del conjunto universitario Los Arrieros de Coya Guayma. Entró a formar parte del conjunto primero como violinista y luego como quenista, y en plena bohemia estudiantil comenzó a enriquecerse musicalmente, a acercarse al folclor y también tímidamente a componer sobre la temática local.

Se graduó de odontólogo y entró al Ejército Argentino donde finalizó su carrera con el grado de Teniente Coronel. En 1974 grabó diez temas musicales de su autoría y la crítica lo describía: «Hugo Chagra no es sólo un artista trovador, es sobre todo un auténtico intérprete de esas vivencias interiores que tensan su espiritualidad y buscan escapársele en el canto, simple, comunicativo. Él sabe cantar sin alambicadas entonaciones ni exaltativas sonoridades, con cálida vibración humana, con ese ángel de sencillez que brota de sus propias comarcas interiores. La temática del cancionero nativista, constituye el itinerario de una geografía musical que nos define y enaltece, por la autenticidad de su contenido y por el diáfano acento de pasión que, por todo lo jujeño, se ha puesto en la augural concepción realizadora. Tiene motivaciones para inducir al viajero a regresar a su tierra, a venir una y otra vez»

Desde 1977 se fue a vivir a Salta, donde fue adoptado convirtiéndose en un Cónsul Honorario de Jujuy en Salta y representante del Norte Argentino para el mundo. Por su trayectoria, ampliamente reconocida, recibió varios homenajes por su aporte a la cultura nacional, y en el 2018 fue nombrado miembro de la Academia  Nacional del folclore. Dijo en ese entonces: «Todos mis temas fueron vertidos para quienes pueden hacerlo mejor que yo, compongo pero canto íntimamente con los amigos. Se compone y se trabaja cuando hay un incentivo, el haber compuesto todos estos temas, que han trascendido a través de otros intérpretes, me han dado la satisfacción de la reciprocidad, dar para recibir. Soy un enamorado de mi provincia y de su gente que en el diario batallar trabaja por el bien del país, hay muchas maneras de interpretarlo, el jornalero, el profesional y el que compone también lo hace incentivado por todo el orgullo de sentirse hijo y dueño de esta tierra hermosa que nos ha visto nacer».

Su vena artística también se transportó a la pintura; fue un apasionado por la figura y el retrato, y realizó dieciséis exposiciones individuales. Como estamos en tema de Semana Santa les dejo una de sus obras. Jorge Hugo Chagra murió en septiembre del 2020. No habita más este plano terrenal pero se quedó hecho zamba en los corazones de quienes amamos esa música.

Marzo 29 de 1939

A mí me encantan las celebraciones que hace Google, y creo que hay que destacar las muchas buenas historias sobre los logros de las mujeres en cualquier campo. Cuando la historia involucra y celebra el nacimiento de la que es considerada la primera escultora moderna en Bangladesh, cuyo trabajo distintivo tomó prestado de temas occidentales, populares, indígenas y budistas para reflejar las experiencias de las mujeres, bueno, pues hay que compartirlo con el mundo. No estamos familiarizados con su trabajo ni con su nombre, pero no es demasiado tarde para conocerla.

Novera Ahmed nació en 1939 durante una caza de cocodrilos marinos en el manglar más grande del Ganges. Se sintió atraída por la escultura desde niña, inspirada por ver a su madre hacer muñecas y casas de arcilla. Cuando su padre intentó casarla con una familia noble, ella se resistió e insistió en que quería convertirse en escultora.

Estudió diseño en la Escuela de Artes y Oficios de Camberwell en Londres donde se graduó en 1955, y luego continuó con su formación en Florencia y Viena. En 1963 se instaló definitivamente en París. Dos años viajando por el este de Asia inspiraron un cambio en la forma, produciendo varios ensamblajes hechos con los escombros de aviones de combate estadounidenses. Describió su trabajo diciendo: «Lo que Novera está haciendo ahora nos llevará mucho tiempo entenderlo, ella es ese tipo de artista».

En 1997 recibió un Ekushey Padak, el segundo premio civil más alto en Bangladesh. Murió en el 2015, y muchas de sus obras se pueden ver en el Museo Novera Ahmed, fundado en el 2018 por su esposo en la pequeña ciudad de La Roche-Guyon, en las afueras de París.

Marzo 29 de 1939: Aniversario de Terence Hill

Sí. Hoy está de cumpleaños Mario Girotti, el actor inseparable de Bud Spencer que cambió los puños por la sotana.

Nació en Venecia; su padre era un químico italiano, y su madre era alemana. Ya en Roma, con tan sólo 12 años inició su carrera de actor, con Vacanze col gangster. Continuó actuando para financiarse aficiones, incluída una moto, su otra pasión.

Estudió durante tres años Literatura clásica en la Universidad de Roma, pero decidió dedicarse profesionalmente a actuar, y decidió ir a la escuela de formación Actors Studio en Estados Unidos. En 1963 su carrera dio un giro decisivo gracias al maestro Visconti, quien lo contrató para un pequeño papel en la mítica película «Il gattopardo». Su aspecto alemán le abrió las puertas a interpretar personajes anglosajones en películas italianas ambientadas en el Oeste. Además de películas italianas también participó en algunas alemanas.

Después de pasar varios años en Alemania, 1967 fue un año que marcó un antes y un después en su vida. Filmó «Dio Perdona … Io No!, donde conoció a su futura esposa, la actriz estadounidense de origen alemán Lori Zwicklbauer. Ese mismo año le pidieron que escogiera un nombre anglosajón más comercial. Según cuentan, él escogió Terence Hill porque las iniciales coincidían con el nombre de su madre, Hildegard Thieme; En otra versión, el nombre de Terence fue escogido en honor a Publio Terencio Afro, comediógrafo romano, cuyas obras él conocía y apreciaba. Conoció además en Almería a su compatriota Carlo Pedersoli, mejor dicho Bud Spencer, y desde entonces se convirtieron en habituales compañeros y amigos inseparables. El equipo alcanzó su primer gran éxito comercial en 1970 con el spaghetti western en tono de comedia «Le llamaban Trinidad». «Fui a reemplazar a un actor que se había lesionado un pie. Llegué al plató, donde teníamos que pelear, y fue durante esta escena que Bud inventó el golpe de puño de arriba a abajo, como si estuviera martillando su cabeza, que nadie había visto en una película. Nuestra relación nació en ese momento, creció y nunca nos enojamos».

Desde la primera película de Trinidad, el papel de Terence Hill siempre será el de pillo astuto y el de Bud Spencer el de bonachón y cascarrabias. Toda una vida juntos quedó plasmada en casi dos decenas de películas divertidas, llenas de peleas y puñetazos: «Nunca fuimos reemplazados porque fue un encuentro mágico, funcionó y nunca pudimos explicar por qué».

Terence Hill ha trabajado en 80 películas, ha participado en treinta en solitario, e incluso ha dirigido películas protagonizadas por él mismo.

Después de una pausa de 10 años debido a una depresión tras la muerte de su hijo adoptivo en un accidente automovilístico, regresó en el 2000 para ser la estrella de la serie de televisión italiana Don Matteo, en la que encarna a un sacerdote con aires de detective, serie que se exportó a América Latina, Francia y Alemania. En el 2010 recibió junto a Bud Spencer el Premio David de Donatello otorgado por Academia del Cine Italiano por su trayectoria artística. En el 2018 se estrenó su última película, La llamaban Maryam, una nueva película del oeste que fue rodada en Italia, España y diferentes lugares de África. Y a comienzos de este año lanzó su propia marca de café, de la que dice que es «For Cowboys and Cowgirls»

Marzo 29 del 2017: Muere Aldo Guibovich

Murió en México, donde vivía desde hacía 30 años, Aldo Guibovich, la voz emblemática de Los Pasteles Verdes, dejando el legado de su romanticismo para las siguientes generaciones.

Los Pasteles Verdes fue fundado en 1970 en Chimbote, Perú. Nacieron como Los Benkers, y estuvo integrado por estudiantes del colegio San Pedro, donde dieron sus primeros pasos musicales, convirtiéndose en una sensación entre compañeros de colegio y amigos.

El nombre surgió de la nada, comentando sobre Los Benkers, un nombre en Inglés que no concordaba con la música tropical que estaban interpretando, de un momento a otro, uno de ellos propuso cambiarlo por Pasteles Verdes; todos se rieron, pero al final estuvieron de acuerdo: «Así surgió, nada anecdótico como siempre han sugerido otras personas». Ya no tocaban como hobby pues los contrataban para matrimonios, quince años, bautizos y fiestas sociales, y su radio de acción había aumentado.

Ya como LOS PASTELES VERDES, el grupo estuvo una temporada amenizando las noches de los viernes y sábados en el Club 66, donde obtuvieron experiencia musical pues tenían que interpretar lo que el público pedía: cumbias, boleros, tangos, música criolla, rock, baladas, pasodobles. Después de numerosas presentaciones en fiestas y festivales con música tropical, en 1974 entra al grupo Aldo, y deciden grabar música romántica con su voz. Los directivos de la empresa discográfica de mayor proyección en el Perú de aquel entonces, les da la oportunidad de grabar dos temas, Puertos Queridos, un ritmo tropical, y Angelitos Negros, una balada interpretada por él.

Cuentan que al productor de la disquera no le gustaba la idea de lo romántico, y puso al tema tropical como fuerte del 45′, y a la balada como relleno. Para sorpresa de todos, en la radio se empezó a escuchar Angelitos Negros y fue todo un éxito; y esta fue la razón por la que se dedicaron a lo romántico, y grabaron el primer Long Play, Recuerdos de una Noche, que fue el trampolín hacia la fama a nivel nacional e internacional; empezaron las giras, las presentaciones en radio y televisión con temas como El reloj, por el que recibieron su primer Disco de Oro.

Su primer éxito reconocido en México y Estados Unidos fue Esclavo y amo, una bellísima balada que les dió múltiples premios en su primer gira, siendo denominados por la revista Billboard como «Los románticos de América». En 1976 graban el tema que les abre las puertas de la fama a nivel mundial, Hipocresía, logrando permanecer en el primer lugar de los rankings internacionales durante varios meses; fue tal el impacto, que en Suramérica desbancó del primer lugar de popularidad a artistas internacionales como los Bee Gees o Julio Iglesias. Como consecuencia de su enorme popularidad han sido imitados en varios países de América Latina por lo que el nombre artístico Los Pasteles Verdes es marca registrada a nivel internacional a favor de los fundadores.

Silvia Tenorio su esposa, el triste día de su partida escribió: «Jesús en su misericordia infinita, te recibe con los brazos abiertos. Vuela alto, muy alto, espíritu libre y bello. Sube hasta el cielo, allá donde te esperan tus ángeles más amados para cantar contigo las más hermosas canciones ante la presencia del Señor nuestro Dios. Siempre en nuestros recuerdos y amor».

Sí. Siempre en nuestros recuerdos!

Marzo 28 de 1936: Aniversario de Mario Vargas Llosa

Hoy celebra su cumpleaños el ganador del Premio Nobel de Literatura en el 2010, que reconoce que en su época juvenil comulgó con la izquierda, especialmente cuando vivió en París entre 1959 y 1966. «Pero la libertad fue esa palabra clave para cambiar después mi pensamiento político».

Mario Vargas Llosa vive en Madrid hace años, y a mediados del 2020 en una entrevista se refirió al tema de la pandemia:

«Saldremos de esta pandemia menos arrogantes, más convencidos de que la naturaleza tiene más secretos que debemos descifrar y mucho más pobres. Creo que esta situación va a afectar sobre todo a los países que estaban luchando para salir del subdesarrollo. Ojalá no tenga consecuencias políticas catastróficas y no nos vuelva a traer dictaduras, desconfianza y rechazo al sistema democrático y liberal, que es el único que puede sacarnos de la pobreza. El mundo entero no esperaba una epidemia de esta magnitud y nos ha tomado de sorpresa. Los miles de muertos y las disposiciones estrictísimas que los países han puesto en marcha para frenar esta plaga nos indican que estábamos demasiado ensoberbecidos por los progresos de la técnica y la ciencia: creíamos haber dominado la naturaleza. Pues bien, esta pandemia nos ha demostrado que estábamos en un grave error y que todavía la naturaleza puede darnos sorpresas muy desagradables y violentas. Superaremos esta situación sin ningún lugar a dudas y si somos sensatos dedicaremos más tiempo y dinero a la investigación científica con el objetivo de no permitir o disminuir lo que ha pasado. Esta pandemia nos deja algunas enseñanzas de tipo político. En primera  lugar, ha dado a los gobiernos una fuerza extraordinaria y muchos hemos consentido en darle ese poder pues pensábamos que era la mejor manera de combatir una plaga que aún no tiene cura. Esto, naturalmente, conlleva muchos riesgos que tienen que ver con la democracia, la libertad de expresión y las libertades públicas. Creíamos que al otorgarle esos suprapoderes actuarían mejor. Sin embargo, varios gobiernos, incluso democráticos, se han aprovechado de estas circunstancias para materializar controvertidas agendas políticas y hacerse propaganda. Existe en gran parte del mundo en este momento una idea equivocada: la de que el Estado maneja mejor un enfrentamiento y control de la pandemia que la sociedad civil. Esto no es cierto. Hemos visto cómo muchos empresarios convertían sus fábricas a gran velocidad para producir elementos de protección y combatir el flagelo. También hemos observado cómo muchos han realizado generosas donaciones al Estado en varios países. Desgraciadamente no veo ningún liderazgo positivo ni en Estados Unidos ni en Europa en este momento. En Latinoamérica también hay confusión en los liderazgos. Estamos librando una batalla a ciegas contra un enemigo que no conocíamos, que no vemos, pero que sin duda ahora si vamos a conocer y para el que estoy seguro se encontrará una vacuna. El estado no ha pasado la prueba, no ha estado a la altura, tanto en los países desarrollados como en los subdesarrollados».

Habló también del papel de China: «Esta pandemia ha mostrado las grandes limitaciones que tiene un progreso como el chino, que posibilita una economía capitalista mientras mantiene el autoritarismo del partido único y leyes en las que prácticamente la disidencia no está permitida. Y desde luego tampoco la libertad de expresión. China actuó en los primeros momentos de la pandemia de una manera muy poco democrática. A quienes dieron alertas se les castigó y se les obligó a desmentirse. Todo eso deberá ser observado y juzgado. El modelo chino tendrá que ser revisado por los países que quieren tener un futuro no sólo de progreso y civilización, sino también libre y democrático».

En este tiempo de pandemia la virtualidad ha logrado que destacados personajes de gran prestigio internacional, que jamás han visitado a Barranquilla, interactúen con los barranquilleros. Mario Vargas Llosa se unió a comienzos de marzo de este año a El Poder de la Lectura, un programa de la Universidad del Norte que nació en el segundo semestre del 2018, y que promueve la lectura de obras y autores destacados. La Uninorte lo invitó a realizar un análisis de su libro La llamada de la tribu, que en sus palabras, busca aportar un granito de arena en la indispensable tarea de comprender la doctrina liberal y lo que ha representado para el desarrollo de la democracia moderna.

«Creo que animar a la lectura, las humanidades y especialmente a la política es una buena cosa para los estudiantes, sobre todo en este tiempo en el que la Universidad en vez de recomendar la literatura, parece desviarnos de ella. La lectura es un patrimonio para los estudiantes ya que ellos están en formación intelectual. A través de ella pueden tener distintas visiones de la sociedad y escoger aquella con la que  sientan mayor afinidad».

Marzo 28 de 1941: Muere Virginia Woolf

Muere una de las principales exponentes de la literatura a lo largo del siglo XX, una de las grandes renovadoras de la novela moderna que llegó a escribir: «Una mujer debe tener dinero y una habitación propia si desea escribir ficción». Una gran escritora que terminó con su vida sumergiéndose en el río Ouse a los 59 años. Con nueve novelas publicadas y treinta libros de otros géneros, la escritora británica sigue siendo un nombre importante en la actualidad.

Hija de un distinguido crítico e historiador, debido a la profesión de su padre, desde muy joven tuvo contacto con el mundo literario y recibió una educación privilegiada. Fue educada por sus padres y por profesores particulares en su hogar, espacio donde pudo tener desde su infancia contacto con literatos, artistas, intelectuales. A los 18 años comenzó a escribir profesionalmente con artículos periodísticos. Su primera novela, Fin de viaje, salió solo unos años después. Es una de las novelas más inteligentes y satíricas, donde la protagonista se embarca para Sudamérica en el barco de su padre en un viaje de autodescubrimiento. Otras obras de suceso fueron Mrs. Dalloway, Al faro, Orlando y Una habitación propia.

A pesar de la acomodada posición económica, su vida rica en relaciones literarias y artísticas, y del éxito de sus obras, Virginia Woolf sufrió siempre de una salud mental precaria e inestable. Hay biógrafos que afirman que la causa puede estar en que experimentó episodios de abuso cuando tenía 6 años por parte de sus dos medios hermanos.

A los 15 años tuvo su primer colapso nervioso tras la muerte de su madre y de su media hermana. A los 22, la muerte de su padre la afectó de tal modo que tuvo que pasar una breve temporada en un hospital psiquiátrico. Se presume que sufría de un trastorno del tipo maníaco depresivo, trastorno afectivo bipolar, el cual entonces no era entendido plenamente, y quizá fue tomado por los médicos de su época como una enfermedad de artistas, o una enfermedad histérica, que eran tratadas con los limitados conocimientos de las enfermedades mentales que se tenían en aquel tiempo.

En 1912, Adeline Virginia Stephen, que era su nombre de soltera, se casó con el escritor Leonard Woolf y, como era la costumbre, adoptó su apellido. Con él fundó la editorial que operaba inicialmente en la sala de estar de la casa. Liderando el negocio, los Woolf publicaron trabajos pioneros sobre psicoanálisis y tradujeron obras extranjeras, especialmente del ruso. Allí también se imprimieron muchas obras del Bloomsbury Group, el círculo de intelectuales y artistas británicos del que formaban parte Virginia y Leonard, y que existió hasta el final de la Segunda Guerra Mundial. Se declaraban en contra de las convenciones de la vida victoriana y los hábitos burgueses, pero por otro lado, creen en el placer, y esto dio lugar a varias aventuras amorosas entre ellos. Uno de los amores del Bloomsbury Group fue el de Virginia con la poeta Vita Sackville. Aunque las dos estaban casadas ​​con hombres, tenían una intensa relación amorosa. Vita fue la inspiración de Virginia al escribir Orlando. Los relatos de esta pasión están documentados en varias cartas en el libro, y son consideradas como las 50 mejores cartas de amor de todos los tiempos.

Hacia el final de su vida, a comienzos de la década de 1940, fue presa de una tremenda depresión. El estallido de la II Guerra Mundial, la destrucción de su casa en Londres, y la pobre recepción de su último libro, debilitaron su ya de por sí frágil salud mental, y se sentía incapaz incluso de trabajar. Según su blog biográfico, en marzo de 1941 dejó su casa en Sussex, y dejó una nota para su esposo y una carta para su hermana Vanessa. «Querido, estoy segura de que estoy enloqueciendo otra vez. Y esta vez, no me recuperaré. Empiezo a escuchar voces y no puedo concentrarme. Así que haré lo mejor que puedo hacer. Tú me has dado la más grande felicidad posible. No creo que dos personas pudieran haber sido más felices que nosotros, hasta que esta terrible enfermedad llegó. Sé que estoy echando a perder tu vida. No puedo seguir arruinándola», son algunas de las líneas de la conmovedora nota. Con los bolsillos llenos de piedras, se internó en el río Ouse cercano a su casa. Su esposo, su familia y sus amigos sospechaban el suicidio, pero al no contar con el cuerpo, guardaban vanas esperanzas de hallarla con vida. Fue declarada desaparecida y medios como The New York Times dieron fe de la noticia de su desaparición. Tres semanas después, unos niños la encontraron flotando en el río, y fue cuando se publicó la noticia. Lo que quedaba de sus restos fue cremado y sepultado en su casa de Sussex.

Marzo 28 de 1968: Nace Isabella Santo Domingo

Cuando Isabella Santo Domingo bautizó a su libro Los caballeros las prefieren brutas, las feministas se le vinieron lanza en ristre, pero ella no les dio importancia. Advirtió que su libro no debe ser leído por los machistas radicales ni por las feministas consumadas. Autorizó que le devolvieran la plata a quienes lo compraban pensando encontrar un gurú del amor o a una Osho del sexo, porque en sus 232 páginas no lo iban a encontrar, aunque sí las incitaría a reflexionar con una sobredosis de humor: «Es un libro que no tiene pretensiones literarias, ni de enseñar nada, simplemente lo que quiero es que la gente lo lea y se sienta identificada en algunas partes, que reflexione un poco. Le he puesto buena energía y tengo unas ideas que compartir. La única autoridad que tengo es la de haber vivido, la de haber sentido, la de haber elegido, casi siempre mal, pero sobretodo, la de haberme atrevido. Cuando tenía veintipico de años yo era la más feminista, y decía yo puedo con todo, soy madre soltera, qué me voy a casar, no quiero que nadie me mande, quiero vivir sola, pero ya pasados los años, uno recapacita, y eso está bien. La gente cree que no puede cambiar de opinión, pero es parte del proceso de la vida. Uno tiene que parar, respirar, reflexionar y darse cuenta que uno sí lo puede tener todo en esta vida, pero no quitando, rapando, demandando, así nunca».

«La relación ideal es una en donde es posible crecer, una que no admite ningún tipo de estancamiento. Una en la que ambas partes se reconocen como seres humanos independientes, individuales. Dos mundos muy distintos que deciden aliarse para crecer emocional y profesionalmente. Para trabajar en equipo y juntos ser más fuertes, para llegar más lejos, para complementarse sin castrarse. Siempre he pensado que estar en pareja es el estado ideal cuando damos con la suerte, porque no es más que eso, la suerte de encontrar una pareja que valore lo que le traemos a su vida sin territorialismos extremos, sin prohibiciones absurdas que no salen de otro lugar que de la misma inseguridad que le genera a algunos sentir que se quedan pequeños junto a una mujer verdaderamente realizada. Y es que la realización de la nueva mujer radica no solo en ser una buena esposa, madre y ama de casa; la mayoría también quiere experimentar, serle útil económica y profesionalmente a esa misma sociedad o a esa misma pareja que por momentos ha llegado incluso a sentir que la rechaza. Una mujer plena es una que valora a su pareja y que también tiene la capacidad de detectar y de rechazar a tiempo a cualquiera que pretenda truncar en vez de negociar, tolerar y apoyar. Cada vez más son las mujeres que no conciben casarse antes de cumplir sus metas profesionales y cada vez más son las mujeres que optan por no tener hijos o tenerlos solas. Por mi parte, he decidido casarme algún día. Me uniré simbólicamente a alguien que ya esté de regreso como después de los cincuenta también lo estaré yo. Y, si antes se me presenta la oportunidad de cruzar mi camino con el de un hombre seguro y maduro, que ya sepa lo que quiere y que respete que a lo mejor, para ese entonces, yo sepa al menos lo que no quiero, con alguien así quisiera compartir mis últimos años hasta que llegue el momento en el que pueda poner a descansar mis huesos. No tengo nada en contra del matrimonio, pero sí tengo todo en contra de las malas relaciones. Para estar colgando es mejor caer siempre, ha sido mi lema de vida, y no se me ocurre una peor experiencia de vida que aquella de permanecer maniatada a merced de las circunstancias y de la voluntad de alguien que se resista a evolucionar a la par».

Después de 6 años separadas, volvió a estar al lado de su hija Daniela, y está dichosa además por buenas noticias laborales.

Feliz cumpleaños a esta mujer que me parece muy divertida!

Marzo 28 de 1973: Aniversario Walter Silva

Apaga las velitas el que hoy por hoy es uno de los más grandes y representativos intérprete de la música de nuestros llanos orientales, un hombre que a ritmo de joropo le canta a la vida, al amor y al campo.

Nació en Pore, Casanare, «Una región tan infinitamente mística que se pierde en el horizonte», y desde joven empezó cantando en los bailes en Curimina. En el campo era tradicional en los 70 y 80 los bailes campesinos de celebración familiar, sobretodo en año nuevo y navidad, en los que Walter Silva dejó aflorar sus primeras intervenciones artísticas acompañado de los músicos de la región que tocaban sus guitarras. Para entonces era sólo eso, bailes en donde la gente se salía al patio a «echasen brisita» mientras los músicos los acompañaban. En 1990 participó en un festival municipal de joropo en el que resultó cantando y ganando. Al año siguiente supo que en la entonces única emisora de Yopal, se realizaba cada domingo en vivo un programa llamado Estrellas llaneras, donde los cantores espontáneos se sometían al criterio de dos profesionales del arte, y para ello debían asistir si falta cada domingo, vinieran de donde fuera. El tiempo de carretera en el 1991 de Pore a Yopal era de casi cuatro horas. Tanto esfuerzo no sirvió si de escalafón en el concurso hablamos. La capacidad interpretativa de otros participantes no permitieron que figurara en los cuadros de honor. Pero al finalizar el año, en Villanueva se realiza el festival Alma sabanera, y con la primera canción que escribió, Romance del Coleador, se hizo ganador de su primero y único evento como tal.

Después concursó en otros, y al no ganar, desistió de la parte competitiva. En 1993 grabó una canción que no ha pasado de moda, Dónde andará mi muchacha. Contaba que el dinero reunido para grabarla sólo alcanzaba para la cinta, pero no para la producción, por lo que decidió entregarla a un productor, que por medio de sus amigos consiguió reunir recursos y poner en el mercado su primer trabajo discográfico. El éxito fue arrollador, por todos lados se oía Dónde andará mi muchacha. Desafortunadamente la inexperiencia hizo que a su floreciente carrera musical le llegara su primer bajonazo. Su falta de compromiso con la gente que seguía su música le trajo una imagen negativa que le mantuvo al margen de los eventos durante un tiempo, y un segundo disco que pasó prácticamente desapercibido. Pasaron varios años en los que su carrera musical parecía ser apenas una experiencia pasajera, y se inclinaba ya por sacar adelante la carrera de periodista que empezó a estudiar en Inpahu en Bogotá. Pero aprendió, y hoy, después de esos procesos en los que recibió triunfos y fracasos, se considera un artista maduro en su totalidad, profesional en sus posibilidades, respetuoso de lo que hace, comprometido con cada uno de los eventos donde es invitado. Ha grabado 13 álbumes y su música sigue representando a su región. Casi siempre en sus canciones tiene una palabra para su pueblo natal, como estas: «Pariente si no ha ido a Pore, yo lo invito a conocer, después de que lo conozca, sólo pensará en volver»

Pocos músicos han sido nominados a los Latin Grammy cantando joropos. Uno de ellos es Walter Silva. En el 2008 tuvo la primera nominación, y en el 2009 como una refrendación al éxito alcanza la segunda, y asiste a Las Vegas a la ceremonia de entrega. Compitió con Mercedes Sosa, quien fue la  ganadora. En el 2015 con su grupo musical hizo parte de la musicalización de Magia Salvaje, una película documental que muestra la biodiversidad de nuestro país.

Gracias por todo y que los cumpla Feliz!

Marzo 27 de 1968: Muere Yuri Gagarin

El 12 de abril de 1961, Yuri Gagarin llegó donde ningún ser humano había llegado antes: la órbita de la Tierra. A bordo de la cápsula Vostok, dio una vuelta al plantea en una hora y 48 minutos: «Dando vueltas alrededor de la Tierra, me maravillé de la belleza de nuestro planeta», dijo.

La hazaña cambió para siempre la historia de la ciencia y Yuri Gagarin se convirtió en el emblema del dominio soviético del espacio y un embajador no oficial de la Unión Soviética.

El 27 de marzo de 1968, el héroe nacional de la URSS perdió la vida durante un vuelo de prueba; murió a los 34 años al estrellarse cerca de Moscú el caza a reacción MIG-15 que pilotaba.

Las explicaciones sobre el accidente fueron vagas y con su muerte terminaba también una etapa gloriosa para la Unión Soviética en plena Guerra Fría

La muerte de Yuri Gagarin siempre estuvo rodeada de polémica. Las circunstancias del suceso nunca estuvieron del todo claras, lo que contribuyó a alimentar las leyendas y la rumorología acerca del accidente. Una investigación realizada en los ochenta apuntó que unas posibles turbulencias podrían haber precipitado la caída del caza. Posteriormente, el coronel Ígor Kuznetsov presentó su propia hipótesis acerca del accidente. Tras estudiar las circunstancias que rodearon al caso durante nueve años, señaló que el caza MiG-15 podría haber sufrido un problema de sellado en uno de los conductos de ventilación, un problema del que se habrían dado cuenta en pleno vuelo, precipitando una maniobra arriesgada para perder altura. Así la nave supuestamente habría descendido demasiado deprisa, provocando que los ocupantes perdieran el conocimiento y chocaran finalmente contra el suelo. A estas dos teorías, junto a las hipótesis de las condiciones meteorológicas desfavorables, el posible impacto de un ave contra el caza o el simple descuido de Gagarin y Seryogin, se unió la versión oficial mantenida por las autoridades tras desclasificar documentos secretos décadas después: «Una maniobra brusca para tal vez esquivar un globo sonda habría precipitado el incidente del caza».

En el 2013, el histórico cosmonauta soviético Alexei Leonov, que realizó la primera caminata espacial, explicó que en realidad el objeto que provocó el accidente no era un globo sonda. El error había sido causado por un prototipo del supersónico Sukhoi Su-15, que volaba demasiado bajo, a centenares de metros del suelo y no a 10.000 metros como estaba previsto, cruzándose con la nave en la que viajaba Yuri Gagarin y generando una onda de choque que acabaría desestabilizando al MiG-15. El nombre del piloto nunca fue revelado y el misterio continúa …

Marzo 26 de 1827: Muere Beethoven

Muere un genio indómito, de aspecto español y edad indefinida; hijo y nieto de cantantes y directores de coro. El máximo exponente del romanticismo en la música y uno de los mayores compositores de todos los tiempos.

Cuenta la historia que en aquel tiempo, cualquier niño prodigio que mostrara una inclinación especial por la música necesitaba ser consagrado antes de los seis años, la fecha en que Amadeus Mozart actuó para la emperatriz. Así, su padre, además de someterlo a un brutal régimen de formación y disciplina musical, programó un concierto para la consagración de su niño pianista en 1778. Pero Beethoven tenía 8 años, por lo que su padre mintió asegurando que tenía seis, solo para emparejarlo con el milagroso Mozart. El recital no llamó la atención, pero debido a esa mentira pasó la mayor parte de su vida creyendo que había nacido en 1772, y que los registros oficiales del bautizo de un Ludwig Beethoven en 1770 eran en realidad los de su hermano muerto cuando era un bebé, y que tenía su mismo nombre.

Las descripciones físicas lo presentan como un hombre de piel morena, pelo y ojos oscuros y estatura media, inferior a la media de la Alemania de su época. Además, con un temperamento volcánico, nada que ver con el estereotipo de la frialdad germánica. Por eso, en su juventud fue llamado por amigos y vecinos «el español». Y el apodo era incluso apropiado. Su abuela materna es nombrada, según algunas versiones, como descendiente de españoles que emigraron a Alemania para escapar de la Guerra de Sucesión española.

Que Beethoven era sordo es una de esas verdades universalmente reconocidas. Comenzó a tener problemas de audición cuando tenía poco más de 20 años, y hasta el día de hoy se desconoce la verdadera razón de su sordera. Para evitar que sus amigos tuvieran que alzar la voz durante las conversaciones, en la última década de su vida llevaba cuadernos en el bolsillo, para que sus interlocutores pudieran escribir lo que quisieran preguntarle. Los mismos cuadernos también fueron utilizados por él para escribir ideas y frases musicales. Cuando murió dejó más de 130, que ofrecieron un buen vistazo de cómo fue su vida en sus últimos años. El material fue robado por su exsecretario y se utilizó en la primera biografía publicada en 1840. Menos comentado es lo frágil que fue desde la infancia. Sus biografías registran episodios de numerosas enfermedades. Se dice que en sus últimos días sufrió de hidropesía. Aseguran que el médico que lo trató drenó 11 litros de líquido, y que Beethoven aún tenía fuerzas para hacer una broma y lo comparó con Moisés, «sacando agua de una piedra».

Uno de los episodios más misteriosos de su vida es el de la «amada inmortal», nombre con el que llama a la destinataria de una carta escrita a lápiz y nunca enviada, que permaneció bajo la custodia de su hermana hasta que fue vendida a la Biblioteca Pública de Berlín en 1880. La especulación sobre la identidad de la amada abarca a más de una docena de posibles candidatas. Pero parece ser que era su cuñada Johanna van Beethoven. Curioso, visto que un episodio que revela el lado implacable de la personalidad volcánica de Beethoven es la amarga batalla legal, plagada de conflictos y golpes bajos, que libró contra ella por la custodia de su sobrino, hijo de su hermano, quien había escrito en su testamento el deseo de que su esposa y él lo criaran. Beethoven jugó pesado usando su reputación para hacer anular esa disposición. Lanzó una campaña de descrédito moral contra la madre del niño de nueve años, y al final aseguró la custodia. Obsesionado por hacer de su sobrino, al que llamaba hijo, una continuidad de sí mismo, lo crío con tal rigidez que, a los 19 años, cansado de intentar cumplir con las expectativas de su tío, intentó suicidarse.

Aunque fue un genio con tendencia a los roces con sus maestros desde muy joven, también fue fruto de su tiempo. Fue influenciado por el movimiento romántico alemán que se estaba formando a su alrededor. Pertenecía a una nueva era en la que los verdaderos aristocráticos serían los artistas, elevados a la gloria no por méritos de nacimiento sino por puro talento. El joven consiguió su primer trabajo remunerado como músico de la corte a los 14 años. Entre las novedades que introdujo se encuentran motivos breves y fácilmente reconocibles, como la famosa apertura de su quinta sinfonía, la «ta-ta-ta-taaaaaa». La obra de Beethoven siga viva y no morirá jamás.

Marzo 26 de 1920: Nace Rafael Mejía Romani

Nace en Barranquilla uno de los más grandes exponentes del sabroso porro y del romántico bolero, considerado por muchos especialistas el compositor romántico más importante de Colombia. Rafael Mejía Romani.

Hay que ver el mar/ hay que ver el mar/ hay que ver ver mar cuando baña la ribera/ como besa la playa/ como besa la playa/ como besa la playa y luego se le aleja/ todos son encantos/ todos son encantos/ todos son encantos de la tierra mía

O, Era Marta la Reina que en mi mente sonaba / A sus pies vi la luna, las estrellas las aguas / Y un himno de fiesta, las palmeras cantaban.

Cumbia sobre el mar, un tema conocido popularmente como Era Marta la reina, compuesto en 1962 en honor a Marta Ligia Restrepo, señorita Atlántico elegida reina nacional de la belleza en Cartagena. Otro tema dedicado a una reina fue el que el compuso en honor a Adela Segovia el que llamó Adelita. En el legado de su vida artística dejó aproximadamente 150 canciones, 40 boleros en total, y grabadas más o menos la mitad.

En su adolescencia ya era un consumado tiplista que ejecutaba a la perfección bambucos y pasillos. Su trayectoria musical comenzó a los trece años, cuando acompañaba a su padre en el conjunto Remembranza. A los 19 forma el Dueto sentimiento Colombiano, haciendo sus primeras presentaciones en las emisoras y teatros de la ciudad; Luego hizo parte de varios tríos que acompañaron entre otros artistas a Sarita Montiel, y fue haciéndose un nombre. Para 1945 con el apoyo de Toño Fuentes empezó a grabar con el Trío Serenata. Se grababa en los estudios Fuentes pues no había otros estudios de grabación en Colombia. Inicialmente grabaron música del interior, pasillos y bambucos, música de la región llanera de Venezuela y música del Caribe pero especialmente boleros. Al concluir estas grabaciones regresa con su trío Serenata en Barranquilla, convirtiéndose en el trió de planta del hotel del Prado durante dos años. El trío se mantuvo activo hasta comienzo de la década del ochenta y sus composiciones empezaron a llenar el pentagrama latinoamericano con temas como Arroyito campesino, tema que cuentan era muy apreciado por el ex presidente Betancur, que en sus tiempos de joven enamorado se lo llevaba en las serenatas a la que sería luego su esposa. Lo invitó a su posesión, pero no se dió. Y nunca se conocieron personalmente. Sin embargo le mandó una tarjeta de Navidad agradeciéndole por ese tema que compuso en Medellín cuando fue invitado a una finca y le llamó la atención los arroyitos que bajaban de la montaña.

Era una época en que los tríos eran como unos reyes, admirados por toda la gente, mandaban la parada. Con su trío cantaban algunas canciones en inglés para el público gringo, con un mal inglés, pero no le ponían cuidado a eso porque ellos lo apreciaban. A partir de 1957 fue director artístico de Discos Atlantic, que era propietaria de varios sellos y grababan a muchos artistas, y grababan de todo, pasillos, mapalé, boleros, guarachas, bambucos, porros, cumbias. Con el sello grababan los Isleños, que estaban interesados en sus temas. Lo llamó Santander Díaz y le ofrecieron una buena paga, pero el horario rígido no le gustó pues estaba acostumbrado a trasnochar y no le gustaba que le pusieran horarios, así que acordaron que lo importante era que hiciera el trabajo que se le pedíera. Mientras me quieras tú, compuesto en 1949, que lo convirtió en uno de los más notables compositores latinoamericanos, los Isleños la popularizaron como Despierta Corazón, tema infaltable en las serenatas. Todas sus composiciones nacieron con letra y música al tiempo, y su obra musical ha sido interpretada por grandes figuras. Ha trascendido tan profundamente en el ámbito internacional que ha merecido el honor de que algunas de sus cancines hayan sido escogidas para formar parte de una compilación de Sony donde se destacan las 100 mejores composiciones de todos los tiempos. Incursionó en sus últimos tiempos en la salsa, y quienes tuvieron oportunidad de conocerlo y compartir con él, dan testimonio de sus grades valores como ser humano, su don de caballero y su gran amor por Barranquilla.

Siempre rechazó que le hicieran homenajes, pues pensaba que la gente no iba a asistir, pero la sorpresa fue que cuando lo homenajeraron en el Teatro Amira de la Rosa de Barranquilla en 1998, para entregarle una placa, el teatro estaba completamente lleno, hasta el tope, y se tocaron 20 obras suyas. Fue una sorpresa muy emocionante para él. Y yo digo que fue un homenaje muy merecido.

Marzo 26 de 1944: Nace Diana Ross

Nació en Detroit como Diana Ernestine Earle Ross, una figura legendaria de la música estadounidense que saltó a la fama en los años sesenta con el grupo The Supremes. En 1970 se lanzó como solista, y se convirtió en la artista femenina más exitosa de la era pop. Abarcó también la industria cinematográfica, televisiva, y la teatral en Broadway. Interpretó el papel principal de la película Lady Sings the Blues, sobre la vida de la cantante Billie Holiday, que le valió una nominación al Óscar como mejor actriz.

En 1993 entró en el Libro Guinness de Récords como la artista femenina de mayor éxito de todos los tiempos, debido en parte a sus 18 nº1, seis de ellos en solitario. Sólo The Beatles y Mariah Carey la han igualado o superado. Con 60 años de carrera, las ventas de sus álbumes y sencillos tienen un total estimado de más de 100 millones de copias. Y sigue activa. Estuvo en el Jazz & Heritage Festival de Nueva Orleans en el 2019, donde fue recibida como realeza. Pero no esperaba el tratamiento que recibió a luego en el aeropuerto. Según lo que contó en una entrevista, un funcionario de seguridad le hizo una requisa extraordinariamente intrusiva sin motivo alguno. «No se trata de lo que se hizo, sino de cómo. Me sentí violada. Aún puedo sentir sus manos entre mis piernas, por delante y por detrás, diciéndome que era su trabajo». El organismo responsable, a través de un portavoz, dijo que había examinado imágenes y concluyó que se cumplieron todos los protocolos. También aseguró que su objetivo es tratar a todos los pasajeros con respeto y cortesía. En cualquier caso, la agencia ya había informado al público que los controles se iban a volver mucho más estrictos luego de que un informe revelara fallas de seguridad en los scaners que permitían abordar objetos prohibidos. «La regla es que todos los pasajeros pasan por un escáner. Quien rechaza el escáner es seleccionado automáticamente para la requisa».

El Hollywood Bowl, la icónica sala de conciertos al aire libre de Los Ángeles, anunció en mayo del 2020 que cancelaba su temporada de verano por primera vez en casi un siglo debido a la nueva pandemia de coronavirus. Casi la mitad de los casos y muertes en California por COVID-19 se habían reportado en el condado de Los Ángeles: «Esta decisión me hace sentir mal por todos los residentes del condado, que han hecho del Bowl un ritual cada verano. Pero es la mejor decisión que se puede tomar frente a la amenaza de la pandemia de COVID-19». Y Diana Ross estaba entre los artistas con actuaciones programadas.

Life is about change, and this time has, in many ways, been a gift of Reflection and Gratefulness.

My Love and Gratitude has never been stronger.

It seems it will be another year before I am able to tour again.

I will always continue singing. Songs of Love and Appreciation

I just completed singing 14 new songs. Thank you for your Love and Friendship. Coming soon

I am so grateful for all the blessings in my life, for there are many.

Sending good vibrations of Love and Joy to you all!

Marzo 26 de 1952: Aniversario de “el Viejo Willy”

Sí. Hoy apaga las velitas el Viejo Willy, el que entre los años 70 y 80, con una habilidad endiablada para proteger el balón y una velocidad única que lo llevó a convertir goles de antología, nos hizo saltar de felicidad a los colombianos, a pesar de que no pudo ir a un Mundial de Fútbol. Un ser excepcional dueño de un espíritu humilde, que lo mejor que tuvo que decir, lo dijo o lo escribió en la cancha.

En el 2020 celebró su cumpleaños en plena cuarentena por coronavirus en compañía de su familia, guardando todos los protocolos y asegurando que tenían mucho cuidado con él. También invitó a la ciudadanía a cuidarse en esta época del COVID-19: «De todos depende que salgamos adelante y que no haya demasiadas muertes en nuestro país».

Contaba que no le fue bien en el inicio de su carrera. En reiteradas ocasiones, técnicos y equipos nacionales no lo tuvieron en cuenta al considerarlo de poca estatura y muy liviano, pero él perseveró con profunda convicción para debutar, finalmente, con Millonarios y convertirse en el más grande del país en una época cuando el fútbol colombiano no era tan valorado en el mercado internacional: «Como no tenía la posibilidad de ver televisión, ni leer el periódico, uno tenía que imaginarse lo que debía hacer para jugar al fútbol. En esa época había equipos de barrio con unos entrenadores también de barrio que armaban los equipos y allí uno empezaba su carrera, no como ahora que hay escuelas de fútbol. El fútbol era una actividad lúdica. Jugué en divisiones menores y pasé a una selección Tumaco juvenil. Después hice parte de la Selección Nariño en los 70. En mi paso al profesionalismo, fui primero del América de Cali donde estuve unos seis meses en prueba y me dijeron que no tenía condiciones, que era muy bajito y que pesaba muy poco y me terminaron echando. De ahí me fui a Pereira, donde estuve seis meses probando y me volvieron a decir lo mismo, que no les servía. En Armenia, me sucedió igual. Tuve que hacer un periplo por tres clubes antes de que lograra jugar en Millonarios».

Trabajo con el fútbol; vive en Bogotá, tiene una escuela de fútbol y siguió haciendo parte de ese medio, ya no activo, pero no alejado del deporte. La Escuela de fútbol Willington Ortiz es su manera de permanecer en contacto con el balón, de no alejarse de una disciplina que lo convirtió en el rey de todos los tiempos en Colombia. Lo llevó hacia otro campo, y las instituciones y los medios especializados lo elegieron como el mejor futbolista del siglo XX en Colombia.

Fue representante a la Cámara. «La experiencia cuando uno es deportista y no hace un proceso político, no es la mejor. En mi caso, yo pensaba más como deportista y no como político. Cuando llegué al Congreso impulsamos unas propuestas muy importantes; con María Isabel Urrutia promovimos el proyecto de ley donde la telefonía móvil paga un impuesto que se destinan al deporte y la cultura». Pero se queda con el fútbol y no con los avatares de la política: «Con el fútbol tú haces amigos; con la política, no».

Entre las recomendaciones que hace a los jóvenes que aspiran a una carrera profesional dentro del fútbol colombiano: «Lo primero el joven tiene que querer el deporte, no dejarse ilusionar por el dinero; a veces el joven o el papá que lo lleva de la mano a un equipo o una escuela de fútbol está pensando en cuánto va a ganar; el consejo es que no piensen sólo en eso, que lo importante es que les guste jugar al fútbol y que den todo lo que tengan que dar por el deporte; si hacen bien las cosas, les va a llegar dinero, reconocimiento, familia. Les llega todo».

Lo más importante que le dejó su carrera deportiva es el reconocimiento de la gente: «Donde voy me identifican y me quieren, valoran lo que hice. Además, me dejó muy buenos amigos y, a través del fútbol, conocí y formé una familia, pude apoyar a mis hermanos. Sí, ese deporte fue muy importante porque hizo posible que mejorara la calidad y las condiciones de vida»

Le deseamos un muy felíz cumpleaños!

Marzo 25 de 1928: Nace Sonia Osorio

Nació la que se convertiría en una de las embajadoras del folclore colombiano en el mundo, una mujer cuyo nombre es sinónimo del Ballet de Colombia, un colectivo que fundó cuando en un encuentro folclórico de Ibagué sintió que el futuro de la danza estaba en la estilización.

La chichamaya, Currulao, Carnaval de Barranquilla, Mapalé, Cumbia, La guaneña, Joropo, Abozao, Pasillo y Sanjuanero, son solo algunos de los bailes que dan título a las diferentes coreografías con las que Sonia Osorio recorrió el mundo.

Todo indicaba que la hija de Luis Enrique Osorio, periodista, novelista, dramaturgo y precursor del teatro en Colombia, y de la pianista Lucía de Saint-Malose, y además tataranieta del primer alcalde de Bogotá, Alejandro Osorio Uribe, también ministro de Estado de Simón Bolívar, se convertiría en actriz. Pero fue el impedimento de su padre el que hizo que jamás se volviera a atrever a pisar las tablas; contaba de cuando un director de teatro, amigo de su familia, la escogió para representar a Manuelita Sáenz, su papá la sacó del escenario.

Vivió desde los ocho meses en Barranquilla al cuidado de su abuela materna, la empresaria Elvira de Saint-Malo, dueña de una fábrica de maquillaje, una matrona que la dormía bailando mientras sus padres vivían en Europa. Toda su infancia transcurrió en medio del baile y el teatro que según contaba, la atraía más que los juguetes.

Desde los 3 años comenzó a bailar, y se presentó por primera vez en un homenaje a Gabriela Mistral en Barranquilla. A los 6 años regresó de nuevo con sus padres a Bogotá, quienes por sus trayectorias profesionales la educaron en historia del arte y música clásica.

La vida artística y política de la familia la llevó por muchos lugares del mundo, lo que ella aprovechó para incursionar en danza moderna y folclore con distintos maestros.

En uno de estos viajes conoció a Magda Brunner, primera figura del Ballet de Viena, quien sería su principal maestra. Con el pintor Alejandro Obregón tuvo una historia escandalosa, apasionada y fugaz, propia de dos artistas con un talento desbordado: el uno para la pintura y la otra para la danza. Fueron vecinos de barrio pero se conocieron realmente años más tarde. Fue una noche a la salida de cine, al que él asistió con su padre, quien al ver a Sonia le dijo: ¿Por qué no pintas a esta mujer tan linda? Durante los siguientes días ella fue a su estudio a posar por espacio de una hora. Pero según cuenta la historia, el encargo del retrato se fue demorando a propósito porque ambos querían alargar esos momentos que pasaban juntos. En una de esas sesiones él le propuso matrimonio de la forma más inusitada: «Te invito a que nos muramos de hambre juntos en París, pero te advierto que siempre me levanto de mal genio». El mal genio no era el único inconveniente. Ambos estaban casados. El amor entre los dos fue un escándalo y los padres de Sonia le pidieron que salvara su matrimonio. Ella esperó un tiempo pero no había nada que hacer. Al cabo de un año se separó. Lo mismo hizo el maestro, quien al poco tiempo se la llevó a Paris donde se casaron. Se fueron a vivir a una región vinícola donde subsistían gracias al dinero que les mandaban sus familias. Era tan precaria la situación que ella hacia bailoteos encima de las mesas de los bares a cambio de la cuenta. En esa vida de bohemia, el pasaba sus días pintando y le pedía que bailara para él, quería que desarrollara su pasión plenamente. «Tienes mucho talento para estar lavando ropa. Lo único que me importa es que tú bailes», le decía.  Ella le reclamaba que «para qué, si no me estás mirando», y él le contestaba con amor: «No te veo, pero te siento». Ella dijo alguna vez: «A medias amé varias veces, pero totalmente, a uno sólo».

Alguna vez a Alejandro Obregón le preguntaron si los colores de sus cuadros eran tomados de la danza de Sonia: Francamente no sé, respondió. En París realizó estudios de danza, y cuando regresaron a Colombia tenía claro su vocación de coreógrafa, de creadora, y empezó a participar en el Carnaval de Barranquilla haciendo grandes espectáculos que dieron un giro para siempre al estilo del carnaval.

A la par fundó la Academia de danza Sonia Osorio de Obregón, donde las jóvenes barranquilleras recibían una completa y estricta formación. La Academia se transformó en Ballet Folclórico, la sede se trasladó a Bogotá, y en 1973 fue designado por el presidente Misael Pastrana como el Ballet Nacional de Colombia, infaltable en las fiestas populares y en los carnavales de su Curramba del alma.

Uno de los acontecimientos que marcaron época al inicio de los años 60 en Colombia fue el estreno de un espectáculo que reunía piezas del folclor nacional con una puesta en escena deslumbrante. La orquesta que lo acompañaba era nada menos que la de Pacho Galán, y desfilaban por el escenario danzas y músicas de las dos costas, los llanos y la zona andina. Su estreno en Bogotá tuvo tal éxito que debió repetir función en pabellones deportivos y de exposiciones de alta capacidad. Nacía el famoso Ballet Folclórico de Colombia, que recorrido el país y los cinco continentes con mucho ritmo.

Sonia logró que la danza colombiana fuera entendida y conocida por el mundo. Después de estar cincuenta años al frente del ballet, recibió en el 2010 la cruz de Boyacá; murió diez meses después en Cartagena, a los 83 años.

Sonia tenía la mirada dura y una ganada fama de estricta. Excepcional como mujer, espiritual, apasionada y capaz de derramar lágrimas a torrentes, dicen sus mejores amigos. Terca e impositiva, afirman quienes trabajaron con ella.

Su vida fue una danza, una danza dedicada a Colombia; y estuvo llena de historias, como cuando se presentaron en Japón: «Allá la gente no aplaude, eso es una tradición, sin embargo al Ballet de Colombia le dieron la ovación más grande que recuerde». Les sacaron el alma a los japoneses, dijeron los medios de comunicación.

Marzo 25 de 1947: Aniversario de Elton John

Sí. Hoy apaga las velitas uno de los promotores más importantes en la lucha contra el SIDA, considerada una de las celebraciones de más alto perfil.

Ha ganado cinco premios Grammy, cinco premios Brit, dos de ellos honoríficos por su contribución a la cultura británica a través de su música, dos Globos de Oro, un Tony, un Disney Legends, dos Óscares y el Premio Kennedy.

En el 2004 la revista Rolling Stone lo ubicó en la casilla 49 de su lista de los 100 músicos más influyentes de la era del rock and roll, y en el 2013 fue nombrado por Billboard como el cantante de mayor éxito en el Billboard Hot 100 All-Time Top Artists y tercero en general detrás de The Beatles y Madonna.

En 1994 fue incluido en el Salón de la Fama del Rock y al Salón de la Fama de Compositores, además de ser miembro de la Academia Británica de Cantautores y Compositores. En 1996 fue nombrado Caballero después de ser nombrado Comendador de la Orden del Imperio Británico por la reina Isabel II por sus servicios hacia la música y actos caritativos, y el apelativo de Sir fue añadido a su nombre. La biopic Rocketman, basada en su vida fue estrenada en el 2019.

Registrado con el nombre Reginald Dwight, nació en Pinner. Cierto día la madre encontró al pequeño interpretando en el piano de la casa una melodía que acababa de escuchar en la radio. Desde entonces fue incentivado por su abuela para que tocara el piano y fuera músico; con cuatro años ya podía interpretar melodías simples, y a los siete tocaba música en fiestas familiares. Por aquellos años admiraba a Elvis Presley, Little Richard, Jerry Lee Lewis. Fue educado en la Royal Academy of Music gracias a una beca que consiguió a los 11 años. Actuaba en el coro, pero con el tiempo empezó a darse cuenta de que lo suyo no era la música clásica, por lo que decidió abandonar la institución para dedicarse a lo suyo, la música rock. A los 15 años trabajaba como pianista en un pub, donde le decían Reggie. Allí conoció al cantante Long John Baldry. Como homenaje a él y al saxofonista Elton Dean, adoptó el nombre artístico. Y lo demás es una historia de grandes éxitos.

Marzo 25 de 1994: Muere “La Bruja del 71”

Se nos fue María de los Ángeles Fernández Abad. La eterna enamorada de Don Ramón, La Bruja del 71, nació en Madrid y creció en un ambiente complicado, pero su espíritu de artista nunca se detuvo. En su juventud se unió a los grupos que luchaban contra el fascismo.

Al recrudecerse la represión franquista, en 1947 cruzó el océano y decidió radicarse en México, casi 25 años antes del estreno de El Chavo del 8 que le dió el éxito internacional. En México se hizo actriz y se nacionalizó. Desde 1955 fue protagonista de la época dorada del cine mexicano, participando en películas con el célebre Cantinflas. Dueña de una gran belleza y una fuerte personalidad, se desempeñaba con soltura en los papeles dramáticos. Por eso no le resultó sencillo adaptarse a la comedia con su rol de Doña Clotilde, que además le exigía afearse.

En 1968, en la película Corona de lágrimas, Angelina y Ramón compartieron elenco. Allí se hicieron grandes amigos. Nadie sabe con certeza cuándo ella se enamoró de él. Y así como le ocurrió a Doña Clotilde, tampoco fue correspondida. Como fuera, o quizás, como Angelina pudo, los dos mantuvieron una amistad cercana.

Y su entrada al Chavo del 8 se dió gracias a él. Cuentan que al terminar el entierro multitudinario, Angelina permaneció por más de dos horas junto a su lápida, y entre sollozos se la escuchó repetir una y otra vez: «Te fuiste mi Roro, mi Roro». La Bruja del 71 siguió en la vecindad del Chavo por casi 23 años, hasta que su salud empezó a desmejorar. Se retiró de la actuación en 1991.

El hábito compartido con su gran amigo le provocó la enfermedad, y ese corazón maltrecho de tanto haber latido por Ramón Valdés se detuvo para siempre cuando tenía 71 años. Pero antes de partir había pedido expresamente que se le cumpliera un último deseo: ser enterrada junto a él. Y esta vez sí fue correspondida. Por eso quien vaya a Coayacán, en el sur de la Ciudad de México, podrá dejarles una flor en agradecimiento por tantas risas, y en homenaje a esta mujer que brindó su cuerpo para luchar contra Franco, su alma para subir al escenario, su corazón a un único amor. Porque aquello que le negó el destino lo consiguió ella misma. Desde 1994 está junto a su Roro. Y para toda la eternidad.

No sabía que había tenido una hija. No encontré nada sobre ese capítulo de su vida. Sólo una entrevista que ella dió a un diario mexicano:

«Era de carácter fuerte. Para ella no había medias tintas, era blanco o negro; no podía ser gris. Era una mujer que tenía altos valores y a veces la gente no se los tomaba muy bien; entonces decían que tenía un genio de la fregada. Éramos muy unidas, aunque como en toda familia siempre había el estira y afloja. Cuando yo era joven, me decía: Cuando seas madre me vas a entender. Y es cierto. Cuando eres madre te das cuenta que las cosas no son tan fáciles como parecen. Nunca se cansó de hacer la Bruja del 71. ¡Jamás! Siempre le tuvo muchísimo respeto a don Roberto Gómez Bolaños, incluso se ponía tensa para no quedarle mal a él. Y así era feliz. Al principio le costaba hacer reír a los demás, porque era actriz dramática que nada tenía que ver con la comedia. Aunque los niños en la vida real siempre la imaginaron como una bruja de verdad, y cuando salíamos al supermercado o a pasear al perrito, los chiquitines gritaban: Ahí viene la Bruja; y mi madre se empezaba a mortificar. Me comentaba que se sentía triste porque nadie se le quería acercar; Le tenían miedo! Me daba risa cuando en la vida real se enojaba con los niños igual que con el Chavo y la Chilindrina. Después se acostumbró y no le molestaba que le dijera Bruja.

Puso de su personalidad esas volteadas rápidas y las coqueterías con Don Ramón. La mejor amiga de mi madre fue María Antonieta de las Nieves. Se quisieron mucho; se iban a comer y platicaban. Era una amistad muy hermosa. Fumaba como chacuaco y sufría de hipertensión arterial. No se cuidaba y anteponía el trabajo a la salud. Desde que se levantaba se la pasaba viendo televisión. Se dormía con la tele prendida, y le encantaba convivir con sus nietas. Fue una mujer feliz, se realizó como madre y artista, le dieron sus medallas en la ANDA por su trayectoria, aunque en ocasiones se sentía triste porque toda su familia estaba en España».

Marzo 24 de 1905: Muere Julio Verne

Muere uno de los autores más conocidos y apreciados de la Historia de la Literatura, un precursor de la literatura de ciencia ficción que predijo en sus fantásticos reportajes la aparición de algunos inventos creados con los avances tecnológicos del siglo XX.

Nació en una familia burguesa y pasó su infancia entre Nantes y en la casa de verano de la familia cerca del puerto, lo que le permitió monitorear su actividad, y probablemente despertó su interés por los viajes y las aventuras. A los ocho años entró al Seminario y luego estudió filosofía y retórica. La leyenda familiar cuenta que a los 11 pasó por su primera aventura cuando se enamoró de una prima y se dispuso a embarcarse hacia la India con el propósito de comprar un collar de coral para obsequiarla. La aventura fue interrumpida por su padre al descubrir el plan, quien, según la historia, le hizo prometido que viajaría solo en su imaginación y fantasías. Durante su vida, nunca viajó mucho, solo hizo viajes cortos en su yate Saint-Michel, que nombró en honor a su hijo. Visitas rápidas a Inglaterra, Escocia y otros destinos cercanos, y un viaje en barco a los EE. UU. Sin embargo, en sus libros, viajó por el mundo, desde África hasta la Antártida. Para seguir la tradición familiar, y complacer a su padre, lo acompañó en su traslado a París en busca de una mejor clientela. Allí estudió, dividiendo su tiempo entre la facultad de derecho y las tertulias literarias, a las que le había presentado su tío, y pronto mostró más interés por la literatura y el teatro. A los 20 años comienza a escribir sonetos y obras de teatro. Presentó su tesis doctoral, pero después de graduarse optó por la carrera literaria, por lo que perdió la ayuda de su padre. Incapaz de vivir exclusivamente de la escritura, aprovechó su título de abogado y trabajó como operador financiero, como secretario en el Teatro Lírico, y publicó algunos textos en periódicos y revistas. El comienzo de su carrera, como suele ocurrir con todos los grandes escritores, está marcado por dificultades. Su primera obra, Cinco semanas en globo, fue rechazado por las editoriales, con acusaciones de ingenuo intento de predecir el futuro, hasta que se publica en la revista Magazin d’Éducation, lo que resulta en un gran éxito de público y crítica. Su carrera literaria comenzó a destacarse realmente cuando gracias a su amigo Alexandre Dumas hijo conoció al editor Hetzel, el editor más influyente de París, quien se interesó por sus textos, publicó su primera gran obra y le propone escribir al menos un libro al año, animándolo a continuar con el tema de la novela de aventuras y fantasía. Y desde entonces adoptó la literatura como profesión. 1870 se instaló en Amiens, ciudad de origen de su esposa: «París me pone nervioso, mucha emoción, mucho ruido. No hay hora de calma y tranquilidad». Vivió 20 años en Nantes, 23 en París y 34 en Amiens. Escribió hasta 1905, año de su muerte, a los 77 años. Julio Verne entendió perfectamente las preferencias de lectores de todas las edades, logrando, como pocos, captar su atención. Sus obras fueron premiadas por la Academia Francesa de Letras, y sus novelas tuvieron numerosas adaptaciones cinematográficas. El 24 de marzo de 1905, le pidió a un sirviente una copia del libro Veinte mil leguas de viaje submarino, le preguntó por su esposa e hijos, cerró los ojos y murió, después de un largo período de enfermedad. Pero sus obras, así como su popularidad, se mantiene intacta. El nombre de Jules Verne se convirtió en un mito universal e inmortal.

Marzo 24 de 1930: Nace Steve McQueen

Nació el que sería la estrella de cine masculina de la década del 60, pasando de ser un joven con problemas a convertirse en el actor más popular del mundo, al que los estadounidenses consideraban el Rey de lo cool. Más de 40 años después de su muerte prematura en 1980, a Steve McQueen, el actor que consideró a Jacqueline Bisset como la actriz más bella con la que trabajó, todavía se le considera moderno y genial, y perdura como un ícono de la cultura popular.

Parece a propósito: nació en el suburbio de Indianápolis, se convirtió en piloto profesional y tenía una fascinación especial por Le Mans, donde rodó una de sus películas más famosas. Nunca supo responder con sinceridad si prefería un buen par de piernas o cuatro ruedas «Aunque también soy un gran entusiasta de las dos ruedas, de las motos, quiero decir». Disléxico y parcialmente sordo debido a un problema de nacimiento, Steve quedó encantado con un triciclo que le regaló su tío cuando tenía cuatro años, y rápidamente fue organizando carreras con cualquier vecino que lograra sacar un vehículo en las calles del barrio donde nació. Al morir su padre, abandonado a su destino, se convirtió en un vagabundo, dedicándose a crímenes de medio ladrillo, y huyendo del nuevo marido de su madre, al que describía como un bastardo. En 1944 lo inscribieron en una comunidad de tratamiento para jóvenes con problemas. En años posteriores se refirió a su estadía como «lo mejor que me ha pasado, allí me enderezaron». Se unió a la Infantería de Marina a los 17 años donde trabajó como conductor de tanques y mecánico, con el orgulloso honor de ser despedido por indisciplina. Nadie podía imaginar que el chico tomaría un camino decente, pero lo cierto es que en 1950 decidió estudiar teatro con el dinero que ganaba participando en carreras de motos en Long_Island. Compró una Harley y se volvió tan bueno en las competencias que pronto comenzó a llevarse a casa unos buenos $ 100 a la semana, una suma muy razonable para la época. Fueron las motos las que lo empujaron a las películas. A los 25 años se trasladó a California y empezó a tocar puertas en busca de trabajo como actor. Un productor y director simpatizó con el niño y su insolencia. Lo puso bajo su ala protectora y le dio papeles menores en películas igualmente menores. En una de ellas conoció a Paul Newman, otro fanático de la velocidad, con quien crearía una fuerte amistad y una fascinante rivalidad. Con su vida en el cine puesta en marcha, además de haberse convertido también en una especie de protegido del gran Sinatra, en 1960 entró definitivamente en la historia del séptimo arte con Los siete magníficos. Y no desperdició la oportunidad de ser el nuevo «cool» de Hollywood, adoptando también la condición de rompecorazones. En esa etapa, ya pasaba más tiempo comprando automóviles y motocicletas que estudiando papel para películas. Había suficiente dinero y suficiente para comprar sus juguetes:»Me gustaría gastar un buen dinero en coches de todas las marcas y modelos». Confesó meses antes de su muerte que se quedó con la frustración atascada en la garganta de no poder nunca comprar el Ford Mustang que condujo durante la película Bullitt y que había sido especialmente modificado para adaptarse a su estilo de conducción. La forma increíblemente fanática en la que se enamoró de la velocidad lo convirtió en una figura separada en el esnobismo de Hollywood. La década de 1970 es recordada por varias películas de desastres, y él participó posiblemente en la más grande, Inferno en la Torre, aunque no aparece hasta aproximadamente la mitad. Fue su último papel cinematográfico durante varios años a pesar de que le ofrecieron varios multimillonarios. Hizo una pausa de cuatro años y estuvo viajando por los Estados Unidos en sus motocicletas antiguas. Tras el enorme éxito de la película anunció que cualquier productor que quisiera sus servicios tendría que enviar un cheque por 1.5 millones de dólares junto con el guión. Si le gustaba el guión y quería hacer la película, cobraría el cheque. A su regreso le pagaban el doble.

No duró mucho en el mundo de los vivos. En 1978 desarrolló una tos persistente. Dejó de fumar cigarrillos pero continuó fumando tabacos. Una biopsia reveló un cáncer de pulmón poco común asociado con exposición al asbesto, que se pensaba estaba en los trajes de protección que usaba en sus días de conducción de autos de carrera. De su amor de toda la vida por el automovilismo, una vez comentó: «Las carreras son la vida. Cualquier cosa antes o después es sólo esperar». Finalmente los médicos declararon que era más probable que su enfermedad fuera resultado de una exposición masiva al remover el asbesto de las tuberías a bordo de un barco mientras estaba en los Marines. Viajó a México para un tratamiento poco convencional que usaba enemas de café, lavado frecuente con champús, inyecciones diarias de un líquido con células vivas de vacas y ovejas, masajes y un tratamiento supuestamente natural con un medicamento contra el cáncer disponible en México, pero no aprobado por la Administración de Drogas de su país. Regresó a los Estados Unidos donde un equipo médico anunció públicamente que se curaría por completo y volvería a la vida normal; pero su condición pronto empeoró y voló a Ciudad Juárez a realizar un intervento a pesar de las advertencias de sus médicos de que su corazón no podía soportar la cirugía. Se registró en una clínica con el alias «Sam Shepard», donde médicos y personal desconocían su identidad real. La muerte lo atrapó dolorosamente a los 50 años después de la cirugía. Una edad en la que muchos comienzan sus vidas de nuevo. Tenía fama, tenía dinero, tenía mujeres, pero el cáncer lo atrapó en una curva de la existencia con la brutalidad de un bólido. Sus cenizas fueron arrojadas a las olas del Pacífico. Capítulo final de una vida vivida a más de 200 kilómetros por hora.

Su nombre de alguna manera apareció en la lista de enemigos del presidente Richard Nixon en 1972. McQueen era conservador en sus creencias políticas, y ya en 1968 se había negado a unirse a muchos de sus pares de Hollywood para apoyar la campaña presidencial de Robert F. Kennedy. En 1973 The Rolling Stones se refirió a él en la canción «Star Star» para la que, según se informa, un divertido McQueen dio permiso personal. Obtuvo una licencia de piloto privado por la FAA en 1979 después de aprender a volar en un biplano Stearman, que compró para ese propósito. Después de su muerte se vendió en una subasta, junto con su gran colección de vehículos. A pesar de que sus dos únicas apariciones en los Premios de la Academia fueron como presentador, fue galardonado póstumamente con una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood en 1986. En 1997 ocupó el puesto 30 en la lista Las 100 mejores estrellas de cine de todos los tiempos, y Homer Simpson lo nombró como su héroe personal en un episodio de Los Simpson. En el 2012 fue honrado póstumamente con el Premio Tributo Warren Zevon otorgado por la Organización de Concientización sobre la Enfermedad del Asbesto. Se convirtió en un cristiano renacido poco antes de morir, y realizó estudios bíblicos, pero ocurrió antes de que le diagnosticaran el cáncer, lo que significa que probablemente fue genuina.

Marzo 24 de 1954: Nace Rafael Orozco

Nació en el hogar de Rafita Orozco y Cristina Maestre, en Becerril, descrito por él como «Un pueblo bucólico del Cesar bañado por el río Maracas, donde viven los pequeños y simpáticos indios Yucos, un pueblo de gente buena, de gente amorosa, que gozaba con ver morir la tarde al vaivén de un mecedor en la puerta de la casa». Desde niño realizó trabajos menores para contribuir con la supervivencia de una familia numerosa compuesta por trece hermanos, cinco hombres y ocho mujeres. Montado en el Ñato, un burro que se convirtió en su acompañante incondicional, transportaba cargas de agua que recogía en el río y las vendían en la ciudad. En la orilla del río nacieron sus primeros versos, y el ñato fue el primero que disfrutó de sus canciones románticas. Si hubiera podido elegir habría sido un notable ejecutante del acordeón, en lugar de lo que fue: un vibrante cantor vallenato. Por lo menos eso fue lo que más le gustaba de niño. Y debía ser así si hubiera seguido la tradición que le marcaba su viejo, quien animaba cuanta parranda se organizaba en Becerril y en sus alrededores. Pero la madre le quitó la idea: «Eso no sirve pa’ na’ mijo», le decía siempre. También cantaba rancheras que aprendía en películas mexicanas exhibidas en el teatro del viejo Juan, y baladas de Yaco Monti, que en esa época era su cantante preferido​.

En una Semana Cultural para seleccionar al mejor cantante aficionado, resultó vencedor en una confrontación artística ante personajes como Juvenal Daza, Octavio Daza y Diomedes Díaz. Bajo el entusiasmo del éxito alcanzado comenzó a sacarle partido a lo que había comenzado como una simple afición, y aceptó ser el cantante de algunos conjuntos, pero solo para animar fiestas privadas, pues nunca grabaron. Grabó por primera vez con el acordeonero Emilio Oviedo en 1975. Rafael Orozco Maestre se dio a conocer como una alternativa moderna en el canto vallenato, integrando conjuntos de oportunidad con los que consolidó su propio estilo, diferente del que en esos momentos se imponía en el gusto de los seguidores del vallenato clásico, de Alfredo Gutiérrez, Jorge Oñate, Los Hermanos Zuleta. Se conoció con Israel Romero, un acordeonero de Villanueva reconocido en toda la Provincia, en un colegio de Manaure. De manera casual se encontraron en el cumpleaños del rector de la Universidad Autónoma del Caribe; Rafael le pidió a Israel que lo acompañara con su acordeón, y así fué, improvisaron por primera vez juntos aquella noche, pero fue tan exitosa su presentación que todo el mundo quedó encantado, y los muchachos escucharon por primera vez la frase que durante días seguirían escuchando ¿Porque ustedes dos no se unen?. Se compenetraron desde el primer momento, y pocos meses después se cristalizó el nacimiento de El Binomio de Oro, con el que formaron la pareja más seria e importante en la historia del folclor vallenato. Impusieron el lenguaje romántico para interpretar canciones vallenatas que sirvieron de aliciente al espíritu de los enamorados, y se hizo merecedor de tres Congos de Oro, 16 discos de oro y dos de platino por ventas millonarias, distinciones y galardones en Venezuela, Panamá y Estados Unidos. Incursionó como compositor de excelentes condiciones cuando la musa lo sorprendió haciendo un canto para la mujer que amó toda la vida, la novia de siempre, Clara Elena Cabello, titulada Solo Para Ti. Cerca de Becerril, a hora y media por carretera, está Urumita, otro pueblito como sacado de un cuento, donde la gente nació para ordeñar vacas y criar hijos. Allí vivía ella, una trigueña encantadora, que un día fué a pasar vacaciones a Becerril sin saber que ese viaje cambiaría su vida. Decía: «Para mi cantar es todo, porque es lo que me ha brindado la vida todo, mis amigos, todo lo que tengo, mi esposa, mis hijas, el cariño de la gente, todo lo que yo he logrado se lo debo al canto». Murió en Barranquilla en 1992, asesinado en las puertas de su casa cuando tenía sólo 38 años. A «Rafa» lo quisimos todos, menos una persona que le quitó la vida. Murió el poeta, mas no sus cantos. Y en Becerril quedó demostrado que el tiempo pasa pero el recuerdo de ese hijo querido se quedó para siempre. La presencia del ídolo que pasó por el Madison Square Garden, ese mismo que regaló emociones a sus miles de seguidores y que todavía a pesar de su partida se escucha, está presente principalmente en la plaza principal donde ahora hay un monumento en su honor, del escultor Misael Martínez.

Marzo 24 de 1992: Muere Humberto Monroy

Muere el que es considerado uno de los pioneros del género rock en Colombia.

Cuentan que su primer instrumento fue una marimba que le regaló su abuela cuando tenía 14 años. Su familia creía que iba a ser abogado por la facilidad que tenía a la hora de expresarse, pero además de la música lo único que le llamaba la atención era la agronomía, carrera que al final nunca estudió pues se dedicó por completo a la música. Humberto Monroy dedicó toda su vida a la música desde que era muy joven hasta su repentina muerte en 1992. Era un amante de la naturaleza, tema que a su vez lo inspiró para componer canciones. A los 15 años inició su carrera musical en el grupo Los Dinámicos, que interpretaba covers de bandas rock mexicanas. En 1964 fue uno de los fundadores de The Speakers, una de las primeras bandas colombianas de rock, claramente influenciada por The Beatles y con la cual grabó 5 discos, entre ellos uno de los álbumes insignía de la psicodelia de Colombia, En el maravilloso mundo de Ingesón, que además se convirtió en uno de los primeros trabajos fonográficos grabados de manera independiente en el país. Con Los Speakers pasó a tocar el bajo y compuso sus primeras canciones. En 1969 integra la agrupación Siglo Cero, que fue un grupo de música progresiva, con composiciones propias y con muchas influencias jazzísticas. En 1970 salió al mercado su único larga duración, Latinoamérica, grabado en un concierto en el Parque Nacional de Bogotá ante unas 14 mil personas. Lastimosamente el éxito no acompañó al grupo que terminó disolviéndose ese mismo año. Se destacó en los años setenta como integrante del grupo Génesis, en el que se desempeñó como líder, cantante y compositor de la banda que se convirtió en una de las primeras que generó una representación de los cambios que los jóvenes vivían en la época. Con Génesis grabó 7 discos de larga duración y algunos temas suyos lograron mucho éxito. Cómo decirte cuánto te amo creo que lo recordarán. En 1983 el objetivo del grupo era viajar a Europa pero como existía en ese continente una banda de mismo nombre, debido a unos inconvenientes la banda al final no logró viajar, desvaneciéndose el sueño de visitar el viejo continente.

Fueron 30 años en los que integró importantes grupos experimentando sonidos que van desde el rock psicodélico, el rock progresivo y el folk rock en Génesis. A excepción de otros músicos pioneros de la década del 60 que se establecieron en el extranjero, Humberto no abandonó el país, llevando su música a todas las regiones y rincones. Humo le enseñó a Colombia a escuchar rock. Murió a sólo 46 años y en el 2015 se estrenó en el teatro La Candelaria de Bogotá la obra Humo, un homenaje póstumo a la vida y trabajo musical del grupo Génesis de Colombia y su protagonista, Humberto Monroy. Dirigida por Lizardo Flórez Medina narraba los sueños, frustraciones y vivencias de la banda a través de las décadas.

Marzo 22 de 1923: Nace Marcel Marceau

Nació en Estrasburgo el que se convertirá en el actor y mimo que llevó su arte silencioso a todo el mundo. El héroe que salvó de los nazis a cerca de 400 niños antes de convertirse en el mayor mimo de la historia; un ser humano que merece ser recordado.

«La gente que volvía de los campos de concentración no podía hablar, ni siquiera sabía cómo contar todo lo vivido. Yo me apellido Manguel, y tengo origen judío; tal vez eso haya influído inconscientemente en  mi elección del silencio». Estas fueron palabras del mimo más aplaudido de la historia, quien con sus talentosos movimientos hizo reír a cientos de audiencias, mientras que en su memoria existía un pasado lleno de tristeza. Era hijo de un carnicero judío cuando los nazis llegaron a los pueblos de Alsacia y Lorena en 1939. Se encontraban bajo el dominio francés y era una de las ambiciones de Adolfo Hitler. Una vez tomados, los judíos fueron deportados al suroeste de Francia. Entre ellos la familia Manguel. Marcel era un adolescente de 16 años y se negó a sumarse a las largas filas de deportados, así que con su hermano, cambiaron su apellido inspirándose en François S. Marceau, un general de la Resistencia Francesa. Se unieron a la resistencia, donde se batieron con coraje en las fuerzas de la Francia Libre de Charles de Gaulle, y se dedicaron a hacer documentos falsos para poder poner a niños a salvo. También ayudaron a muchos judíos a ir a Suiza, que era un lugar neutral y seguro durante la Segunda guerra. Al terminar la guerra supo que su padre había sido apresado por la Gestapo y deportado al campo de exterminio de Auschwitz, del que nunca volvió.

La historia habla de una larga lista de niños caminando por una carretera entre Francia y Suiza, dirigidos por un hombre extraño. Una especie de payaso que bailotea, hace piruetas, no habla, y con un dedo índice cruzado sobre los labios, les pide silencio. Los niños son judíos. Los comanda Georges Loinger, primo del danzarín, y jefe de la unidad secreta de Oeuvre de Secours aux Enfants, un grupo judío de ayuda que sacaba a niños, también judíos, del horror de la Francia ocupada por los nazis. El payaso danzarín y silencioso era Marcel Manguel, que después de la guerra fue llamado El poeta del silencio, arte que lo ayudó en su misión salvadora: «Viajar con grandes grupos de ellos no era nada fácil, y muy peligroso, porque los soldados nazis de los retenes eran estúpidos, pero no tanto. Mi arma secreta era mi entrenamiento como mimo. Jugábamos a que nadie hablara. Ni yo ni ellos. Marchaban, se reían, creo que me amaban, y sé que muchos años después comprendieron que yo luchaba por sus vidas.»

Luego para Marcel empezó una segunda y luminosa vida. El instante de inspiración llegó en la oscuridad de un cine. En la platea estaba él y en la pantalla Charles Chaplin, Charlot. Cuando salió a la calle, esa segunda vida estaba casi marcada. Su admiración por Chaplin lo llevó a interesarse por la actuación, se inscribió en la Academia de Arte Dramático Charles Dullin y su talento no tardó en abrirse paso. Unido ya a la compañía, le dieron el rol de Arlequín y de ahí en adelante su talento fue siempre reconocido y aplaudido.

Llegó 1947, y acaso imitando a Chaplin, entró en una sala de vestuario y eligió para la eternidad el bombín, el bastón, unos imposibles y anchos pantalones, y unos zapatones. Y se transformó en «Bip», con su cara pintada de blanco, sus labios de intenso rojo, un suéter con rayas a medio pecho, un sombrero de copa aplastado y adornado por una flor algo marchita que, según él, simbolizaba la fragilidad de la vida, su efímera existencia, y calló: condición sine qua non del mimo. Lo que siguió fue una vida de éxitos en la que millones lo aplaudieron de pie. Se convirtió en el Mimo triste como el vagabundo de Chaplin, con unas manos muy expresivas y un cuerpo adaptable a todo rol, y logró hits inolvidables en teatros de todo el mundo con más de trescientas representaciones por año, casi una por día. Bip con mariposas, con leones, en barcos, trenes, restaurantes, caminando contra el viento, siempre a mitad de camino entre las dos máscaras del teatro: Tragedia y Comedia. De su pieza breve «Joven, maduro, anciano y muerte» dijo un crítico: «Logra en menos de dos minutos lo que la mayoría de los novelistas no logran en sus volúmenes». En 1948 fundó su Compañía, la Escuela de Mimos de París, la única de pantomima de la época, y se presentó en los mejores teatros. Durante 40 años la actividad fue duradera y exitosa, y es reconocido como uno de los mejores de la historia, capaz de hacer  reír y llorar sólo con mudos movimientos y con esa magia comunicativa que lograba con su cara, su cuerpo y sus gestos. Marcel Marceau logró, en cada interpretación cautivar a los espectadores mezclando la acrobacia, el ballet, el ilusionismo y la genialidad.

En sus entrevistas siempre afirmó su credo: «No hablo: basta ese grito interior para desnudar el alma. Trabajo por la paz, soy un activista de esa causa tantas veces perdidas. Bip es un héroe sin edad, sin época, y con eterna esperanza. El silencio es infinito: los límites los pone la palabra» Y una fina broma: «Nunca le pidan a un mimo que hable: ¡jamás se callará!». Pasó por el cine con La última locura de Mel Brooks; es el único personaje que habla: dice «¡No!, y ni una palabra más, siempre fiel a su credo.

Murió el 22 de septiembre del 2007, a sus 84 años, y está sepultado en el mítico Cementerio de Père-Lachaise, junto a los más grandes de los grandes: de Oscar Wilde a Chopin, de Edith Piaf a Jim Morrison. Por su heroísmo durante la Segunda Guerra Mundial le fue concedida la Legión de Honor, y por su vida y obra como artista, las de Caballero de la Orden de las Palmas Académicas, y Comendador de las Artes y las Letras. El 22 de septiembre fue declarado Día Internacional del Mimo por iniciativa del actor y mimo francés Jean Bernard Laclotte, quien propuso festejar este arte en conmemoración al día de su muerte.

Una curiosidad: hay un comercial colombiano producido por Manfred Hirschcon, un director y productor de cine caleño, hijo de judíos. Ahí se los dejo.

Marzo 22 de 1945: Nace Leo Dan

Nació el que es considerado uno de los cantautores más importantes de Latinoamérica, uno de los principales representantes argentinos de la Nueva Ola que marcó la música hispanoamericana entre los años sesenta y setenta, y el que con su música ha conquistado el corazón de todos los países de habla hispana. Siempre Estoy Pensando En Ella, Cómo Poder Saber Si Te Amo, Cuando un amor se va, y tantas otras, para una generación son inolvidables.

Leopoldo Dante Tévez nació en Atamisqui, un pueblito en la provincia de Santiago del Estero, Argentina, en una familia de origen quichua. Cuenta que se vinculó con la música por iniciativa propia. A los cuatro años aprendió a tocar la armónica y la flauta, sus primeros instrumentos. A los 11 aprendió a tocar la guitarra, y comenzó a componer sus primeras canciones. A los 18 formó un grupo de rock llamado Los Demonios del Ritmo, junto con amigos de su edad, y a los 20 viajó a Buenos Aires con el deseo de triunfar. Se presentó en CBS (la Sony Music de hoy), donde inmediatamente firmó su primer contrato discográfico. Su primer gran éxito, Celia, llegó a los primeros lugares en los rankings de popularidad a la semana de haber salido al mercado, y le siguieron muchos más. En 1966 se casó con Mariett, elegida Miss Mar del Plata ese año, y decidieron trasladarse a España, donde siguió grabando, y nacieron éxitos como Mary Es Mi Amor, una de mis favoritas. Tuve un enamorado que me la cantaba muy bonito, pero con mi nombre. Me dejó y no se murió y fue feliz con otra, pero vale recordarlo. :-).

Les dejo el enlace del video donde la canta con nuestro querido Andrés Cepeda

En 1970, debido al gran éxito que estaban teniendo sus composiciones, decide irse con su familia a la capital azteca, donde vivieron 10 años. México lo recibió con gran afecto y se puso al top de los rankings. Fue el primer baladista que grabó con mariachis y obtuvo grandes éxitos. En 1980 decidió volver a su querida Argentina donde entró en el terreno de la política, siendo candidato a gobernador de Santiago del Estero, pero sin abandonar la música. Luego decide vivir en Miami, desde donde siguió grabando y componiendo a la par que continuaba sus presentaciones por toda Latinoamérica, Estados Unidos, Australia, Europa, y Canadá. En el 2012 recibe el Premio a la Trayectoria en la ceremonia de los Latin Grammy. En el 2018 sale el CD+DVD en vivo, Celebrando A Una Leyenda, que cuenta con importantes invitados como Vicente Fernández, Ricardo Montaner, Palito Ortega. En el 2019 recibió un merecido homenaje al recibir una Estrella en el Paseo de la Fama de Plaza México de Lynwood, California. A comienzos del 2020 lanzó Cuando un Amor se Va, al lado de la cantautora española Natalia Jiménez, y Celebrando a una leyenda. Segunda Parte. En sus más de 60 años de trayectoria, Leo Dan ha compuesto más de 2000 canciones, ha grabado más de 36 álbumes, sus temas han sido grabados en diferentes géneros: romántico, folklore, tropical, cumbia, banda, tango, ballenato y rancheras, y sus composiciones han sido traducidas al italiano, portugués, alemán, francés, ingles y japonés, y han sido interpretados por renombrados artistas. Ha vendido más de 40 millones de copias en todo el mundo, ha realizado 4 películas, y escribió un libro, Un Pequeño Grito de Fe, donde refleja sus pensamientos sobre la vida. Es un hombre profundamente religioso. La pandemia detuvo sus giras pero sigue activo en las redes.

Marzo 22 de 1987:Aniversario de Jessi Uribe

Hoy apaga las velitas!. Nació en Bucaramanga y creció en un medio musical: «Mi papá era mariachi en Bucaramanga, y yo crecí influenciado por él; me llevaba a sus presentaciones en una discoteca reconocida de la ciudad, así que a mis 15 años empecé esta aventura con un grupo de mariachi cantando en diferentes escenarios. Cobraba 10 mil pesos por serenata y me hacía unas cuatro al día; con eso ayudaba con los gastos de la casa pues vivíamos en unas condiciones muy precarias»

Jessi Uribe logró involucrarse en la industria musical tras pasar por diferentes agrupaciones regionales, su talento representó a Colombia en el concurso Latín America Idol, donde fue elegido entre 30.000 participantes; 20 de Colombia fueron a representarnos en Argentina, logrando así formar parte de los 50 mejores de Latinoamérica.

Tras participar en La Voz Colombia en el 2013 logró hacer varias presentaciones y producir su primera canción, Vuelve a ser mi novia. Dice que su sonido marcadamente norteño no le funcionó en el mercado, pero su persistencia y fe en sí mismo fueron más fuertes. Se presentó en búsqueda de una oportunidad en el reality A otro nivel, y llegó a las finales: «Haber llegado a la final de ese reality me cambió la vida, al punto que me puso a estar del otro lado, como jurado, (En el 2019 fue escogido para formar parte del jurado de Yo me llamo), era algo que no me creía y que vine a tomar conciencia cuando firmé el contrato con el canal. Ese día me di cuenta que los sueños realmente se cumplen. Hay mucha gente que renuncia a sus metas y deciden no presentarse más a un concurso porque los eliminan. A mí me pasó en el 2013 y eso me dio muy duro, pensé en no cantar más, en retirarme por esa puerta que se había cerrado; pero no hay que darse por vencido tan fácilmente y decidí seguir adelante sin importar las críticas, así que cerré los ojos y decidí trabajar por mis ideales. Luego de participar en A otro nivel ya me salían entre tres a cuatro presentaciones al mes, por las cuales cobraba hasta 8 millones, y todo empezó a mejorar». Su primer tema popular fue Repítela, y luego produjo Dulce pecado, con el que toda Colombia lo conoce: «Todo dio vuelta en mi vida cuando lancé Dulce pecado, con la que me volví muy popular, hoy ya tiene más de 300 millones de visitas, y creo que con mis otros éxitos ya me puedo dar el lujo de cobrar lo que merezco, de 25 millones pa’ arriba». En el 2020 hizo una aparición en la novela Amar y vivir donde debutó como actor como él mismo cantando. En el 2020, a pesar de la situación mundial, continúo sorprendiendo a sus fans con una serie de lanzamientos y colaboraciones musicales, cerrando el año con broche de oro con la canción Una Oportunidad, que debutó como la banda sonora de la telenovela Mexicana Quererlo Todo de Univisión. Empezó el 2021 pisando fuerte con un nuevo estreno, El Alumno, que logró rápidamente superar los 3 Millones de visitas en YouTube. Dice que sigue trabajando en su carrera musical para seguir sorprendiendo y ganándose el corazón de sus fans quienes son parte importante de su gran crecimiento y éxito musical.

Cuando le preguntaron qué tiene el género popular que gusta tanto, respondió: «El sentimiento, logra meterse en el corazón de todo el que la escucha, porque está hecho desde el pueblo y para el pueblo. Yo soy de los que me gusta hablar mucho con la gente. Si me invitan a comer marrano lo hago y me ensucio las manos, porque finalmente me debo es a ellos, nuestros seguidores son los que pagan la boleta para vernos cantar»

No pierdas la fe, es una frase que tiene tatuada en el antebrazo derecho, y siempre habla de lo bendecido que se siente al ver cómo la vida le cambió para bien en un abrir y cerrar de ojos. «Soy un ejemplo de que los sueños sí se cumplen».

Marzo 22 de 1994: Muere Walter Lantz

Muere el hombre que salió de las filas de los pioneros de la animación para construir un imperio de dibujos animados multimillonario, y una reputación mundial respetada con la creación de un pájaro carpintero antropomórfico y leñoso

Walter Lantz nació en New Rochelle. Sus padres eran originarios de Italia, y desde pequeño mostró una inclinación hacia el dibujo artístico, que lo llevó a suscribirse a unas clases de dibujo por correspondencia que completó a los 12 años. Trabajó como mecánico para subsistir, pero los dibujos con los que decoraba su taller llamaron la atención de un cliente, quien lo animó a estudiar en el New York City’s Art y le consiguió un nuevo trabajo como repartidor en un periódico, lo que no impidió que continuara los estudios en la escuela de arte. En 1935 empieza como productor independiente dando animaciones a Universal en vez de sólo supervisar el departamento de animación, y en 1940 hizo la primera aparición el Pájaro Loco en un episodio llamado Knock Knock, con la voz de Mel Blanc, quien luego abandonó el estudio. Cuentan que la inspiración para el personaje le vino durante su viaje de luna de miel en June Lake, California en 1941​. Un insistente y ruidoso pájaro carpintero no dejaba de taladrar su techo y mantuvo a la pareja despierta casi toda la noche. Cuando comenzó una fuerte lluvia, se enteraron de que el pájaro había hecho varios agujeros en el techo de su cabaña. Muy molesto, Walter quería dispararle, pero al final solo salió fuera de la casa y le arrojó una piedra para espantarlo, cosa que logró, no sin que antes el ave emitiera un grito muy particular que fue el que dio origen a la risa estridente y característica de su personaje. Gracie le sugirió a su esposo que hiciera una caricatura sobre el pájaro, y aunque al inicio él estuvo escéptico sobre sus posibilidades, así fue como nació. Por algo dicen que detrás de todo hombre de éxito hay una mujer que le da ideas.

En 1950 cuando Mel Blanch dejó el estudio: «Busqué tratando de encontrar el reemplazo adecuado. De hecho, usamos al escritor durante bastante tiempo, acelerando su voz a un falsete». Sin embargo, fue la risa de Mel Blanc, conservada en un segmento de la película del debut, la que siguió escuchándose en la mayoría de los dibujos animados que siguieron. Por eso lo demandó alguna vez por medio millón de dólares argumentando que usó su voz en varios dibujos animados sin su permiso; aunque Walter Lantz ganó el caso, pues Blanc no registró nunca su voz ni sus contribuciones, le pagó el dinero en un acuerdo fuera de la corte, y fue en busca de otra voz para el Pájaro Loco haciendo audiciones anónimas. Grace su esposa le ofreció hacerla, pero no aceptó. Sin rendirse, ella secretamente mandó su cinta anónima para que la oyeran. Fue la elegida, y Grace hizo la voz del Pájaro Loco hasta su muerte en 1992, a los 88 años. Al principio no quería aparecer en los créditos pues pensaba que los niños se decepcionarían al saberlo; sin embargo su nombre finalmente apareció en pantalla y ella disfrutó ser conocida como la voz del personaje.

La generación que vio esos dibujos animados lo conoció y lo quiso como el creador del Pájaro Loco, hizo varias apariciones donde explicaba cómo era el proceso de la animación, y esa misma generación lo vio entreteniendo a las tropas en la Guerra de Vietnam y visitando a los veteranos hospitalizados. Cerró el estudio en 1972 pero siguió administrando los trabajos con repeticiones. En 1979, 5 años después de que se produjera la última caricatura, recibió un Premio especial de la Academia «Por llevar alegría y risa a todas las partes del mundo». En 1986, a los 86 años, recibió una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood. En 1993 estableció un premio anual de animación de US$10.000, y una beca a su nombre en el Instituto de Artes de California: «He estado en esto desde que tenía 16 años y lo he hecho muy bien. Me gustaría hacer algo por alguien más», dijo en ese momento. Murió de una insuficiencia cardíaca a los 94 años y todavía le damos las gracias por habernos sacado tantas sonrisas en esas mañanas de fin de semana.

Marzo 22 del 2001: Muere William Hanna

Muere en Los Ángeles el cofundador del estudio de animación Hanna-Barbera. William Denby «Bill» Hanna nació en  Nuevo México en 1910. Su padre era un superintendente de construcción para ferrocarriles, así como de sistemas de agua y alcantarillado en todo el oeste de América, por lo que la familia se mudaba con frecuencia. Finalmente se establecieron en Watts, California en 1919. Allí Hanna se convirtió en Eagle Scout y permaneció activo en el Movimiento durante toda su vida. También sonaba el saxofón en una banda de baile. Esa pasión por la música se trasladó a su carrera cuando ayudó a escribir canciones para sus dibujos animados, incluído el tema de Los Picapiedra. Estudió periodismo e ingeniería estructural, pero tuvo que abandonar la universidad con el inicio de la Gran Depresión, época en la que comenzó su carrera en el mundo de la animación. Tras desempeñarse en varios trabajos esporádicos durante la crisis económica, se integró al estudio de animación Harman-Ising en 1930, y su participación en dibujos animados como Captain and the Kids le permitió obtener una mayor experiencia y notoriedad en la industria. En 1937, mientras trabajaba en Metro-Goldwyn-Mayer, conoció a Joseph Barbera. Los dos rápidamente se dieron cuenta de que harían un buen equipo. Ambos comenzaron a colaborar conjuntamente, de lo que resultaron producciones como Tom y Jerry. Hanna dijo que se decidieron por el tema del gato y el ratón porque: «Sabíamos que necesitábamos dos personajes. Pensamos que necesitábamos conflicto, persecución y acción. Y un gato tras un ratón parecía un pensamiento bueno y básico. Todo el mundo nos tomó por locos. ¿Una película con un gato y un ratón? Eso es lo más antiguo que existe. Está muy manido», recordó él de unos comienzos que producirían más de 3.000 películas de dibujos animados para televisión. Tom y Jerry fueron finalmente nominados a 14 premios de la Academia, ganando 7. Cuando MGM cerró inesperadamente sus puertas a la animación, fundaron Hanna-Barbera, que se convertiría en el estudio de animación televisiva más exitoso en esa época con series como Los Picapiedra, Los Supersónicos, Scooby-Doo, Los Pitufos, Triston, el Show del Oso Yogi.  En 1967 Taft Broadcasting compró Hanna-Barbera por US$12 millones, aunque sus creadores siguieron al frente de la compañía hasta 1991, cuando Turner Broadcasting System compró la empresa, que se fusionó en 1996 con Time Warner, propietaria de Warner Bros; pero Hanna y Barbera continuaron como asesores.

A lo largo de su carrera el tándem Hanna-Barbera, aunque viajaron en círculos sociales completamente diferentes, (El círculo de amigos personales de Hanna incluía a otros animadores, mientras Barbera tenía afinidad por la sociedad de celebridades de Hollywood, a Hanna le interesaba el aire libre y a Barbera le gustaban las playas, la buena comida y bebida), se entendían perfectamente, y cada uno tenía un profundo respeto por el trabajo del otro, lo que logró que consiguieran siete estatuillas del Oscar, una docena de premios Emmy de televisión, y varios premios religiosos por su labor cristiana. Sus dibujos animados se convirtieron en íconos culturales, eran vistos por más de 300 millones de personas en la década de 1960, y han sido traducidos a más de 20 idiomas. A pesar de los más de 60 años que duró su alianza creativa, Hanna nunca pudo ocultar sus preferencias hacia Los Picapiedra: «En la película aparecemos durante tres segundos, algo muy gratificante por saber que has formado parte de algo tan famoso y apreciado por la gente. Pedro y Pablo nacieron de la idea más básica que existe en toda comedia, la del gordo y el flaco. El problema fue vestirles, así que fueron indios, vaqueros, peregrinos, incluso romanos, hasta que se nos ocurrió dibujarlos con pieles».

Marzo 22 del 2013: Muere Bebo Valdés

Murió a los 94 años, en Suecia, el mago de los ritmos cubanos, el último padre del jazz afrocubano.

Se sabe que en la música cubana hay abundancia de nombres imborrables, y entre los que hay que escribir con mayúsculas está el de Bebo Valdés, que fue protagonista de momentos de oro de la música cubana, además de ser precursor de las famosas descargas de jazz afrocubano y creador de un ritmo propio, la batanga, que arrasó en la isla en los años cincuenta. Los hijos de su última esposa se lo llevaron de Málaga, donde había decidido pasar los últimos años de su vida, a Estocolmo.

Su verdadero nombre era Ramón Emilio Valdés Amaro, y nació en 1918 en Quivicán, un pequeño pueblo de guajiros y tierras rojas a 40 minutos de La Habana. Decía que desde que nació llevaba la música en el ADN. Antes de salir de Quivicán fundó con un amigo de la infancia su primera banda, la Orquesta Valdés-Hernández, y desde entonces compaginó el piano con su vocación de arreglista y compositor. En los años cuarenta compuso uno de sus primeros mambos, La rareza del siglo, en momentos en que la música popular cubana se modernizaba a toda velocidad.

A partir de 1948 y hasta 1957 trabajó en Tropicana. Su orquesta, Sabor de Cuba, actuaba cada noche en el show del famoso cabaret, y allí compartieron escenario con grandes artistas norteamericanos, incluido Nat King Cole, con quien llegó a grabar algún tema. Por aquella época el jazz arrasaba en Estados Unidos y los músicos norteamericanos viajaban a la isla para sonar con sus colegas cubanos. En medio de aquel hervidero, en 1952, con una banda de veinte músicos dio a conocer en los estudios de RHC Cadena Azul su nuevo ritmo, la batanga. Entre los tres cantantes que integraban la orquesta estaba el gran Benny Moré. A finales de los cincuenta colaboró con Lucho Gatica, en México, y en 1960, viendo la realidad de la revolución, en medio de una gira decidió exiliarse en Suecia, donde se casó y rehízo su vida. Durante más tres décadas estuvo alejado de la música. Sólo amenizaba las veladas en el piano-bar de un hotel de la capital sueca cuando, en 1994, lo invitaron a grabar un nuevo disco, una colección de clásicos cubanos junto a temas originales suyos. En el 2000 el cineasta español Fernando Trueba lo redescubrió y lo invitó a participar en su película Calle 54, donde se reencontró con su hijo. Al terminar el documental grabó el disco El arte del sabor, que obtuvo el Grammy al Mejor Album Tropical Tradicional en el 2001, el primero de los nueve que obtuvo en los años siguientes, en los que hizo ocho discos, todos con la colaboración de Fernando Trueba. El último fue Bebo y Chucho Valdés, Juntos para siempre, un homenaje en el que padre e hijo repasaron juntos el repertorio y los ritmos de la música cubana que tocaron juntos y que Bebo interpretó como nadie. Su muerte fue recibida con dolor, pero a sus amigos les dejó el recuerdo de su alegría, y sobre todo de su elegancia: «Bebo era la esencia de lo mejor de Cuba, todo en él era especial, su forma de tocar, su manera de caminar, su risa, su elegancia para todo. Representaba la esencia de Cuba y de lo mejor de su música. Bebo no tenía igual». Chucho su hijo, que se había trasladado a España a pasar junto a su padre los últimos años de su vida, y se opuso a su traslado a Suecia, se despidió de él llamándolo «El más grande», y con la felicidad de haber hecho antes de morir el disco Juntos para siempre.

Marzo 21 de 1617: Muere Pocahontas

Muere «niña mimada», la Princesa india célebre en la historia colonial de Virginia, hija del jefe indio Powhatan que gobernaba un área que cubría casi todas las tribus costeras del estado de Virginia (llamada por los indios Tenakomakah).

En el año 1607 el país de Pocahontas sufrió disturbios con la llegada de los europeos. Hidalgos arruinados, truhanes y buscadores de oro desembarcaron en las orillas del Potomac y levantaron allí un poblado de chozas. Así se fundó la primera colonia estable de los ingleses en América, que recibió el nombre de Virginia, y que durante esos años no fue más que un fuerte miserable en medio de los territorios del rey Powhatan. Los colonos nombraron jefe al capitán John Smith. Al principio los ingleses fueron recibidos amistosamente y con gran ceremonia, pero ocurrió que un día, el capitán Smith, que había salido con su canoa a explorar el río, fue asaltado y hecho prisionero por los indios que, maniatado, lo condujeron ante el jefe Powhatan. Éste, levantando la mano sobre dos piedras colocadas a sus pies, le dio a entender que había sido condenado a muerte. Pocahontas, que sólo tenía doce años, apoyó su cabeza en el tajo junto a la de John Smith y salvó su vida en el momento que éste iba a ser decapitado. Intervino logrando convencer a su padre de que esa muerte atraería el odio de los colonos. Gracias a este evento (y dos oportunidades más en las que Pocahontas salvó la vida de los colonos), los Powhatans hicieron las paces con los colonos. Al contrario de lo que dicen las novelas sobre su vida, Pocahontas y Smith nunca se enamoraron. Él sólo se desempeñó como tutor de inglés y costumbres de Pocahontas. En 1609 un accidente de pólvora obligó a John Smith a ser tratado en Inglaterra, pero los colonos le dijeron a Pocahontas que había muerto. En Inglaterra, aparte de hacer desesperados esfuerzos por volver de nuevo a América, John Smith presentó varios libros sobre Virginia, en los que explicaba la situación de los colonos y narraba las aventuras que había vivido. Su publicación original fue un volumen con versos elogiosos, algunos retratos de indios, y un grabado de aquel famoso acontecimiento, su rescate por parte de Pocahontas.

Hacia 1612, un cierto capitán Argall, que había ido a comerciar con los potomacs raptó por sorpresa a la princesa Pocahontas y la encerró en su buque como rehén. Aunque su padre intentó el trueque de los prisioneros ingleses por su hija, no fue devuelta. Quedó prisionera en poder de los ingleses hasta que un gentilhombre, John Rolfe, un viudo que era uno de los comerciantes ingleses más importantes del sector tabacalero, mostró un especial interés por la joven prisionera. Era un hombre muy religioso, y, aunque se  desconocen los sentimientos de Pocahontas hacia él, como condición para su liberación tuvo que casarse, y fue bautizada con el nombre de Rebeca, que según cuenta la historia, ella misma eligió. Vivieron un tiempo en la plantación, y su unión estableció un clima pacífico entre los colonos y la tribu. En 1616 viajaron a Inglaterra. Junto a ellos once miembros de la tribu Powhatan. Allí descubrió que Smith estaba vivo. No pudo encontrarlo porque estaba de viaje, pero él escribió una carta al rey contando cómo los había salvado, para que la trataran con nobleza. Pocahontas y los miembros de la tribu se hicieron inmensamente populares entre los nobles; la princesa india despertó entre las personas de la alta sociedad una enorme curiosidad. Fue acogida con simpatía, incluso la misma reina Ana ordenó que se grabara su retrato. El capitán John Smith, que se disponía a volver a Virginia, le rindió pleitesía antes de embarcarse. No se habían visto desde 1608. Cuando Rolfe y Pocahontas decidieron regresar a Virginia, ella enfermó, lo que  obligó al barco en el que viajaban a regresar a Inglaterra, donde poco después perdió el color y murió. El jefe Powhatan murió la primavera siguiente. Los descendientes de la tribu fueron diezmados y sus tierras fueron tomadas por los colonizadores.

Como sabemos, la historia se ha contado con muchas licencias poéticas en el cine, y muchas personas intentan asociar su árbol genealógico con Pocahontas,  incluído el ex presidente George W. Bush. Entre los confirmados como descendientes se destaca eso sí, Nancy Reagan. Vea pues

Marzo 21 de 1915: Nace José Barros

Nace «El gran cantor del río. «Nació como José Benito Barros Palomino, hijo de una mujer indígena, Eustasia Palomino, con José Maria Barros; cuyo padre era un inmigante portugués llamado Joao Do Barros. En su Biografía se afirma que ya a los diez años, él, su hermano y un grupo de amigos, se encontraban organizados para tocar en parrandas, y cobraban 20 centavos por intervención en tiple y guitarra. Entrado diciembre, en El Banco se hacían cumbiones, en los que Benito, como era llamado por sus amigos, hacía parte acompañando a grupos de tambora y de chandé. Él mismo describía su formación musical: «La verdad es que yo me hice compositor mamando gallo, lo único que me interesaba era gozar yo sólo cuando creaba una canción. Después la mandaba a la porra. Se me olvidaba. Mis primeras canciones surgieron cuando tenía doce años, pero yo ya no las recuerdo»

En su infancia también fue acólito; se dice que era muy flojo para el estudio y que las únicas tareas que hacía eran las de gramática: «en la clase de aritmética me la pasaba leyendo a Amado Nervo». Al parecer le importaba más aprender la estructura de los versos que los demás deberes escolares, y dejó la escuela en quinto de primaria. Entrada su adolescencia era motivo de preocupación de sus hermanos mayores pues cuentan que se mostraba indiferente al trabajo. Su hermano mayor, preocupado, lo financió para que iniciara un negocio: hizo que un hotel de la región le comprara gallinas además de otros bienes, creyendo que tal vez podría ser un gran negociante. Pero con la llegada de su primera novia todo su capital fue derrochado y su negocio quedó atrás. Al no poder encontrar su propio lugar en El Banco se aventuró a partir, y nunca pensó en comunicarse con su familia. Por eso, algunos años después de su partida, cuando en El Banco se referían a él, lo llamaban el difunto. Su primer destino fue Santa Marta, y allí nació su deseo de viajar a Argentina, el cual no pudo cumplir por no tener libreta militar, motivo por el cual se enlistó en el ejército. Aún viviendo en un régimen disciplinario se las arreglaba para aprender a tocar guitarra con un nuevo amigo: el soldado Jaime Gutiérrez que fue su compañero cuando escribía letras de boleros. Por ese entonces el vallenato era un ritmo proscrito. Alcanzó el grado de sargento segundo, y al salir del cuartel sólo se llevó la guitarra que su amigo le dejó como recuerdo. Su aventura apenas comenzaba; la siguiente parada fue Barrancabermeja; desde su llegada conoció a músicos de la región e hizo su primer grupo musical. Luego tomo la decisión de viajar a Segovia atraído por la llamada fiebre del oro. Su espíritu aventurero lo llevó a Medellín, donde tuvo que soportar varias penurias: «Para poder sobrellevar el hambre, tuve que robar una papa en la calle; para que no me sorprendieran me la eché al bolsillo del saco con tan mala suerte que estaba roto, y la papa cayó al suelo». De este penoso capítulo de su vida nacieron canciones como: Mala suerte y alguna en ritmo de tango. Había escuchado a Gardel y su música fue de gran influencia para él, y contaba que asistió a su sepelio. En 1942 regresó a su ciudad natal donde se le daba por muerto. Ese día se formó una parranda que duró hasta al amanecer. Pero su alma aventurera estaba intacta y por esto comenzó una gira por el continente americano. Fue en Perú donde grabó su primer disco en 1944. En 1946 que Don J. Glottmman le dió la oportunidad de recibir sus primeras regalías por sus primeros dos tangos grabados, fueron dos mil dólares. Luego de su gira suramericana regresó a Colombia por un corto período y continuó con su viaje a México, país donde más tarde algunas de sus canciones llegaron a hacer parte de películas. De México fue deportado por indocumentado y su destino fue Bogotá donde se encontró con músicos de la talla de Lucho Bermúdez y Pacho Galán. «A mi papá le daba muy duro porque ellos eran personas estudiadas y él, empírico. Aprendió de viejo a escribir música, por necesidad, porque aunque ellos eran amigos y le ayudaban a escribir la música, también eran competidores», contaba su hijo. De Bogotá se trasladó a Cartagena por contrato con discos Fuentes, y así comienza un nuevo capítulo con Los Trovadores de Barú, que con su aporte se hizo muy polifacético y tuvieron mucho éxito. Fueron contratados para grabar con duetos y tríos, y acompañaban a solistas internacionales. Luego se fue a Barranquilla, donde intentó crear su propio sello discográfico Jobar. De regreso a Bogotá se reunía con sus amigos compositores y fue en donde según él mismo decía, comenzó a componer La Piragua, una de las más bellas cumbias colombianas. La historia dice que terminó de escribirla en 1962 en una cafetería-bar: «La piragua nació al ver que El Banco no tenía una canción que lo identificara. Esa letra tenía que ser una letra romántica, bonita, histórica. Entonces me acordé de una historia que sucedió en El Banco con un señor cachaco llamado Guillermo Cubillos». Al final de sus días decía que él no había hecho la piragua de Guillermo Cubillos, precisando que no era carpintero: «Anécdotas en la vida mía hay muchas, pero hay una muy curiosa. Se trata de La piragua; cierta casa de discos me pidió que le hiciera un par de canciones para concursar internacionalmente. Le dije al director artístico que le recomendaba La piragua, y me salió con el cuento de que eso no sirve porque es muy poético. Queremos algo folclórico. Recogí la canción. Unos amigos vallenatos la grabaron. Salió La piragua y causó un impacto nacional e internacional». Justo en ese momento, cuando su fama alcanzaba todas las esferas de la sociedad colombiana, decidió regresar a su natal El banco donde dedicó sus esfuerzos a crear el Festival Nacional de la Cumbia. Su vida allí era escribir, cantar y visitar a sus amigos; y así transcurrió hasta el final de sus días en el 2007, dejándonos lindas canciones y bellos recuerdos de juventud

Sobre lo que pensaba sobre la cumbia dijo: «La verdad es que con palabras, no sé qué diablos es la cumbia. Yo la siento, vivo a través de ella. Me da fuerzas cuando estoy vencido, y a veces hace que se me olvide que tengo hambre o sed».

Marzo 21 de 1960: Nace Ayrton Senna

Hoy en el que sería su cumpleaños número 61, y siempre, recordamos a un gran piloto, pero sobretodo a un gran ser humano: «Soy un privilegiado, siempre he tenido una vida muy hermosa. Pero todo lo que he obtenido de la vida lo he ganado con el compromiso y el deseo muy fuerte de alcanzar mis metas, de ganar, en la vida, no como piloto. Quiero decirte que seas quien seas en la vida, ya sea que estés en el nivel más bajo, o en el nivel más alto, debes tener una gran fuerza y ​​una gran determinación y debes enfrentar cualquier cosa con gran amor y fe en Dios y un día alcanzarás sus metas y tendrá éxito». «Los ricos no pueden vivir en una isla rodeada por un océano de pobreza. Todos respiramos el mismo aire. Debemos darles a todos una oportunidad».

Paulistano del barrio de Santana, nació con la velocidad corriendo por sus venas. Animado por su padre, a los 4 años ya tenía una habilidad increíble con el Kart. A partir de ahí la pasión por el ruido del motor acelerado solo aumentó, y a los 13 años estaba compitiendo oficialmente. Su desarrollo como piloto proviene de mucha inspiración del entonces niño, que pasó innumerables horas de su día entrenando. En 1981 comenzó a competir en Europa y fue durante este período que decidió usar el apellido de su madre. Estaba en plena forma y en un ascenso impresionante, absolutamente nada lo desenfocaba. Hasta ese fatídico 1 de mayo que quisiéramos que no hubiera llegado nunca.

Wiliam José Tomaz, un brasilero aficionado a la F1 desde pequeño, el día del funeral escribió un poema, pero no lo publicó: «Mi poema fue envejecido en barricas, como los vinos. Fue escrito cuando Roberto Cabrini nos dio la noticia que nunca quisimos recibir: el piloto Ayrton Senna está muerto. Fui a la oficina de mi casa y me senté a la mesa. Lloré mucho esa noche y decidí dejarlo en el papel. Y surgió ese poema. Pero nunca tuve la fuerza de divulgarlo. Ahora decidí hacerlo»

AYRTON SENNA

Aquele menino cresceu. Cresceu correndo.

Correndo, e crescendo. Crescendo, e correndo.

Aquele menino e sua baratinha branca

Aquele menino e sua baratinha preta e dourada

Aquele menino e sua baratinha amarela

Aquele menino e sua baratinha vermelha e branca

Aquele menino e sua baratinha azul.

Aquele menino virou campeão.

Derrotando tudo, e derrotando todos.

Se impondo sobre tudo, e se impondo sobre todos.

Corria na frente de tudo.

E, chegava na frente de todos.

Aquele menino veloz!. Aquele menino míssil!

Aquele menino ventania!. Aquele menino torpedo!

Aquele menino, não se entregava.

Aquele menino, só vitórias alcançava.

Aquele menino passou por nós,

superando barreiras.

Aquele menino

Anjo-patriota, e sua bandeira.

Aquele menino tinha a garra de um leão

Aquele menino virou Campeão.

Campeão para sempre. Campeão!

Aquele menino foi morar no céu.

Foi morar com os campeões.

Mais que um vencedor!

Um legítimo Campeão.

Aquele menino viajou para o céu.

Foi num carro azul e branco.

Branco, porque era a paz.

Azul, porque era o céu.

O céu de Jesus, (a paz que satisfaz)

Aquele menino saiu de cena e virou uma lenda.

Aquele menino, agora é uma estrela.

Senna-estrela. Estrela-Senna

Para sempre, Ayrton Senna!

Marzo 21 de 1986: Muere Darío Garzón

Muere un hombre que durante toda su vida contribuyó a forjar la identidad cultural de los colombianos, con sus composiciones, sus interpretaciones, y mediante la enseñanza de nuestra música a centenares de niños, jóvenes y adultos. Cuando tenía 6 años su familia se trasladó a Ibagué y allí inició sus estudios. Cuentan que con apenas 12 años, Darío Garzón se encaramaba en un cajón de madera para dirigir a su grupo mientras le sacaba melodías a una peinilla cubierta con una hoja de naranjo, que los demás «músicos» también utilizaban, soplando para conseguir un sonido parecido al de una dulzaina. Imaginaban ser una orquesta. Siempre se escondía entre sus compañeritos de juego cada vez que veía al director del Conservatorio del Tolima acercárseles. El maestro Alberto Castilla lo llamó un día, él se le acercó, y el maestro le preguntó si quería estudiar en el Conservatorio. Él le respondió que por sí mismo no tenía cómo pagar la matrícula, y que su papá no estaba muy de acuerdo con su inclinación musical. El maestro Castilla pagó la matrícula de 1,50 pesos, y lo vinculó al centro educativo. Así cambió totalmente el rumbo de su vida y dio inicio a su exitosa carrera musical. En el Conservatorio del Tolima estudió clarinete, flauta, piano, solfeo, canto y teoría de la música; también formó parte del coro. Más adelante llegó a convertirse en profesor de canto y música, creó coros y grupos instrumentales en los colegios y escuelas de Ibagué, y recorrió el Tolima recopilando temas folclóricos y haciendo arreglos musicales. A los 20 años dirigía y actuaba con el grupo Los cuatro alegres muchachos. Dos años más tarde necesitó un guitarrista, y le recomendaron a Eduardo Collazos, un destacado intérprete del tiple, quien se acopló al conjunto y se entendió muy bien con él. Así surgió el dueto Garzón y Collazos que le abrió camino a uno de los duetos más queridos de nuestra música andina. Sus presentaciones conquistaron al público ibaguereño, y en 1942 realizaron sus primeras grabaciones. Recordaba que su primer disco de larga duración obtuvo tal acogida, que las emisoras y los bares debían comprar varias unidades de los acetatos, pues de tanto ponerlos se les «rayaban». En 1945 realizaron su primera de varias giras por el país, donde cosecharon grandes triunfos. Hicieron su debut en la radio, y los famosos traganíqueles de los cafés bogotanos comenzaron a alternar sus tangos y boleros con bambucos, pasillos y guabinas; y las voces de Garzón y Collazos empezaron a escucharse en los salones y en los grilles de lujo. En  1950 la agrupación se radicó en Bogotá y su ascenso hacia la fama se consolidó. Impusieron su estilo y grabaron centenares de bambucos, pasillos, guabinas, bundes, valses, danzas, sanjuaneros y torbellinos. El éxito de sus álbumes les permitió recibir varios discos de oro y platino. Recordando sus viajes, decía que se sentía muy orgulloso de su histórica presentación ante los soldados colombianos que luchaban en la Guerra de Corea, y una memorable en el Carnegie Hall de Nueva York. En 1977, después de la muerte de su compañero y amigo se radicó en Ibagué por recomendación médica. Continuó enseñando en su Academia Musical Garzón y Collazos, y participó en diferentes actos como artista o como jurado. Y fundó la Peña Taurina La Cacerina en honor al diestro Pepe Cáceres. La muerte lo sorprendió el 23 de marzo de 1986. Un año antes, en la inauguración de la Concha Acústica Garzón y Collazos, había recibido la gran condecoración por más de 50 años de vida artística. Además el 23 de marzo fue escogido como Día Nacional de la Música Colombiana. Dejó para el pentagrama nacional bellas melodías, y su legado fue un código de amor por las cosas de la patria. Por su desaparición, siguen Llorando los guaduales

Marzo 20 de 1967: Aniversario de Ruddy Rodríguez

Sí. Hoy está de cumpleaños La Eterna Niña Bonita de Venezuela. Una actriz, modelo, cantante, empresaria, productora, conferencista, que últimamente está desarrollando con gran fuerza su faceta de humanitaria y consejera, que ha sabido conquistar el corazón de miles y miles de seguidores por todo el mundo con su belleza, por dentro y por fuera. 30 Años de Experiencia, 28 Telenovelas, 8 películas, 106 Portadas, 1.030 Conferencias Humanitarias en 11 países, 40 Reconocimientos Humanitarios

Ruddy Rodríguez de Lucía nació en Caracas, de padre venezolano y madre italiana. Es sin duda una de las actrices venezolanas más versátiles y de mayor proyección internacional. Salida de las filas de la  enseñanza de natación infantil, es una genuina representación de esa exótica belleza latina que ha hecho mundialmente famosa a la mujer venezolana. Fue precisamente a través del certamen Miss Venezuela que logró su primera aparición pública, en l985, al ganar el título de Belleza Internacional Miss World Venezuela. A partir de allí, una carrera llena de logros y reconocimientos conforman su vida artística. Reconocida como una incansable mujer que se ha hecho un nombre a base del esfuerzo innovador y continuo, que le han permitido mantenerse en el tope en todos los campos artísticos en los que ha participado; lLa televisión, el teatro, el canto, la publicidad y el cine, forman parte de sus facetas. En el cine recordamos que se inició con una aparición en l986, al lado de Timothy Dalton como la primera Chica Bond Latina en The Living Daylights. Su debut en Colombia lo tuvo en la recordada miniserie Las Ibáñez de Caracol en 1989 y además estuvo casada con un conocido rejoneador y odontólogo colombiano.

En l992 se impone de nuevo su condición de mujer innovadora y lanzó su línea de vestidos de baño y tuvo récords de venta con sus espectaculares calendarios que recorrieron el mundo entero. A la par se inició como animadora para la cadena Telemundo en USA. Cientos de artículos de primera línea han confiado y siguen confiando en su imagen, lo que la llevó a su lanzamiento en el mundo de los negocios con una empresa de productos de belleza que lleva su nombre. Simultáneamente desarrolla un trabajo filantrópico a través de la  Fundación Camino a La Felicidad, participando activamente con su imagen en este movimiento no religioso, para contribuir a llevar una vida mejor y feliz con el mismo entusiasmo con el que participa en obras sociales que demuestran su gran sensibilidad.

Desde el 2016 tiene su propia web oficial y su APP personal, donde está muy cerca de todos sus fans dando a sus seguidores asesoramiento personalizado.

Marzo 20 de 1968: Aniversario Juan Carlos Hurtado

Sí. Hoy apaga las velitas «El Andariego». Juan Carlos Hurtado nació en la vereda Alto de San Francisco, jurisdicción del municipio de Santander de Quilichao, en el Cauca, y vivió desde niño en un ambiente musical que junto con sus labores del campo han sido origen de su inspiración. A los 18 años se trasladó a Cali donde comienza a dar sus primeros pasos como músico. Muy joven formó un dueto para cantar en diferentes emisoras, con el que fue adquiriendo experiencia y madurez. Gracias a sus capacidades artísticas empezó a componer temas con mucho contenido que fue dando a conocer al público, hasta hacer la grabación de la ranchera Yo también tengo corazón, tema con el que cuentan que impactó en una espectacular actuación consagratoria en la plaza de toros de Cali, ciudad donde conformó una de las agrupaciones más importantes en su género, Los Emigrantes.

A los 25 años decide formar un hogar con la mujer que le robo el corazón, Julieth Bravo Ospina. Ella y sus más lindas florecitas, como llama cariñosamente a sus hijas, son fundamentales en su vida.

Sus creaciones como El venenito, Yo también tengo corazón y Triángulo de amor, nacen cuando está triste o cuando está muy alegre, son cosas de la vida cotidiana. Y fueron ellas las que le permitieron grabar en 1995 para el naciente sello Fonda, una División Fuentes dedicada a exaltar los valores dentro del género de la música de despecho: «Grabé mi primer disquito en 45 con Discos Fuentes, me aceptaron y me firmaron un contrato por 4 años, y gracias a ellos fui conocido en Colombia. Luego me retiré del sello y quise ser productor, y en 1999 lancé al mercado mi cuarto disco, Así vivo mi vida. Discos Fuentes me los compraba y los vendía». En el 2005 crea su propio sello, Janny music, que nace de las iníciales de los nombres de sus hijas y lanza su sexta producción. En sus nuevas producciones participa como arreglista, productor, compositor, y músico de todas sus canciones, canciones que se han vuelto clásicos porque la genta así lo ha querido.

Sobre el origen del nombre artístico cuenta: «Escribí una canción y la titulé el andariego, porque salí de mi casa a los 16 años a recorrer el mundo, caminos, solo. Yo no pensaba en ese entonces que iba a ser cantante, pero sentía la música, tenía ya el amor por la guitarra, porque me encanta tocarla, para mí tiene un sonido maravilloso. En el camino se me fue dando lo de cantar, me ponían a hacer coros. Yo cantaba a mi gusto, y un día alguien me escuchó y me dijo: cante que usted canta bueno. En un concierto contrataron a un artista que nunca llegó, y el organizador preguntó si alguien ahí cantaba para calmar al público, y alguien me señaló. Yo tenía 19 años y tocaba mi requinto. Resulta que había llovido y el micrófono pasaba corriente, y uno bien montañero, apenas me arrimé sentí el corrientazo; un susto el macho, pensé en no cantar, pero me convencieron. Cuando me escuché en los parlantes sentí una alegría inmensa que no sé cómo describirla, y pensé, esto es bueno, suena muy bonito; eso me dio la idea de seguir cantando y empecé a cantar música de Darío Gómez, de Alberto Posada y El Charrito negro, que en ese entonces ya los llamaban la tripleta del despecho. Y se fue dando la idea de componer». Está dedicado a su profesión de compositor e intérprete. De Yo Soy Así, su última producción, los amantes del género dicen que es una canción como el pollo, que no tiene presa mala.

Marzo 20 de 1977: Aniversario de Lincoln Palomeque

Hoy apaga las velitas al que recordamos por sus papeles de Ignacio en Francisco el matemático, y Javier en Padres e hijos, entre otros. La media naranja de nuestra querida Carolina Cruz.

Lincoln Eduardo Palomeque Sandoval nació en Cúcuta y estudió Administración de Empresas: «Cuando estaba en la universidad. Hoy apaga las velitas al que recordamos por sus papeles de Ignacio en Francisco el matemático, y Javier en Padres e hijos, entre otros. La media naranja de nuestra querida Carolina Cruz

Lincoln Eduardo Palomeque Sandoval nació en Cúcuta y estudió Administración de Empresas: «Cuando estaba en la universidad trabajé en muchas cosas. Primero de mensajero, después en un anticuario y más adelante como promotor de una discoteca. Siempre para ayudarme con dinero en la universidad»: Se inició en el mundo del espectáculo de una forma inesperada, ya que no soñaba con ser actor, ni había participado en alguna obra, pero al acompañar al actor Luis Fernando, El Negro Salas, a un casting, le propusieron que participará también. Desde ese momento comenzó todo, aunque al principio le cerraron puertas. Hasta que en 1998 consiguió hacer su debut en Padres e Hijos.

La primera película en la que actuó fue Karmma, el peso de tus actos, una cinta colombiana, escrita y dirigida por Orlando Pardo en el 2006. En el 2008 tuvo su primer papel protagónico en la telenovela Novia para dos, donde interpretó a dos personajes al mismo tiempo. Para el 2011 se logró proyectar en la televisión internacional con el papel de Faustino Sánchez Godoy, en la La reina del sur. Desde el 2014 hasta el 2016 participó en las tres primeras temporadas de la serie de televisión de Telemundo Señora Acero. En abril del 2019 se estrenó la película colombo-española Jesús de Nazaret, en la que interpretó a Pedro Apóstol. Fue papá de nuevo hace unos días, y para el 8 de marzo publicó una linda foto con este mensaje:

Son valientes, son sonrisas, alegrías, son sueños, son luchadoras, son protección, son fuerza, son belleza, son fragilidad, son soñadoras, son paz, son calma, son sonrisas, son belleza, son complices, son musica, hijas, madres, amigas, son amor, eso son ustedes mujeres!

@carolinacruzosorio, a mi madre linda en el cielo y a todas las mujeres, Dios las bendiga siempre!

❤️🙏🏻 #graciaQue los cumpla Feliz!

Marzo 20 de 1977: Aniversario de Hassam

Sí. Hoy apaga las velitas al que recordamos como Rogelio Pataquiva, Güevardo, personajes que lo que lo catapultaron a la fama y lograron posicionarlo como uno de los humoristas más queridos por los colombianos.

Conocido como Hassam, Gerly Hassam Gómez nació en Bogotá y comenzó su aparición en la televisión en Sábados Felices al igual que muchos colombianos, donde obtuvo importantes resultados como: finalista, subcampeón, campeón, y declarado fuera de concurso hasta el 2008 donde ganó 11 programas consecutivos, siendo el único participante que ha logrado este récord en la historia del programa. Es profesor de inglés graduado de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas. A los 24 años inició estudios y talleres de teatro en la Escuela Superior de Artes Escénicas y paralelamente trabajó en el montaje y actuación de obras teatrales. Ha dedicado cerca de 14 años a la labor de entretener y divertir al público.

En el 2016 produjo, escribió y protagonizó «Agente «ñero ñero siete», la segunda película colombiana más vista de ese año. Alternamente a sus apariciones en cine y televisión realizaba shows en vivo con los que recorrió Colombia, EEUU, Canadá, España, Argentina, Chile, Costa Rica, Inglaterra.

En agosto del 2019 contó que padecía un tipo de cáncer. Desde entonces compartió a través de sus redes sociales el proceso por el que pasó en su lucha por superar la enfermedad. Después de casi un año de este proceso dio la buena nueva de que mediante un estudio clínico se pudo determinar que ya no tenía células cancerígenas en su médula.

Fiel a su estilo, publicó ayer esta foto con un mensaje:

«Yo cumplo el 20 de marzo. El año pasado inició la cuarentena, estaba recién trasplantado, amarillo y calvo, no pude celebrar; mi regalo fue papel higiénico y enlatados para el encierro.

Un año después, ya tengo color y pelito; Dios, el humor, los productos de @tata.oro, el amor de ella y de mis hijas, y los buenos deseos y mensajes de todos ustedes, hicieron todo el trabajo.

Gracias por un año más!

Pdta. Cumplo el sábado, calzo 41 y calzoncillos talla M, que gracias».

Felices de su recuperación, claro que le deseamos un Feliz  Cumpleaños!

Marzo 20 del 2020: Muere Kenny Rogers

Se fue a sus 81 años, dejando una marca indeleble en la historia de la música estadounidense y en millones de personas de todo el mundo, la leyenda de la música country que en una ocasión resumió su popularidad explicando que sus baladas «Dicen lo que todo hombre quiere decir y lo que toda mujer quiere escuchar»

Con su característica voz ronca vendió más de 50 millones de discos en Estados Unidos, de los cuales obtuvo veinticuatro números uno, y más de cincuenta canciones en el Top 40 Country, además de 3 Premios Grammy y 18 American Music Awards

Kenny Rogers fue el cuarto de los siete hijos de Edward Floyd Rogers, un carpintero, y su esposa Lucille, enfermera. Se crió en uno de los sectores más pobres de Houston, y comenzó en el mundo de la música con veinte años, tocando temas de otros cantantes de la época. Tuvo la influencia de varios de la música country y soul, como Nat King Cole y Chuck Berry, y fue miembro de grupos con los que realizó actuaciones nocturnas en clubs de jazz. En 1967 nació The First Edition, que fue renombrado como Kenny Rogers and The First Edition, con el que creó varios éxitos pop y country. El grupo se disolvió en 1976 y ahí inició su carrera en solitario. Con Lady, en 1980 obtiene la fama mundial y la confirmación de ser una gran estrella de la música. Formó parte del grupo que cantó We Are The World en 1985, y un año después copresidió Hands Across America, una campaña que buscaba crear conciencia sobre las personas sin hogar y con hambre en Estados Unidos. Fue incluído en el Salón de la Fama de la Música Country en el 2013

Aquejado de diferentes problemas de salud que le afectaron la movilidad, en el 2015 anunció su retiro de los escenarios, tras seis décadas dedicadas a la música: «He tenido tanta suerte de haber disfrutado de una carrera tan larga y de contar con el increíble apoyo de mis fanáticos y de todos los que me han ayudado en el camino, pero llega un momento en que necesito concentrarme en pasar tiempo con mi familia. Mi vida en este momento es con mi esposa y mis hijos gemelos de 11 años. Hay muchas cosas que quiero hacer con ellos para crear algunos recuerdos especiales. No tengo una lista de cosas para mí. Tengo una lista de cosas que quiero hacer con ellos».

El día de su muerte, Dolly Parton recordó a su compañero en el exitoso dúo Islands in the Stream:

«Nunca sabes cuánto amas a alguien hasta que se ha ido. Tuve tantos años y momentos maravillosos con mi amigo Kenny, pero por encima de la música y el éxito, lo amé como un hombre maravilloso y un verdadero amigo. Sé que estás tan triste como yo. Pero Dios te bendiga Kenny, vuela alto a los brazos de Dios».

Todos extrañamos esa gran voz

Marzo 19 de 1913: Nace José A. Morales

Nació en Socorro uno de los más grandes compositores de la música andina colombiana, además de ser uno de los que más obras han dejado. Sus obras son consideradas verdaderas joyas del folclore andino. Prolífico compositor, cantante, periodista y publicista, se dedicó con alma, vida y sombrero, como dicen los campesinos santandereanos, a cultivar y divulgar nuestra música.

Inició su desarrollo musical en su tierra. El niño cantor que apareció hacia 1920 interpretando el tiple, se convirtió rápidamente en la atracción de un cuarteto que iba de escenario en escenario alegrando el corazón de muchos en la provincia de Vélez. Cuando aún era muy joven se trasladó a Bogotá, donde desarrolló su carrera artística. Cuentan que siempre se caracterizó por su talento musical, sus buenos modales, su fino modo de vestir y su actividad intelectual. En 1935 hizo su primera composición, el tango Marta. Es que el Maestro José A. Morales tenía dos obsesiones: Los tangos y Agustín Lara. Hubo un tiempo que intentó quedarse al lado de los tangos, las melodías trágicas y las letras obsesivas, pero volvió a su camino. Realizó su primera grabación musical con las voces, tiple y guitarra de Garzón y Collazos, un sencillo de 78 RPM que contenía su bambuco María Antonia y Arrunchaditos, con la que logro que el pueblo colombiano lo empezara a reconocer como compositor. Se desempeñó además como Director de relaciones públicas de Sonolux, y mantuvo una intensa labor radial.

Tuvo una entrañable amistad con el virtuoso del órgano Jaime Llano González. Se conocieron en 1956 cuando era periodista y tenía una oficina donde se editaba una revista, y el maestro Llano tocaba órgano en la emisora Nueva Granada. En alguna ocasión le envió una partitura para que la tocara en su programa. Lo hizo y al otro día José A. se apareció para agradecerle por la magistral interpretación. Y así nació una amistad de toda la vida: «José A. Morales le iba dejando al país cada día todo lo que era y tenía. Esa personalidad arrolladora, el concepto de la vida, la amistad, la honradez, porque era un hombre íntegro, vertical. Cuando tenía que decirle algo a alguien se lo decía. Él no tenía una fuente de inspiración particular, me contaba que a veces iba por la calle y se le ocurría algo, entonces maduraba esa idea. Otras veces sí las hacía a propósito, sobre hechos reales. Era un don que Dios le había dado. Primero hacía la letra, la pulía mucho, se la dejaba ver a escritores, Presidentes, hombres de letras y luego les ponía la música. Como él no sabía escribir música, me la cantaba, acompañado de su tiple y yo se la iba escribiendo en el pentagrama. No es como dice mucha gente que yo le hacía la música. No. Yo sólo era su secretario, él me dictaba y yo le escribía. No estudió mucho pero era un lector extraordinario, de ahí su sapiencia. Amaba todas sus composiciones que sobrepasaron las 400, pero indudablemente dejó todo su corazón en Pueblito Viejo, que la hizo a Titiribí. Él decía que todos queremos a nuestro pueblo, nadie reniega de él. Pescador Lucero y río se la hizo al Tolima Grande. Le compuso a todo. Al amor, al odio, al rencor, a la alegría, la tierra. Hasta escribió una letra para la campaña política de Carlos Lleras Restrepo. Fue un soltero empedernido; aunque le sobraban las mujeres por su calidez humana y verbo fluido. Sin embargo, nunca se casó. Desde muy niño se entregó a su pueblo, a sus amigos. A las mujeres les resultaba resbaladizo, porque decía que sólo cuando él pudiera comprar todo lo de una casa se casaría, y como nunca tuvo plata para sacar adelante su proyecto, prefirió la soltería hasta su muerte. Fue el perfecto solitario enamorado y poeta. No he conocido a alguien que tuviera tantos amigos como él. Sus amigos eran los Presidentes, escritores, pintores, poetas. Sin embargo, le dieron mucho caramelo y nada concreto. Hasta le dijeron que lo iban a mandar a España de agregado cultural y nunca le cumplieron. Por eso él le conseguía puesto a todos los amigos, pero nunca, nunca pidió algo para él. Su profesión era ser amigo. Nunca tuvo plata, pero tampoco nunca aguantó hambre, ni se vio mal», contaba el maestro Jaime LLano en alguna entrevista.

Murió en 1978 en Bogotá y su cuerpo fue trasladado a Socorro por expreso deseo de su parte. Le faltó tiempo para seguir produciendo, pues cuando lo asaltó la muerte estaba en su plenitud músical. Pero nos dejó piezas magistrales como María Helena, Pescador, lucero y río, Campesina Santandereana, María Antonia, Ayer me echaron del pueblo y Yo también tuve veinte años. Dice un refrán popular que nadie es profeta en su tierra. Pero ese no es su caso. En Socorro se respira su legado y el amor que siempre profesó por su tierra natal. No fue profeta en su tierra, fue rey en su pueblo. Cuentan que cuando regresaba de largos viajes, en Socorro había una fiesta colectiva. Su recuerdo ha sido permanente. Ejemplo de ese legado fue la creación de Concurso Nacional de la Canción Inédita José A. Morales que se celebra cada año en septiembre. A su muerte, gracias a la colaboración de su hija, se dio inicio a la recolección de sus pertenencias, esas que hoy hacen parte del museo Casa de la Cultura Horacio Rodríguez Plata. Sus restos descansan al fondo, junto a un tranquilo jardín que recibe cada día los rayos del sol. José a Morales descansa tal como alguna vez lo describió en una de sus composiciones, Rinconcito amable: «Estoy buscando un rinconcito amable en donde descanse en paz mi cuerpo enfermo»

Marzo 19 de 1933: Aniversario de “El Burro Mocho”

Sí. Ho apaga las velitas El Burro Mocho, como él mismo se hace llamar: «Porque me crié con los burros en Córdoba, los había por todos lados, y en el barrio había uno al que le cortaron las orejas y el rabo y se pasaba el día corriendo, atropellando todo. La gente gritaba: Ahí va el burro mocho. Yo tenía 8 o 10 años y lo imitaba, por eso me pusieron el apodo. Al principio me sentía raro, pero luego me daba gusto. Gozo cuando la gente se ríe de las cosas que digo»

Noel Petro nació en un caserío que se llama Buenos Aires, en cercanías de Cereté: «Me crié en la finca. Aprendí a enlazar, a sembrar algodón y maíz. El trabajo era duro». Su padre quería que fuera marinero, pero este anhelo se frustró porque antes de entrar a la base naval de Cartagena ya él se había apasionado por la música y el toreo. Por eso le llamaban el torero cantor. «Un primo tocaba la guitarra. Él me enseñaba algunos tonos. Hasta que yo dije: Lo mío no es sembrar algodón y maíz, ni ordeñar las vacas, ni levantarme a las cinco de la mañana a enlazar el caballo. Lo mío es la música». Antes de despegar como artista fue ayudante de joyería en Montería, y luego pasó a vivir a Medellín, pero muchos de los gestos del Burro ya iban con él. Al joyero al que ayudaba, y que después lo llevaría a Medellín, más cerca del mundo artístico, le dedicaba su ingenio: «Yo le hablaba como ñato, caminaba como cojo, hacía una cantidad de morisquetas y cantaba; él gozaba con eso. Me cogió cariño y me llevó a Medellín». Entonces ya soñaba con lidiar toros en la Macarena de Medellín o en la Santamaría de Bogotá: «Toreé mucho como novillero y hace muchos años tomé la alternativa en Bogotá, me la dio Pepe Cáceres; después de eso hice muy poquitas corridas y me retiré. Lo del toreo es serio. Era una época distinta, no había tanta protesta contra el mundo taurino. Me duele. Me encantaría que la gente supiera cómo se cría un toro: el mimo y el cariño. Un torero quiere mucho al toro, el ganadero lo adora, el público taurino también. Pero al toro hay que matarlo en la plaza porque no se puede torear dos veces, y sería ridículo que a un toro de casta, con su categoría, lo fueran a llevar a un matadero. Así nadie lo explica».

Y se dió a la música. A los 19 años, ya en Bogotá, conformó El Trío Latino, y dio con Edmundo Arias, que era director artístico de Sonolux y estaba buscando un intérprete para grabar una versión de una canción que le había llegado desde Argentina. Le cantó y de inmediato lo llamaron a Sonolux; era 1954. Grabó dos canciones que se volvieron inmortales: Cabeza de hacha y Me voy pa’l salto. Pero después del éxito vinieron años difíciles. La disquera no quería grabarlo: «El día en que no me pegó un disco se les metió que estaba acabado, me decían que siguiera en el toreo». Y tuvo que volver a donde empezó: noches en piezas humildes, arriendos atrasados, presentaciones en pueblos organizadas por empresarios pícaros, corridas de toros criollos, y días enteros sin comer: «Yo he pasado más hambre que ratón de ferretería»

Fue un innovador al romper el formato de las grandes orquestas y conjuntos tradicionales añadiendo un elemento más cercano a la música rock con la incorporación del requinto eléctrico, que ideó y mandó hacer en su juventud, porque sabía que sería emblema de su sonido, esa especie de guitarra eléctrica en la que interpreta complejos solos y secciones compuestas originalmente para conjuntos de vientos. Cambió los cánones de la música tropical en Colombia, y su presencia en el escenario alude a elementos de la cotidianidad no sólo de la costa, sino incluso del interior. Su requinto es parte de su identidad, pero lo es también un sello infaltable que ha sido evocado jocosamente por muchas personas en algún momento de sus vidas la frase: ¡Mamá, estoy triunfando mandame pa’l pasaje!.

Tuvo 4 matrimonios que terminaron de forma cordial; dice que nunca fue un enamoradizo, que siempre respetó mucho a las mujeres. Pero sin lugar a dudas el capítulo amoroso más sonado fue su romance con Claudia de Colombia a la que conoció en El Club del Clan. Contaba que se enamoró, que era muy bonita y le gustaba su voz. La ayudó a surgir usando sus contactos y logró que la grabaran. Y empieza el éxito: «Cuando triunfa, ella en el Chicó y el burro en la caracas, me mando pa’ la porra. Lloré, fue muy doloroso». Y a raiz de eso le compuso dos canciones, Canto para Claudia y La reina de las cruces, canción que le ganó los reproches de ella y el elejamiento total. Tal vez se le fue la mano con esas letras, aunque siempre en las entrevistas elogia sus cualidades como cantante.

Sobre lo mejor de su carrera musical sin duda el afecto del público y cuando ha recibido discos de oro. «Hay satisfacciones y fracasos muy grandes». En seis décadas, quienes han dicho que el burro mocho está acabado se han tenido que tragar sus palabras, porque aunque pasen varios años, siempre vuelve con otro éxito. En el 2018 presentó «Un hombre sin cachos» diciendo: ¡Esto hace bailar hasta a un perro muerto! . Vive en Bogotá y parece que sigue activo en su profesión.

Marzo 19 de 1936: Aniversario de  Ursula Andress

Hoy apaga las velitas un sex symbol de la década de 1960

Ursula Andress nació en el cantón suizo de Berna en una estricta familia protestante alemana, de ascendencia francesa e italiana por parte de su madre: «No me permitieron ver chicos ni ir a bailes hasta los 17 años». Aunque parecía fríamente distante, una personalidad inquieta se manifestó temprano, y tenía un deseo impetuoso de explorar el mundo. La deslumbrante joven encontró trabajo como modelo de arte en Roma antes de llegar a Hollywood en 1955. Una aventura de cuatro meses con James Dean le trajo buena publicidad, pero no mucho más. Ese mismo año, a los 19, conoció a John Derek. En 1957 se fugaron a Las Vegas, y la nueva novia dejó en suspenso sus aspiraciones de actuación durante unos años. Pero 1962 vio a la belleza suiza virtualmente desconocida de nuevo en el set, interpretando junto a Sean Connery en la primera versión cinematográfica de las fantásticas novelas de espionaje. Su papel en bikini fue algo breve, y su acento suizo alemán provocó que toda su actuación tuviera que ser doblada. Sin embargo, su apariencia llamativa y su presencia ardiente en la pantalla causaron una fuerte impresión en los espectadores, estableciéndola de inmediato como una de las mujeres más deseadas del mundo y como un adorno para poner junto a algunos de los talentos más rentables de la época, como Elvis Presley. Pero él rechazó sus insinuaciones porque: «nunca podría enamorarme de una chica cuyos hombros fueran más anchos que los míos». Apareció en muchas más películas picantes para su época tanto en los Estados Unidos como en Europa. Sus papeles le dieron un montón de ocasiones para tirar su ropa al viento. En 1965 recibió US$15.000 por su primera publicación de Playboy, 5 veces lo que la revista solía pagar por pin-ups en ese entonces.

Desarrolló reputación como un destructora de hogares en serie. ¿Su explicación sin complejos?: «Cuando estás enamorada, estás enamorada. Eso es todo lo que importa». Aunque protagonizó sonados romances con actores reconocidos, algún boxeador y otros más, después de su separación de John Derek no volvió a casarse: «Para mí, es mucho más moral vivir con el hombre que amas sin firmar un papel, que vivir legalmente en una atmósfera de aburrimiento que eventualmente puede convertirse en odio». Vivió con Jean-Paul Belmondo de 1965 a 1972, del que decía, fue el amor de su vida. En 1979 comenzó lo que sería un romance a largo plazo con Harry Hamlin, su apuesto y joven coprotagonista de Furia de titanes, y mientras viajaba por la India empezó a sentir náuseas, lo que resultó ser un embarazo, el primero y único, a los 43 años. Tuvo a su bebé, una decisión que cambió la vida de una mujer que hasta entonces se había negado incluso la responsabilidad de las mascotas. Después del nacimiento de su hijo redujo su carrera, que se centró en pequeñas producciones. Esto significó rechazar alguna película, aunque las temporadas ocasionales en televisión en Falcon Crest ayudaron a mantener su visibilidad como actriz. En 1995 fue elegida por la revista estadounidense Empire Magazine una de las cien mujeres más sexy del cine de todos los tiempos. En 1996 Playboy le ofreció 250.000 dólares para hacer otra sesión fotográfica para celebrar su 60 cumpleaños, pero después de una cuidadosa consideración, la rechazó. «Estoy feliz de cubrirme ahora y de mantener las viejas fotos». La última vez que trabajó en una película fue en el 2005. Retirada de la actuación, participa en eventos de caridad y aparece en programas de entrevistas de vez en cuando. Divide su tiempo entre su familia en Suiza, amigos en Virginia y España, y sus propiedades en Roma y Los Ángeles. No emplea a un agente o publicista, y nunca lo ha hecho, de ahí las narrativas a menudo inexactas y poco halagadoras sobre ella en los medios. «Honestamente me siento privilegiada de haber tenido una vida tan afortunada. Todo lo que siempre quise lo tuve. El mundo se ha vuelto tan pequeño hoy. Es muy triste que todo se vuelva igual y que las diferentes tradiciones y culturas estén desapareciendo. Nací demasiado tarde. Las personas que me gustaría conocer están en el pasado. Mohandas K. Gandhi o Albert Einstein, o Sigmund Freud. Creo que incluso hace 100 años habría nacido demasiado tarde. Me hubiera gustado tener una aventura con el duque de Windsor. Renunció a su trono por la mujer que amaba. Amo a todos mis viejos novios. Necesito su amistad. Ambos nos dimos algo y se queda para siempre. Una vez pensé que sería bueno tenerlos a todos viviendo juntos en una casa grande. No soy feminista. Detesto todo sobre estas mujeres que se organizan y hacen discursos y portan carteles en los desfiles»

Marzo 19 de 1964: Aniversario de Juan Carlos Arango

Sí. Hoy apaga las velitas! Juan Carlos Arango cuenta que cuando joven fue rebelde, era malo para el estudio, y así como se iba de su casa, también volvía. Pero entró al Ejército y, luego de montar la obra A la brava, se dio cuenta de que actuar era su destino. Al salir no sabía qué hacer, se sentía confundido, y decidió entonces hacer pequeñas representaciones en bares y discotecas para sobrevivir, hasta que Pepe Sánchez, su gran amigo de parrandas, lo recomendó en Colombiana de Televisión para hacer un casting para Amar y Vivir, y lo aprobó. Desde entonces, y hasta el sol de hoy, no ha parado.

Se considera un tremendo cocinero: «Hago unos platos muy ricos sobre todo ahora en la pandemia. El plato que más me gusta hacer son las costillas de cerdo al horno. Así selladitas de sal marina, me quedan jugosas y sabrosísimas»

También dice que es tremendo bailarín de salsa: «Soy salsómano y oigo mucha salsa, los viernes, cervecita y salsa»

Dice que es polero bravo; «Tomo sólo cerveza, pero bastantica»

Le encantan los deportes: «Casi todos me gustan, el tenis, el fútbol, veo hasta carreras de motos, peleas de boxeo, todo»

Le fascina viajar: «La pantaloneta de baño no puede faltar, el chingue. Mientras podamos, pa’ fuera a conocer otro pais con mi familia, mis niños, mi esposa. Es una pasión.

Le apasiona también ver a sus hijos jugar tenis: «Porque son muy buenos deportistas y salieron buenos para ese deporte»

«Y amo profundamente mi trabajo»

Que los cumpla Feliz!

Marzo 17 de 1913: Muere Soledad Acosta

Muere una prolífica novelista, periodista e historiadora colombiana, que permaneció olvidada durante la mayor parte del siglo XX. Su obra, que reflexiona sobre el papel de la mujer en la sociedad, marcó el camino para otras escritoras. Fue una transgresora de los límites tradicionales entre lo femenino y lo masculino que aprisionaba a la mujer en el espacio doméstico y le impedía tener voz pública. Una periodista que escribió durante casi 60 años. Pero también hace parte de ese grupo de mujeres olvidadas por la historia en América.

Cuentan que en una época en que se imponía el silencio a las voces femeninas, Soledad Acosta de Samper se atrevió a tomar la palabra. Su bolígrafo llegó con todo. Con una larga lista de seudónimos que incluía a Bertilda, Andina y Aldebarán, escribió decenas de novelas, cuentos, crónicas, estudios sociales, tratados de historia y obras de teatro. Fue reconocida por sus contemporáneos, pero tras su muerte su nombre desapareció durante décadas.

Era una mujer culta y cosmopolita, de una clase privilegiada, que había viajado por el mundo y conocía varios idiomas. Fundó cinco revistas, reflexionó sobre el rol de la mujer en la sociedad, defendió su educación y trabajo intelectual y abrió el camino a las escritoras colombianas en un momento en que se creía que las mujeres debían dedicarse exclusivamente al trabajo familiar y doméstico. Estas ideas liberales convivieron con ella con tradiciones más conservadoras y religiosas, pues era una católica devota. Sus escritos fueron culturales, sociales, políticos, religiosos, morales e históricos.

Nació en la capital en una familia de ascendencia española. Su padre fue el historiador y político Joaquín Acosta y Carolina Kemble, su madre, era de origen británico. Vivió los primeros quince años de su vida entre Canadá y París. Allí estudió en las escuelas más prestigiosas y su formación académica era comparable a la de los hombres de su tiempo.

Regresó con su familia al país en 1848 tras el inicio de la Revolución Francesa, y se instalaron en Santa Marta. En la ciudad de Guaduas, en 1853, conoció al escritor y periodista José María Samper Agudelo en una celebración. Cuando se casaron ​​se fueron a Europa en 1858. Mientras su esposo se desempeñaba como embajador, Soledad inició su carrera periodística.

En 1859 envió su primer texto con noticias de actualidad desde París a un diario, y en los años siguientes otros periódicos de Bogotá y Lima publicaron sus correspondencias. Sus novelas fueron publicadas en capítulos en los periódicos, y sus textos publicados en revistas colombianas y europeas en los últimos años del siglo XIX. A pesar del decir que su carrera y notoriedad se debían a su esposo, desafió las convenciones de la época. A su manera, constituye en su obra y en su vida un precedente de ciertas premisas igualitarias de género. Regresaron a Colombia en 1863.

Aunque comenzó a triunfar en su carrera profesional, su vida familiar se derrumbó en 1872 con la muerte de sus hijas a consecuencia de una epidemia, dolor que se sumó a la detención de su esposo por motivos políticos. Logró recuperarse y en 1878 crea la publicación La Mujer, revista dedicada exclusivamente a las mujeres, cuyo objetivo principal fue darle a la mujer el valor merecido en cuanto a sus derechos y rol en la sociedad colombiana. Fueron mujeres las responsables de la elaboración de artículos de contenido moral, ético, social, cultural e histórico. Estuvo a cargo de la revista hasta 1881, año en que dejó de circular, por lo que retomó en sus obras las cuestiones históricas y publicó varias biografías.

Una Holonesa en América es quizás su novela más importante y una de las más importantes de la literatura hispanoamericana del siglo XIX. Sus protagonistas, la holandesa Lucía y su amiga, la colombiana Mercedes (alter ego de la autora), son mujeres fuertes que ya no mueren de amor y que diseñan sus propios destinos: «Lo repetí hasta saciarme: las mujeres de la época actual ejercían todas las profesiones y se las veía brillar en todos los puestos que antes estaban reservados a los hombres».

Fue miembro honorario de la Academia Colombiana de Historia y continuó escribiendo y publicando hasta su muerte, a punto de cumplir 80 años. Luego permaneció olvidada durante la mayor parte del siglo XX. El redescubrimiento cobró impulso cuando el Ministerio de Cultura declaró el 2013 como Año Soledad Acosta de Samper por el centenario de su muerte, y se lanzó una biblioteca digital con sus obras. Pero aún está lejos de ser reconocida como los autores masculinos de su época con los que tuvo una trayectoria comparable.

Marzo 17 de 1920: Nace Manuel Zapata Olivella

Nace el que se convertirá en un ícono de la literatura afrocolombiana. Manuel Zapata Olivella nació en Lorica, pero fue criado en Cartagena, donde comenzó a estudiar medicina. Desde entonces se interesaba por la escritura y publicaba artículos en periódicos y revistas sobre temas de folklore y cultura colombiana.

Desde siempre lo inquietaron los asuntos que tenían que ver con su raza y con su geografía. Creció influenciado sobre todo por sus raíces y por su historia familiar. Él mismo lo confirmó en su autobiografía Levántate mulato: por mi raza hablará el espíritu: «En mi familia todos los abuelos habían nacido engendrados en el vientre de mujer india o negra. Mis padres, mis hermanos, mis primos llevamos el pelambre indígena, los ojos azules o el cuerpo chamuscado con el sol africano».

De veinte años se trasladó a la fría Bogotá para terminar la carrera en la Universidad Nacional. Su internado lo hizo en el Asilo de Locas de Bogotá, y de allí nació su deseo de ser escritor. «El demente no tiene frenos, sino que crea su propio mundo y se expresa a su manera». Los años de Bogotá lo marcaron muchísimo. Allí supo que debía luchar por los derechos de las negritudes y en contra del racismo, tarea que no abandonó nunca en su vida.

Entre 1943 y 1947 se dedicó a viajar por Colombia y América. Después de un viaje de aventura en el que recorrió a pie el trayecto entre Panamá y México y trabajó como recolector de café en Costa Rica, boxeador en Guatemala, y enfermero del pintor Diego Rivera, en México, volvió al país para crear un grupo folclórico junto con Delia, la reconocida coreógrafa que es una de sus once hermanos.

Fue un hombre viajero que registró y conoció de cerca algunas de las partes más inexploradas del país. Recorrió toda la costa atlántica colombiana en busca de intérpretes, bailarines y narradores que mantienen vivas las músicas y las tradiciones orales de esa región. Producto de esos viajes escribió un par de obras con alto contenido político y social que dan cuenta de sus reflexiones y posturas sobre la discriminación racial. Cada vez más interesado por la cultura afro, decidió convertirse en investigador y dio un giro hacia la academia. Realizó investigaciones etnográficas y antropológicas sobre la cultura negra alrededor del mundo, y en 1965 fundó la revista Letras Nacionales, que circuló durante veinte años, con el fin de que escritores de sus provincias y pueblos pudieran presentar sus obras y la realidad colombiana de una forma diferente a la que mostraba la literatura en ese tiempo.

Ejerció el periodismo y colaboró con numerosas revistas y publicaciones colombianas y extranjeras. Debido a su prestigio internacional fue invitado a Senegal. Pudo pisar la tierra de sus ancestros y comprendió que su tierra natal no era un lugar geográfico, sino su raza. Antes de volver a América visitó la Isla de Gorée, de donde habían salido los barcos con esclavos negros hacia América en los tiempos de la colonia. Las reflexiones producidas en el viaje le permitieron terminar su obra magna, Changó, el gran putas, que está sin duda a la altura de otros grandes logros de la literatura latinoamericana del siglo XX.

Me cuentan que su vitalidad fue asombrosa hasta sus 84 años. Tanto que dos semanas antes de su muerte había regresado de un viaje a la costa occidental de África donde asistió a un congreso panafricano y tuvo la oportunidad de conversar largamente con Mandela. Pero a pesar de esa vitalidad, se sentía ya cansado. Decía que el problema de la columna que lo aquejaba se debía al peso de las utopías: «Las utopías no cumplidas pesan mucho». Su última voluntad fue que su cuerpo fuera cremado y sus cenizas esparcidas al río Sinú, para que éste las llevara al mar, y sus olas de vuelta a sus raíces en África.

Sus obras más conocidas son sus novelas, de las que yo la verdad solo leí Changó, el gran putas, y He visto la noche, que narran la diáspora africana en todo el continente americano. También fue cónsul en Trinidad y recibió varios premios y reconocimientos, como la orden de Boyacá en el 2000, el Premio a la Vida y Obra del Ministerio de Cultura en el 2002, el Premio Aplauso y el Premio Guachupé de Oro por su constante búsqueda del reconocimiento de los valores de las negritudes. Además, en junio del 2003 la Universidad de Córdoba le concedió el honoris causa en español.

El 2020 fue elegido como el año Manuel Zapata Olivella por el Ministerio de Cultura, que creó la Opera Changó el gran putas, porque se cumplieron 100 años de su nacimiento. Era una figura en Cartagena. Se caracterizó por ser un defensor de la comunidad negra en Colombia y por destacarla en los diversos aspectos de la cultura, la literatura, la música y el deporte. Fue un narrador de lenguaje vivo y de estilo directo; un cuentista de violencia con temática social. Papá de un buen amigo de mi hermano, al que contacté para que me contara algunas de estas cosas.

Marzo 17 de 1951: Aniversario de Carmenza Duque

Sí. Hoy apaga las velitas y llega al séptimo piso una de las divas de la música colombiana.

Hablar de Carmenza Duque es mencionar una de las grandes figuras de nuestra música de todos los tiempos. Con una imponente y matizada voz que le permitió triunfar en nuestro país y fuera, interpretó las más bellas melodías en escenarios importantes de Latinoamérica, Estados Unidos y Europa. Grandes clásicos como Yo no me vuelvo a enamorar, Cielo rojo, Zamba de mi esperanza, Quiero abrazarte tanto, grabaciones de música andina colombiana con arreglos modernos, y hasta rancheras, son temas que uno tiene guardado en el cofre de los recuerdos.

Nació en Manizales bajo el nombre de Carmen Elvira Duque Uribe y con apenas 15 años era la voz más buscada para eventos sociales de la ciudad. Comenzó a brindar canciones primero a sus compañeras de estudio, luego a familiares y finalmente al público, que a medida que ella crecía con su arte le daba todo su estímulo.

La primera vez que se escuchó su voz fue cuando Otto Greiffenstein comenzó a transmitirla en el programa La noche fantástica de Caracol. La llamaba La voz fantasma. Su padre, cabeza de una familia tradicional manizaleña prohibió rotundamente que su nombre fuera mencionado en radio. No era una opción decente para una niña de familia. Pero la belleza de su voz capturó la atención de las disqueras, que se ingeniaron la forma de desenmascararla. No pasó mucho tiempo para que a sus 18 años grabara una primera producción discográfica y se convirtiera en una de las voces más afamadas de la balada en el país. Contaba que ni se le ocurría ser artista. Era una estudiante de 18 años que copiaba las letras de Rocío Durcal y Vicky Carr. Hasta que un día recibió en su casa la visita que marcó su futuro. «Acababa de llegar del colegio y  tocaron el portón: ¿La señorita Carmenza Duque? Si, a la orden, ¿qué se les ofrece?». Era un emisario de Codiscos que estaba interesado en contratarla. «En ese momento Propaganda Sancho me pidió que grabara un disco de circulación cerrada para sus clientes. Y luego de muchas dificultades mi papá accedió advirtiendo que no quería una hija cantante y farandulera. Luego de analizarlo, mis padres me autorizaron a viajar con mi hermano mayor. Trajimos de regreso el contrato y mi papá lo tuvo que firmar por poder porque la mayoría de edad era a los 21. Después, cuando vio que yo era tan apreciada, mi papá se volvió mi mejor apoyo y mi mejor crítico». Ella abrigaba la esperanza de viajar a Italia para estudiar música. Únicamente se necesitaron ocho meses para que se quitara de la mente a Europa y se fijara como meta Bogotá. Una universidad en la capital. La idea era clara: tenía que matricularse en cualquier facultad para ocultar debajo de los libros sus intenciones de dedicarle más tiempo a la música. Escogió antropología. Sin tomar completamente en serio la profesión, llegaron invitaciones para que cantara en Panamá, Nueva York, Venezuela y en diferentes ciudades colombianas.

Tuvo el honor de ser invitada para cantar en la recepción que el entonces presidente Belisario Betancur le realizó al Papa Juan Pablo II en Palacio cuando visitó Colombia, siendo así la primera mujer en la historia que le cantara a un Papa, de lo cual resultó la idea de protagonizar El niño y el Papa, una película mexicana de 1986 dirigida por Rodrigo Castaño, traducida a más de once idiomas y que se sigue reproduciendo en muchos países del mundo Católico.

Durante su larga trayectoria fue fiel a la estricta regla de hacer cada año sólo un disco, sólo un concierto. Una norma a la que atribuyó el secreto de haber permanecido durante décadas como figura de primer plano y que le permitió combinar su vida de esposa y madre con su carrera artística. Y aunque la dedicación a su familia le impidió proyectarse artísticamente en el exterior y aceptar algunas estupendas ofertas, siempre pensó que lo que dejaba de hacer como cantante la vida se lo compensaba en el aspecto familiar. Lo que nunca imaginó fue que una dura experiencia familiar le daría un nuevo sentido a su arte. Sucedió cuando se enfrentó al diagnóstico de leucemia de uno de sus hijos. Entonces conoció la dramática lucha de muchos niños colombianos contra este terrible mal y decidió dedicarse a trabajar por esas pequeñas víctimas que en muchos casos morían por falta de una medicina. Su dolor se tradujo en fortaleza y su sensibilidad artística en sensibilidad humana.

Creó la Fundación Los Niños de Carmenza Duque, no sólo para dar apoyo económico y moral a las familias, sino una esperanza para los niños de superar su enfermedad. A través de sus discos y sus conciertos se recaudaron los fondos necesarios para un banco de drogas oncológicas y una casa donde los niños reciben cariño y hospitalidad durante el tiempo que dure su tratamiento. A su voz se sumaron muchos de sus amigos del medio artístico donando sus trabajos: José Feliciano, Julio Iglesias, Armando Manzanero, Fernando Botero.

Entre los reconocimientos por su carrera artística podemos mencionar infinidad de premios: El premio a la mejor voz en el Festival de Ancón en Perú; premio a la mejor voz femenina en el Festival Bolivariano en Venezuela; premio Alba del Castillo a la mejor cantante; California a la cantante colombiana más destacada en Los Estados Unidos; Las Llaves de la Cuidad de Miami otorgado por el alcalde de la ciudad. Y por las ventas millonarias de sus trabajos musicales discográficos recibió varios discos de oro y de platino.

Que los cumpla Feliz!

Marzo 17 de 1953: Nace Romualdo Brito

Nació el que puede considerarse como uno de los compositores más grandes del vallenato, fue uno de los más prolíficos y exitosos. La clave de su éxito fue tal vez su habilidad para moverse en un espectro musical que iba sin problema del vallenato más romántico y sentimental, a uno más alegre y divertido. 

Romualdo Brito era treintero. Significa que nació en un corregimiento de la Guajira, que, según él aseguraba, no está en el mapa, llamado Treinta Tomarrazón: «Es un corregimiento al sur de Riohacha donde una vez instalaron un punto de comunicación entre el interior y la Costa. Lo custodiaban 30 soldados, que eran reemplazados cada semana. Se iban para Riohacha en mula. No había carretera y la gente no sabía escribir. Así que les mandaban razones a los parientes con los 30 soldados y los campesinos de allá respondían igual. Por eso, terminó llamándose así». De las mil canciones que le grabaron numerosas voces vallenatas como Poncho Zuleta, Jorge Oñate, Martín Elías, Silvestre Dangond y El Binomio de Oro, ninguna cuenta esta historia. Sin embargo, mil canciones son mil anécdotas, y en sus 30 años de carrera dejó en sus composiciones huellas de momentos de su vida, del entorno de sus amigos y hasta de sus creencias religiosas. Sus canciones resumen historias, romances, alegrías, tristezas y vivencias. A su hija menor le puso el nombre de la tierra que tanto amaba: Alma Guajira.

Y no le gustaba el vallenato. De niño prefería las rancheras. A los 17 años hizo la primera canción y antes de un mes, Lisandro Meza ya la había grabado: era El dios cantor, dedicada a Leandro Díaz, el de Matilde Lina: «Lisandro y mi papá eran primos y parrandeaban juntos. En esa época los compositores hacían «cantores» de todos lados, El cantor de Valencia, El cantor de Fonseca, y me dije, no voy a hacer eso, voy a hacerle una canción al tío Leandro para indicar que es el dios de los cantores. Desde ahí, me grabaron todas las locuras que se me han ocurrido. Sí, como El santo cachón, que no pensé que fuera a gustarle a nadie. Yo tenía pena con los amigos. Me llamaban a la casa. Me insultaban. Las mujeres estaban ofendidas por el mensaje. Después, se fue olvidando. Afortunadamente el éxito pasó rápido. No hubiera querido que esa canción pegara». La mayoría de sus obras fueron compuestas tempranamente, por lo que tuvo que cederlas a su padre para que se las administrara. Y también por eso hubo intérpretes que se robaron algunas: «Me ponía furioso, pataleaba y todo, pero ellos arreglaban con mi papá. Como la mayoría de edad era a los 21 años, mi papá me firmaba las canciones y me representaba. Pero él arreglaba todo en las parrandas y de nada me valía protestar». Tuvo una relación cercana con Diomedes Díaz, contaba que el día en que se conocieron se fueron para una finca y la parranda duró tres días. En el 2018, en La gran noche de compositores, recibió la Orden del Congreso en el grado de Caballero.

Se desplazaba hacia Bogotá cuando sufrió el accidente en el que murió en carreteras del Cesar en noviembre del 2020. Muchos fueron los mensajes de condolencia. La Fundación del Festival Vallenato: «El vallenato está de luto con la muerte del insigne compositor Rumualdo Brito López, quien escribió páginas gloriosas en la música vallenata, quedándose en el corazón de todos los que hoy lamentamos su partida». El Ministerio de Cultura: «El Ministerio de Cultura lamenta la partida de Romualdo Brito, gran compositor e ídolo del folclor vallenato. Enviamos un saludo de solidaridad a sus familiares y amigos». Sayco, del que fue presidente: «Triste la partida del gran amigo y cantautor vallenato Romualdo Brito López. La gran familia Sayco está de luto, y Colombia ha perdido a uno de sus grandes juglares».

Marzo 17 del 2008: Muere Lucía Herrón

Muere Lucía Herrón, La embrujadora, una de nuestras boleristas más importantes entre los años 50 y 60.

Nació en Ciénaga en 1933 y murió en Medellín. Poco se conoce sobre su vida, sólo algunos datos que dió su hijo en alguna entrevista: «Mi mamá empezó su carrera artística cuando iba a las tertulias de un conocido maestro, quien vio sus aptitudes como cantante, le dio el consejo de que cantara comercialmente y de que entrara a estudiar al Instituto de Bellas Artes. Entró a la Institución y como cantante de una Orquesta. Inició su carrera artística hacia finales de los años 50 y se popularizó tanto que para comienzos de 1960 ya estaba consagrada como una artista conocida en el país. Posteriormente se dedicó por muchos años a la vida hogareña y sólo de manera esporádica en los años 70 y 80 hizo presentaciones. Su última actuación fue en Rionegro al empezar el siglo XXI».

No hay más datos como suele suceder con muchos de nuestros talentos. Así somos. Pero sabemos que obtuvo su mayor éxito interpretando el bolero conocido en Colombia como Amargura, y en otros países como Tu partida. Otro de sus exitos fue Firmamento.

Marzo 17: Día de San Patricio

Patricio nació en Gales de padres adinerados y a finales del siglo IV, a la tierna edad de 16 años, el joven Patrick fue hecho prisionero por un grupo de asaltantes irlandeses y llevado a través del Mar de Irlanda, donde pasó los siguientes seis años en cautiverio trabajando como un pastor solitario.

Su religión era su consuelo, por lo que se convirtió en un cristiano devoto. Después de seis años, Patrick escuchó la voz de Dios diciéndole que era hora de irse de Irlanda, así que escapó de sus captores y regresó a casa. Allí tuvo otra visión de un ángel que le dijo que debería volver a predicar el cristianismo a los irlandeses. Después de 14 años estudiando para ser sacerdote, regresó a Irlanda donde construyó iglesias y difundió la fe cristiana durante los siguientes 30 años hasta su muerte el 17 de marzo del año 460 d.C.

Se dice que  está enterrado en la Catedral de Down, construida en el siglo XII y se ha convertido en un lugar de peregrinaje durante más de 1500 años. Gente de todo el mundo viaja para dejar coronas de flores en la enorme piedra de granito que marca su tumba. Tradicionalmente, los emigrantes que salían de Irlanda se llevaban un puñado de césped de la tumba que les recordara su país.

Pero San Patricio realmente desterró a las serpientes de Irlanda, cómo seleccionó el simple trébol como su emblema y ¿por qué el color verde simboliza Irlanda y los irlandeses en todo el mundo?

Primero veamos lo de las serpientes. Es cierto que no hay serpientes deslizándose por la isla verde y probablemente nunca ha habido serpientes autóctonas en Irlanda. Expulsar a las serpientes de Irlanda fue probablemente un símbolo de poner fin a las prácticas paganas, que desaparecieron de Irlanda en los siglos posteriores a que San Patricio introdujera las semillas del cristianismo.

¿Por qué la gente se viste de verde?

Con 10 veces la población de Irlanda en los EE.UU que afirma tener ascendencia irlandesa, uno de cada cuatro británicos hace lo mismo, y muchos más en otros países del mundo. No es raro ver a personas que lucen tréboles dibujados en sus mejillas, o con mechones verdes en el pelo. Las calles de Dublín se visten de verde e, incluso, tiñen las aguas del río Chicago.

¿Qué pasa con el trébol?

San Patricio usó esta simple hierba verde para explicar el concepto de La Santísima Trinidad, y cómo todos podrían existir como elementos separados de la misma entidad. Sus seguidores adoptaron la costumbre de llevar un trébol el día de su fiesta. Y aquí hay algo que quizás no sepas: Los irlandeses no siempre se mostraron tan amables al ponerse el color verde. El folclore irlandés consideraba que el color era de mala suerte, ya que era el tono favorito de los duendes. Aquellos que usaran el color, especialmente los niños, podrían ser robados. Muchos aseguran que no existen los duendes, pero hay quienes no están de acuerdo. Los creyentes jurarán que si das un paseo por un tranquilo camino rural en Irlanda, puedes escucharlos riéndose al costado de la carretera.

Para los que lo celebran, ¡Feliz Día!

Marzo 16

A mí me encantan las celebraciones que hace Google, y creo que hay que destacar las muchas buenas historias sobre los logros de las mujeres en cualquier campo. Cuando la historia involucra y celebra el nacimiento de dos de ellas, bueno, pues hay que compartirlo con el mundo. No estamos familiarizados con su trabajo ni con su nombre, pero no es demasiado tarde para conocerlas.

1799 Anna Atkins

Esta botánica inglesa, considerada la primera persona en publicar un libro ilustrado exclusivamente con imágenes fotográficas, nació en Tonbridge, y su madre murió durante el parto. Su padre fue un químico, minerólogo y zoólogo. La figura de su padre fue clave en la conquista de la experimentación y la innovación. Sir John Herschel, un amigo de familia, inventó el proceso fotográfico de cianotipia en 1842, proceso que ella aplicó para resolver las dificultades de realizar dibujos precisos de especies científicas, y editó la primera entrega de Fotogramas de cianotipos de algas, constituyéndose en la primera persona en publicar un libro ilustrado exclusivamente con imágenes fotográficas, publicado en 1843. Se hicieron sólo tres copias pero luego continuó publicando otros libros.

El trabajo en conjunto con su padre, la botánica, la fotografía y el dibujo, lograron conseguir un trabajo minucioso, perfecto y precioso. Su trabajo fue el primer intento de plasmar imágenes de la forma más objetiva posible, traspasando el ámbito científico hasta hoy, y logrando ser un aporte a las artes y la estética.

1876 Esther Park

Hace un siglo, en Corea, se consideraba inadecuado que los médicos varones examinaran a las pacientes; como resultado, las mujeres no tenían acceso a la atención médica  adecuada. Eso cambió con la llegada de la Dra. Esther Park, la primera doctora en medicina occidental en Corea.

Nació en Seúl. Ella era una estudiante talentosa en Ewha School, la primera escuela moderna para mujeres coreanas, particularmente en estudios de inglés. Como resultado de esto fue presentada como intérprete a una doctora estadounidense, Rosetta Sherwood Hall, involucrada en misiones de servicios médicos en Corea. Aunque inicialmente no estaba interesada en la medicina, se inspiró después de observarla operar sin problemas a un paciente con labio leporino.

Después de mudarse a  Nueva York para estudiar inglés, se inscribió en una escuela de enfermería durante un año y, en 1896 ingresó en la Escuela de Medicina de Mujeres de Baltimore, precursora de la Escuela de Medicina Johns Hopkins. Se convirtió en la primera mujer coreana en graduarse de BWMS y obtener un título de doctor.

Al regresar a Corea comenzó a atender a pacientes femeninas en Bogu Yeogwan, el primer hospital para mujeres de Corea. Viajaría por las provincias para brindar atención gratuita a las mujeres, atendiendo a un promedio de más de 5.000 pacientes por año durante 10 años. Por su servicio recibió una medalla de plata del Emperador Gojong, y en el 2006 fue honrada en el Salón de la Fama de la Ciencia y la Tecnología de Corea.

Marzo 16 de 1781: Estalla la Rebelión de Los Comuneros

En la población de Socorro, que  pertenecía  a la Provincia de Santa Fe de Bogotá, empieza una revuelta iniciada por Manuela Beltrán de Quesada. Ese día, más de 2 mil personas se agolpaban en la plaza donde estaba la Alcaldía de Socorro para protestar contra el anuncio de nuevos impuestos establecidos por el Visitador-Regente. Manuela Beltrán consigue canalizar el malestar del pueblo, y al grito de «Viva el Rey y muera el mal gobierno, no queremos pagar la armada de Barlovento», llegó al frente de las masas a la puerta de la Alcaldía, arrancó el Edicto colgado en la puerta, simuló limpiarse el trasero con él, y terminó arrojándolo al suelo. Y así empieza La Revuelta Comunera.

El motivo de fondo de la protesta fueron las reformas administrativas y económicas implementadas por los Borbones en América, y más concretamente por el aumento de impuestos al aguardiente, al tabaco y a la salida y entrada de bienes de consumo, con el objetivo de mejorar la recaudación de la Hacienda Española. El anuncio por parte de la Audiencia del nuevo impuesto provocó las iras del pueblo en El Socorro,  que por aquel entonces era una de las regiones más prosperas del Virreinato pero que había sufrido una caída importante de su economía debido a la prohibición de la siembra del tabaco y por los problemas derivados de la tenencia de la tierra.

Fue solo un gesto, un símbolo, pero provocó que las protestas de esas 2 mil personas no se quedaran en sólo un día, sino que fue el inicio de una rebelión armada que puso en jaque a toda la Administración Colonial del Virreinato de Nueva Granada. Rápidamente la revolución se extendió por toda la zona nororiental del país, y pronto los gritos de la plaza dieron paso a las armas. Se reunió un ejército de casi 4 mil personas que marchó hacia Santa Fe de Bogotá. En el camino se les fueron uniendo hombres de poblaciones vecinas llegando a formar un ejército de entre 18 y 20 mil personas, y el movimiento armado llegó a las puertas de Santa Fe de Bogotá. El movimiento fue organizado en una Junta llamada «del Común», lo que provocó el nombre.

A mediados de mayo de ese año se consiguió un acuerdo con los comuneros en el cual la Corona se comprometía a eliminar la mayoría de impuestos a cambio de que detuvieran el avance hacia la capital del Virreinato, y rebajar otros, como los del tabaco y del aguardiente. Además, los criollos pidieron que algunos cargos que antes ocupaban ellos y que desde las reformas borbónicas eran ocupados por españoles, les fueran devueltos. El movimiento quiso también mejorar las condiciones de vida tanto de los indígenas como de los negros libertos; pidieron la devolución de algunos resguardos y minas de sal a los indígenas y la supresión del tributo que debían pagar los negros libertos. Este acuerdo se conoce como las Capitulaciones de Zipaquirá. Muchos de los insurgentes aceptaron las condiciones y volvieron a sus territorios.

El Virrey, una vez que regresó a Bogotá, argumentó que las Capitulaciones habían sido firmadas bajo coacción y sin su presencia ni permiso, y decidió enviar al Regimiento del ejército español que estaba fijo en Cartagena hacia Bogotá, para imponer la autoridad de la corona, lo cual consiguió, haciendo inútil el primer esfuerzo de los comuneros.

El movimiento comunero no era un movimiento independentista, ya que en ningún momento plantearon una separación de la Monarquía española, y ni siquiera pusieron en duda en ningún momento la autoridad del rey Carlos III, sino que buscaban una mejora de sus condiciones económicas. Sin embargo, muchos historiadores coinciden en resaltar su importancia como precursor de la lucha por la independencia, debido a que fue la primera revuelta y también la más extensa de las que ocurrieron a finales del siglo XVIII contra la Corona española y su economía, que buscaba siempre la recaudación masiva de impuestos desde los Virreinatos, importándole poco el nivel de vida de sus súbditos.

Marzo 16 de 1949: Nace Sergio Denis

SERGIO DENIS;MUSIC;SINGER;ARGENTINA;MV01

Nace en Argentina Héctor Omar Hoffmann Fenzel. Uno de los míos. Un ícono del romanticismo.

Te llamo para despedirme, pues, hoy, me alejo de tu vida

Lo nuestro nunca tuvo sentido, te quise y fue tiempo perdido … les suena?

Sergio Denis nació en una familia descendiente de alemanes, con la única excepción de su abuela materna que era española. Aunque su abuelo tocaba el acordeón, creció en un ambiente donde no había músicos. Cuando era chico aprendió a tocar la guitarra y comenzó a cantar en fiestas de la escuela y reuniones familiares, y en la adolescencia participó de un grupo folclórico junto a su hermano. Desde entonces siempre estuvo vinculado al mundo de la música.

A los 16 años integró el grupo Los Jokers, con el que recorrió durante cuatro años las localidades vecinas a su ciudad. Cuando terminó la secundaria viajó a Buenos Aires para probar suerte y se unió al grupo Los Bambis, con el que grabó por primera vez para un sello discográfico: CBS. Los productores de CBS vieron su potencial, le dieron la oportunidad de comenzar su carrera como solista, y grabó Te llamo para despedirme. Ahí nació su nombre artístico. El disco comenzó a difundirse y empezaron las actuaciones en televisión.

En 1970 viajó a la ciudad de México para participar en el Primer Festival de la Canción Latina, donde ocupó el 5.º lugar. A su regreso fue incorporado al Batallón de Comunicaciones para cumplir con el servicio militar obligatorio, actividad que alternaba con sus actuaciones en público y sus presentaciones en diferentes programas de televisión.

Con una carrera de mucho éxito, grabó más de 300 canciones, lanzó 28 discos, realizó presentaciones multitudinarias en el Luna Park además de participar en festivales emblemáticos. En 1974 actuó en el Teatro Ópera, siendo el primer cantante melódico argentino en realizar su espectáculo en esta prestigiosa sala porteña. En los 90 atravesó dificultades económicas y como consecuencia su estado de salud se deterioró y perdió la voz: estuvo cuatro años sin poder cantar. En el 2000 pudo relanzarse con el disco La vida vale la pena.

Uno de sus peores momentos fue en el 2007 cuando sufrió un ataque cardíaco mientras estaba realizando una gira en Paraguay y estuvo 17 minutos sin signos vitales. Tenía 58 años y estaba en un hotel: «Vi que de pronto yo estaba en un rectángulo negro que daba terror, con una ventana negra; vi la mitad de mí adentro, insultando a la muerte que era el diablo; no me daba por vencido, y de tanto pelear logré salir y volví. Pero antes había tenido la imagen de caerme en un tablón, una balsa, yo caía en la muerte, en un espacio negro, iba para abajo, y sólo quería parar. Hablé con un sacerdote amigo que me dijo que en teología todos esos lugares donde estuve tienen nombre, en los lugares horribles negros, ahí están los espíritus negros, los espíritus malignos. Vi luego una serie en la que una chica había estado muerta algunos minutos y contaba los mismos escenarios, el rectángulo, la ventana. Estuve un año pasando las noches con tres almohadas en la espalda para evitar quedarme dormido, por si venía la muerte, el diablo, y le quería pelear. Cuando aparecía el sol estaba más tranquilo y dormía, pero de noche me la pasaba rezando. Le rezaba a un dios que no sé quién es, no veo la cara pero me lo imagino en las montañas heladas, en el corazón de mis hijos, yo sé que está en los lagos, yo sé que hay alguien que creó todo, no sé quién, no puedo decir que es Dios, pero al creador le rezo todas las noches. Todo esto lo puedo contar ahora porque a veces tenía miedo de que la gente pensara que estaba loco si contaba esta historia», dijo tiempo después.

En el 2017 recibió el premio Gardel al Mejor Álbum Artista Romántico Melódico, y en el 2018 el premio Gardel a la Trayectoria por su destacada carrera discográfica en casi 50 años. Pero llegó aquella fatídica noche de marzo del 2019 en el Teatro Mercedes Sosa, en Tucumán, donde sufrió una fuerte caída por la que permaneció catorce meses en estado vegetativo. Antes del accidente había dicho unas palabras de reconocimiento al personal médico que nos salvan la vida, que trabajan con toda la fe y la fuerza en hospitales y clínicas. Luchó, tuvo alguna mejoría, pero perdió la batalla. Murió en mayo del 2020.

Marzo 15 de 1912: Nace Obdulio Arias

Nació en Aguadas Obdulio Arias. Cantante y compositor colombiano de música popular, integrante de varios duetos famosos entre ellos Ramírez y Arias con Noel Ramírez, considerado el dueto de ayer, de hoy y de siempre

Nació en Aguadas pero la familia emigró a Filandia (Quindío) en 1913. Decía con placentero énfasis que era hijo de esta población, en la que formó una orquesta. Disuelta la orquesta se fue para Bogotá y pasó por Medellín haciendo parte del Dueto Macías y Arias primero y del Trío Grancolombiano más tarde. Dejado el trío nace el Dueto Ramírez y Arias, que estuvo destinado a perdurar; de él quedan 80 canciones grabadas y tuvo presentaciones en Nueva York y Nueva Jersey. «El resto se lo llevó la avalancha de los años», dijo alguna vez.

Obdulio Arias y Noel Ramírez tienen una tradición artística de amplias proyecciones, y muy noble es su permanecer en la historia de la canción popular de nuestro país. Brilló en una época en la que los más ilustres duetos y tríos captaban la atención de todos los públicos nacionales, y cuando Medellín era Meca y escenario natural. Como dueto era grande en la época de nuestros más grandes duetos. Voces armoniosas y guitarras que arrullan la melodía es el resultado de este dueto inolvidable en el tiempo.

Cuando se formó Ramírez y Arias como signo serenatero, el primero tenía con buen suceso un bagaje con canciones argentinas y valses ecuatorianos, mientras que el segundo había ya militado en tríos de buena popularidad. Sus discos iniciales tuvieron gran acogida y lograron fama y celebridad, que con otros duetos y tríos caracterizan toda una época que nunca hubiéramos querido que se terminara. Con 44 años de ejercicio profesional escribió Montañera, Ingratitud, Salve Bambuco, Aguadeña y Señor Bambuco.

Escribió Obdulio al final de sus años: «Retirado, añoro las calles de Filandia, sus balcones engalanados por bellas mujeres, el aroma y verdor de sus praderas y la bondad prodigada por Dios a esta perla de los Andes». Murió en Pereira en septiembre del 2001.

Dicen que los colombianos tenemos mala memoria y somos ingratos con nuestros talentos musicales de antaño, y parece verdad pues no hay mucho sobre su vida documentado. En Ayer y hoy en mis canciones del escritor y periodista Noel Salazar Giraldo, cuarta edición 1984, que nació como un cancionero popular y se convirtió en un manual de consulta, aparece nuestro Obdulio me contaron por ahí.

Marzo 15 de 1973: Aniversario de Nelson Velásquez

Hoy apaga las velitas un gran intérprete de nuestra música vallenata, el de Por Querer Olvidarte

Hijo del rey de la guaracha Aníbal Velásquez, Nelson Velásquez Díaz nació en San Juan del Cesar, y desde muy niño se inició en la música interpretando el acordeón. A los 10 años ya estaba muy bien adiestrado para hacerlo y su primera actuación en grupo fue con Los Sensacionales. Más adelante, después de su travesía como acordeonero y cantante por toda La Guajira, es conocido en un festival vallenato por el director de Los Diablitos, y es así como pasa a ser la primera voz de los coros, participando como corista en tres trabajos musicales grabados por ellos. También hizo coros a grupos como Los Embajadores, y fue corista invitado en El Binomio de Oro.

En 1995 se le presenta la oportunidad de su vida, la de salir al ruedo como solista. Se reúne con el acordeonero Niky López y parten a Medellín para poner en marcha su grabación. El tema Volver se convirtió en todo un éxito. Después de esta vivencia exitosa, forma una agrupación con su amigo y compañero de toda la vida, el acordeonero Emerson Plata, y es así como nacen Los Inquietos de Colombia, y comienza la travesía de estos dos jóvenes que con su talento, uno con su melodiosa voz y el otro con su maestría para interpretar el acordeón, se han ganado a millones de públicos, no solo en su San Juan natal y Colombia entera, sino otros países.

Los artistas se deben a su público, es una de las frases que más a menudo expresan ellos como una forma de agradecerle a todos esos seguidores que apoyan su talento. Es por esto que para él, hacer un show virtual a mediados del 2020 se convirtió en uno de los momentos más nostálgicos de su carrera. Hizo parte de esos eventos online surgidos como alternativa de ingreso para todos los artistas mientras vivimos la pandemia. Cuando estaba a punto de iniciar una nueva canción, el sentimiento lo embargó y no dudó en manifestar lo duro que es cantar sin público presencial: «Les quiero confesar algo, no sé mis colegas del vallenato o de otros géneros que han hecho estos desconectados. No sé cómo han hecho, se necesita demasiada paciencia, de todo, para no extrañar a la gente, al público, al que te hala, al que te dice vé, cántame esta canción, que la foto. Es primera vez que lo hago y es difícil, se los digo. La nostalgia, los recuerdos de la gente» (y las lágrimas detuvieron su discurso por varios minutos). Cuando nuevamente agarró fuerzas para hablar continuó: «Los seguidores de nuestra música, de pronto comprendan estas palabras. Esto es muy duro. Extraño a mi gente, extraño al que me hale, al que me joda. Tengo fe que pronto regresaremos a los escenarios. Yo sé que Dios nos va a dar la oportunidad más adelante, sé que sí. Es difícil. Este sitio, yo con otros artistas acá lo abarrotamos de gente, y estar aquí sin nadie, es complicado. Tenemos que seguir, a luchar hasta que Dios nos dé permiso. Él nos va a ayudar».

Marzo 15 del 2017: Muere Vicky

Se nos fue una de las cantautoras más importantes del país, una de las líderes de la época de La Nueva Ola colombiana, y a la que se le considera como una de las representantes de la canción protesta

Vicky, como la conocemos, nació en Ansermanuevo. Hizo sus primeras apariciones en público en el Club del Clan y su primer gran éxito fue Llorando estoy. Cómo no recordar, Amigo caminante, Tan sola, Pobre gorrión, Lloraré y Amor amargo.

A inicios de los 90 decidió retirarse y estuvo fuera del escenario y de las productoras por casi una década, cuando, según ella contaba, vio declinar el estilo musical que le gustaba hacer, las emisoras románticas fueron desapareciendo del dial, la presión sobre sus novedades la exigía hacer cambios a su estilo, y se negó: «Yo no grabo para estar vigente, no soy un jabón, ni un producto, soy una persona. Si voy a escribir para mi gente, lo haré por honestidad, no por compromiso. No soy de las que graban para estar vigente, soy de las que graban para ser honesta».

Contaba además que era consciente de que un receso de 9 años sin grabar, en una industria que exige un disco por año, era casi un suicidio musical. Sin embargo, se daba por bien servida porque durante estos años, la gente la reconoció en la calle, le pidió autógrafos y la llenó de elogios. Luego regresó, sin aires de diva, con la timidez de una artista que se enfrentaba al juicio de un público que al verla regresar hacía la comparación con la cantante que los enamoró por tres décadas.

Niega reconocer la nostalgia. Aunque esa negación parece el fruto de haber convivido mucho con ella, y recuerda la primera vez en que sintió el efecto de sus canciones en los demás: «Una tarde iba caminando y escuché mi canción en las voces de un coro. Escucharla en otra versión, tan diferente, me hizo sentir grande y a la vez pequeña».

Esperanza Acevedo Ossa, Vicky, no solo demostró sus dotes como intérprete y como compositora sino que también incursionó en el mundo de la escritura. En 2014 lanzó su autobiografía titulada: Canto de Gorrión.

Marzo 14

A mí me encantan las celebraciones que hace Google, y creo que hay que destacar las muchas buenas historias sobre los logros de las mujeres en cualquier campo. Cuando la historia involucra y celebra el nacimiento de tres de ellas, bueno, pues hay que compartirlo con el mundo. No estamos familiarizados con su trabajo ni con su nombre, pero no es demasiado tarde para conocerlas.

1815 Josephine Lang

Una cantante y compositora alemana con más de 100 canciones publicadas y alrededor de 300 compuestas a lo largo de su vida, con lo que se estableció como una de las compositoras más prolíficas del período romántico.

Nació en una talentosa familia musical en Munich; su padre era un violinista de orquesta, y su madre una cantante de ópera profesional. Tocó sus primeras notas del piano cuando era una niña pequeña y a los cinco años comenzó a componer su propia música. Su debut público en un concierto en un museo a los 11 años solo reforzó su reputación como niña prodigio, y en 1830, el famoso compositor Felix Mendelssohn quedó tan impresionado con su talento que él personalmente se ofreció como voluntario para darle lecciones.

La década de 1830 fue un período de gran éxito creativo, que la estableció entre los círculos artísticos más influyentes de Europa. Sus composiciones originales continuaron ganando la admiración de algunas de las figuras musicales más famosas de Alemania, incluidos Robert Schumann, Clara Schumann y Ferdinand Hiller, los cuales le brindaron apoyo en la publicación de su trabajo. Además de lanzar más de 40 colecciones de canciones y música para piano, cantó profesionalmente en la corte de Munich y fue una profesora de música apreciada, contando entre sus estudiantes a miembros notables de la realeza alemana.

¡Alles Gute zum Geburtstag, Josephine Lang!

1859 Matilde Montoya

La primera mujer médica en México tuvo que superar numerosos obstáculos para conseguirlo. Al solicitar al presidente mexicano que abriera las puertas de la Escuela Nacional de Medicina, abrió un camino para que otras mujeres siguieran sus pasos. Nació en la Ciudad de México y era una niña brillante, alentada por su madre a continuar su educación. Con la ayuda de tutores privados completó su primaria y pasó la prueba para convertirse en maestra de escuela primaria a los 13 años. Al inscribirse en la Escuela de Obstetricia comenzó a trabajar en un hospital, el Maternity House, que se especializaba en atender partos ocultos de madres solteras, y obtuvo su título a los 16 años.

Persiguiendo su sueño de obtener un título en medicina, la joven partera se postuló a la Escuela de Medicina de México, pero se le negó la admisión porque las reglas oficiales se referían a «alumnos estudiantes» y no a «alumnas estudiantes». Sin inmutarse, le escribió al presidente mexicano, general Porfirio Díaz, pidiendo ayuda, quien finalmente apoyó su solicitud. Una vez aceptada oficialmente, solicitó que la Cámara de Representantes actualizara las reglas de la Facultad de Medicina para permitir la admisión de futuras candidatas. Sin embargo, incluso después de ser aceptada en el programa, algunos estudiantes la ridiculizaron y la describieron como una mujer insolente y peligrosa por tratar de convertirse en médico. A pesar de los obstáculos que enfrentó obtuvo su título en 1887. El presidente Díaz y su esposa asistieron a la ceremonia para felicitarla por convertirse en doctora en cirugía. Continuó ejerciendo durante décadas, brindando atención a todos los pacientes independientemente de su capacidad de pago, y cofundó la Asociación Médica Mexicana.

1914 Carolina María de Jesús

Nadie esperaba que se convirtiera en una autora de fama mundial, pero su primer libro, Quarto de Despejo: Diário de uma Favelada, se convirtió en un bestseller internacional. Nació en Brasil, de una madre soltera descendiente de esclavos. Tenía una educación limitada, pero aun así su poderosa prosa destacó las luchas de las personas que viven en las favelas de São Paulo.

Mientras criaba sola al primero de sus tres hijos construyó una casa improvisada con tablas desechadas y otros materiales encontrados. Se ganaba la vida como empleada doméstica y reciclando papel, latas y botellas para alimentar a su familia. Pero encontró tiempo para llevar un diario, llenando viejos cuadernos con los detalles de la vida diaria en un mundo que describió como el «vertedero» de la ciudad.

En 1958, Audalio Dantas, un reportero de un periódico local, la escuchó decir a un grupo de hombres que si no se portaban mejor, ella pondría sus nombres en su diario. Después de pedir verlo, quedó impresionado con el poder de su escritura. «Su talento era realmente único», dijo Audalio Dantas, quien hizo los arreglos para que los diarios fueran publicados en el periódico local. Instantáneamente causaron tal sensación que llevó a que el primer libro de Carolina vendiera 10.000 copias en solo tres días, convirtiéndose en uno de los libros más leídos en la historia editorial brasileña. Finalmente se tradujo a 13 idiomas y se distribuyó en más de 40 países, dando voz a las personas marginadas y abriendo nuevos caminos para los autores negros en Brasil y en todo el mundo.

Marzo 14 de 1973: Muere Rafael Godoy

Murió en Caracas, donde había echado raíces, un tolimense de Colombia y del mundo. Rafael Godoy.

Ay! que orgulloso me siento de ser un buen Colombiano. Les suena?

Nació en Natagaima en 1907. En las calurosas llanuras del Tolima pasó su niñez, en Ibagué hizo sus estudios secundarios, y siendo muy joven se convirtió en un militante comunista, lo que le llevó a salir de allí ante diferencias por sus ideas radicales para la época.

Luego de haber vivido en varias ciudades se estableció en Barrancabermeja en 1942, donde militó en el movimiento sindical y tuvo un papel importante en las huelgas petroleras de la época. Eran tiempos en que el Partido Comunista estaba refugiándose en la clandestinidad pues había sido declarado ilegal, y por eso terminó abandonando el país con su familia y huyó a Venezuela junto con su esposa y tres de sus hijas; allá  nació otro más.

Se dedicó a labores comerciales relacionadas con la joyería con mucho éxito, pero en sus ratos libres sentía la nostalgia de la patria y se inspiraba para componer canciones llenas de sentimiento nacionalista. En Caracas pudo cultivar su afición a la guitarra y a la composición. La tomaba y dejaba volar su inspiración musical. Desde su exilio estaba sintiendo la nostalgia de las pequeñas cosas que tuvo que abandonar: A mí denme un aguardiente, un aguardiente de caña, de las cañas de mis valles y el anís de mis montañas. No me den trago extranjero, que es caro y no sabe a bueno, y porque yo quiero siempre lo de mi tierra primero. ¡Ay, qué orgulloso me siento de haber nacido en mi pueblo!

Desde Venezuela insistía en reclamar lo suyo: A mí cánteme un bambuco de esos que llegan al alma, cantos que ya me alegraban cuando apenas decía mama. Lo demás será bonito, pero el corazón no salta, como cuando a mí me cantan una canción colombiana. ¡Ay, que orgulloso me siento de haber nacido en mi patria!

Al lado de Soy colombiano surgieron otros bambucos: Arrunchaditos, Pasito, Mi cafetal, Poquito a poco, Canto a Colombia, Por una sonrisa, el sanjuanero Tierra caliente y el vals Mi despedida, casi todos grabados por Garzón y Collazos. Mi compañera, la dedicó a su esposa cuando cumplió sus bodas de plata matrimoniales. Ella decía: «Rafael fue un eterno romántico, enamorado de la vida, simpático y agradable: mantenía a flor de labios el apunte jocoso».

Durante la tregua que planteó el gobierno de Rojas Pinilla en 1953, hizo repetidos viajes de Caracas a Medellín para dar a conocer su producción musical. Allí se relacionó con Antonio Botero, fundador de Sonolux, y con el dueto Garzón y Collazos.

Curiosamente cuentan que era bastante desafinado para cantar. Sin embargo Darío Garzón alcanzó a darse cuenta de la belleza de sus canciones y montó varias en el repertorio del dueto, consiguiendo versiones que alcanzaron mucha popularidad. Aunque muy talentoso, es el más grande e ilustre desconocido de los músicos y compositores colombianos.

Paradójicamente su canción cumbre, su más grande obra musical, trascendió en el tiempo más que su nombre. Los colombianos hemos cantado algún día con orgullo, dentro y fuera del país su canción estrella, ese bambuco inspirado en la nostalgia por estar fuera de su país. Donde quiera que esté un Colombiano y escuche esta canción, cantará, Ay! que orgulloso me siento de ser un buen Colombiano. Desafortunadamente un cáncer terminó con su vida, y sus restos reposan en Caracas, cuando según muchos, deberían estar en un sitial de honor en su terruño.

Marzo 14 del 2017: Muere el “Rocky” Valdéz

Murió en su natal Cartagena de Indias el dos veces campeón mundial de los pesos medianos, un indiscutido campeón que junto a Kid Pambelé conformó la dupla de oro del boxeo nacional.

Nació en 1946 y debutó cuando todavía no había cumplido los 17 años. Ganó su primer título mundial del Consejo Mundial de Boxeo en 1974 en Montecarlo, y el segundo en 1977 en Italia. Sus peleas más memorables fueron sin duda las dos con Carlos Monzón, combates que son recordados y considerados como épicos por los aficionados de este deporte.

«Cartagena y Colombia se levantan con una triste noticia. Murió el campeón Rodrigo Valdéz, ejemplo de dignidad y pundonor deportivo. Cada combate de Rodrigo Valdez era una enseñanza de coraje y amor propio. Por su valentía llegó a ser uno de los grandes de la historia», recordó el alcalde cartagenero Manuel Vicente Duque, periodista y aficionado al boxeo.

«La unidad deportiva que se construirá a la salida de Cartagena, para los Juegos Nacionales Bolívar 2019, llevará el nombre de Rodrigo ‘Rocky’ Valdez, en homenaje al boxeador», fue anunciado por el Gobernador de Bolívar: «Lo vamos a honrar en los Juegos Nacionales, y en la infraestructura deportiva, nombrando esos escenarios con su nombre. Ese es un pequeño detalle que haremos, de los muchos que merece el gran campeón. Organizaremos también una cátedra que sea un homenaje permanente a él, para los deportistas de Bolívar, y que su legado no se pierda: ser un gran deportista, pero ser también un ser humano integral y virtuoso». Recordó además su relación con el campeón: «Rocky era un gran ser humano, muchas veces nos recomendó proyectos para el boxeo, y siempre nos acompañó en las veladas».

Quienes conocieron a Rocky Valdéz lo describían como una persona alegre, amable y sencilla. Le gustaba hablar de sus historias en el cuadrilátero y de la época en que fue el gran boxeador de Colombia.

Marzo 14 del 2018: Muere Stephen Hawkings

Muere el que es considerado una de las mentes más brillantes de la historia de la ciencia.

Stephen Hawkings nació en Oxford, (porque sus padres se habían trasladado desde Londres para escapar de los bombardeos alemanes), en el 300 aniversario de la muerte de Galileo. Descrito como un hombre de gran sentido del humor, se convirtió en un embajador popular de la ciencia, y siempre tuvo cuidado de asegurarse de acercar al público a temas que podrían parecer complejos para la mayoría. Para tener una visión más profunda de su línea de pensamiento veamos algunas de sus reflexiones:

1. «Dios puede existir, pero la ciencia puede explicar el universo sin la necesidad de un creador».

En muchas ocasiones afirmó ser ateo. En este caso, Dios sería una especie de limitación para el conocimiento: «Creo que el universo se rige por las leyes de la ciencia. La ciencia triunfará porque funciona».

2. «Creo que la vida se desarrolla espontáneamente en la Tierra, por lo que debe ser posible que se desarrolle en otros planetas». Tanto es así que lanzó un programa de 100 millones de dólares destinado a buscar una civilización extraterrestre: «No hay duda. Es hora de comprometerse a encontrar la respuesta, a buscar vida fuera de la Tierra. Somos inteligentes. Necesitamos saber».

3. «El desarrollo de la inteligencia artificial podría ser el fin de la raza humana».

A causa de su enfermedad se involucró con la inteligencia artificial, lo que lo impresionó y asustó al mismo tiempo: «La pregunta clave para la humanidad de hoy es si deberíamos iniciar una carrera armamentista hecha con inteligencia artificial o si deberíamos evitar que se inicie. Es sólo cuestión de tiempo antes de que aparezcan en el mercado negro o en manos de terroristas y dictadores que quieren controlar a sus poblaciones, o déspotas que quieren limpiar étnicamente sus territorios». Advirtió además: «Estoy convencido de que tendremos que dejar la Tierra».

4. «La idea de viajar en el tiempo no es tan descabellada como parece».

En un artículo del 2010, dijo que durante mucho tiempo evitó hablar sobre viajes en el tiempo por temor a ser etiquetado como loco: «Estoy obsesionado con el tiempo. Si tuviera una máquina del tiempo, visitaría a Marilyn Monroe en sus días de gloria o iría tras Galileo mientras construía su telescopio. Tal vez incluso viajaría hasta el fin del universo para descubrir cómo termina nuestra historia cósmica».

5. «Las cosas pueden escapar de un agujero negro, tanto fuera como posiblemente también en otro universo».

Argumentó que los agujeros negros emiten un tipo de radiación térmica, que cuando se emite en grandes cantidades puede provocar su desaparición, y con ello, que se destruya la información de un objeto que cae en él. Luego cambió de opinión y dijo que la información podría sobrevivir: «Los agujeros negros no son tan negros como los hicimos parecer. No son las cárceles eternas que alguna vez se consideraron». Esta no la entendí, pero sigamos.

6. «Tienes que tener una actitud positiva y sacar lo mejor de la situación en la que te encuentras».

Cuando fue diagnosticado con esclerosis lateral amiotrófica tenía 21 años, y los médicos predijeron que solo tendría tres años más de vida. Sin embargo vivió hasta los 76: «La ciencia es una buena área para las personas con discapacidades porque principalmente necesita la mente».

7. «Mantener a alguien con vida contra su voluntad es una gran indignidad».

El suicidio asistido debería ser un derecho para los pacientes con enfermedades terminales, según él. En alguna entrevista afirmó que consideraría terminar con su propia vida si sentía que era una carga para otras personas y no tenía más contribuciones que hacer. Sin embargo, advirtió que: «Ni siquiera piensen que voy a morir antes de revelar más secretos del universo».

8. «Somos una especie avanzada de monos en un planeta más pequeño que una estrella mediana. Pero podemos comprender el Universo. Y eso nos hace muy especiales». El objetivo de Stephen Hawking era obtener una comprensión completa del Universo, de por qué es como es y por qué existe. Su consejo para la gente era: «Mirar las estrellas y no a los pies. Trate de dar sentido a lo que ve, y pregúntese qué hace que exista el Universo. Sea curioso».

Marzo 13 de 1921: Nace Armando Cabrera

Nace en Santiago de los Caballeros, República Dominicana, Armando Cabrera.

Ya que no puedo decírtelo al oído, por la suerte cruel que nos separa.

Quiero decirte por medio de mi canto, que no puedo seguir sufriendo tanto. Les suena?

Compositor de grandes boleros, nació en una familia de artistas. Su madre durante décadas hizo las delicias en un programa que se llamaba Romance campesino, y que lo consideraban casi un toque de queda nacional pues a esa hora todos se quedaban en casa para verlo.

Desde muy pequeño comenzó a acompañar canciones con la guitarra y, autodidacta, llegó a ganar un concurso que se organizó en la emisora más importante de su ciudad, lo que le sirvió para irse metiendo cada vez más en las principales emisoras de radio del país. Durante la década del cuarenta formó parte de varios tríos, Los Trovadores Modernos, el Trío Azteca, actuando en vivo por los teatros del país siempre a sala llena.

De su cancionero muchos fueron los títulos grabados y muchos los que gozaron del inmenso favor del público. Tú me haces falta, esa queja profunda, expresión de nostalgia sentida del amor ausente, y Veneno, son dos piezas claves en la historia del bolero dominicano que han rodado por el mundo en las voces de conocidas figuras de la canción. Tenemos la interpretación magnífica de Tú me haces falta en voces como Rubén Blades, Emmanuel y José Feliciano. Plácido Domingo, en su afortunada incursión en la canción romántica latinoamericana, seleccionó una representación de autores dominicanos encabezada por esa bella melodía. Y de Veneno hay una versión grabada por Juan Luis Guerra Marzo 13 de 1940.

Marzo 13 de 1940: Nace Jorge E. Sarabia

Nace en en la Isla de Margarita, José E. Sarabia, conocido como Chelique Sarabia.

Ansiedad, de tenerte en mis brazos, musitando palabras de amor

Ansiedad, de tener tus encantos, y en la boca volverte a besar. Les suena?

Cantante, músico, compositor, poeta, publicista, productor de televisión y asesor político, es uno de los más exitosos músicos venezolanos del siglo XX. Han sido contabilizadas cerca de 2000 canciones de su autoría de las cuales se han interpretado más de 1600, y tiene más de 1000 registradas en la Sociedad de Autores y Compositores de Venezuela. Se deben también a su inspiración la letra del himno de Caracas, cuya música es obra del compositor ítalo-venezolano Tiero Pezzuti. Algunas de sus obras que forman parte del acervo cultural venezolano son: Chinita de Maracaibo, Cuando no sé de ti, El crisol de un cantar, En este país, Himno de la amistad, Me está doliendo el alma, No te muerdas los labios. Y su obra más conocida, Ansiedad

La música en la vida de este creador venezolano comienza a aflorar en sus años de infancia mientras estudiaba en su isla natal; a los 13 años compuso su primera canción, y a los 15 su famosa Ansiedad.

Cuenta cómo le surgió la inspiración para escribirla: «Acababa de llegar a Caracas desde San Tomé, un campo petrolero anzoatiguense, para cursar estudios en la Escuela Técnica Industrial. Con la nostalgia del recién llegado, fui un día al cine y vi una película mexicana, con Pedro Infante y Libertad Lamarque, titulada Ansiedad. Triste por la lejanía de mi hogar y de mi novia, llegué a la residencia estudiantil donde vivía y comencé a rasgar mi cuatro para componer una canción, que terminé titulando como el filme que acababa de ver». Ya para entonces tenía varias composiciones en su haber y lo que más deseaba era darlas a conocer.

Recuerda cómo lo logró: «Una tía mía vivía en la Calle del Medio del Prado de María y con ella iba a pasar los fines de semana. Su esposo tenía una quincalla, al lado estaba una barbería. Por un amigo, me enteré que Rafael Montaño, uno de los cantantes más famosos de la época, iba con regularidad a esa barbería, por lo que comencé a montarle guardia todos los sábados, hasta que lo conseguí. Él vivía cerca, fuimos a su casa y yo, acompañado de un cuatro, le hice escuchar algunas de mis canciones, y eligió Ansiedad y la grabó». Esta obra es la que más satisfacciones le ha reportado, con más de 800 versiones en muchos idiomas.

Entre los intérpretes que la grabaron están Alfredo Sadel, Lucho Gatica y Nat king Cole. A comienzos de la década de los sesenta se convierte en productor de discos independiente y de un programa de televisión en donde descubrió a artistas como José Luis Rodríguez. La riqueza de su obra le ha permitido obtener importantes reconocimientos y participar en numerosos festivales.

Se destacó también como compositor de jingles publicitarios. El partido Acción Democrática lo contrató en 1973 para hacer la música de la campaña electoral de Carlos Andrés Pérez. Compuso para el candidato Ese hombre si camina, considerado uno de los jingles políticos más famosos de todos los tiempos. En el 2015 le fue otorgado el Grammy Latino a la Excelencia Musical, y vive desde hace varios años en Puerto La Cruz, donde conduce un programa de radio, tiene activa participación en diversas iniciativas ciudadanas, y sigue componiendo.

Marzo 13 de 1947: Nace Manolo Galván

Nació en la Provincia de Alicante uno de los míos. Manolo Galván a los 15 años comenzó a cantar en contra de la voluntad de su familia, que quería para él otro estilo de vida. Abandonó sus estudios y se trasladó a Madrid, donde se integró en un grupo llamado Sonors. Más tarde abandonó el grupo para iniciar una carrera solista, pero al no lograrlo se fue a Málaga para formar parte del grupo Los Gritos, con quienes estuvo durante tres años. En 1970 consiguió comenzar su carrera como solista, y en 1972 hizo una gira por Latinoamérica. En 1981 decidió quedarse en Argentina: «Soy español, tenía una casa preciosa en Madrid, pero me vine. Y aquí tuve una hija más, aquí están mis nietos, y si hay que dar la vida por Argentina, ¡adelante!»

Triunfó en 19 festivales en España y participó varias veces en el Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar, lo que hizo que gozara de gran popularidad en Chile. En el 2006 anunció su despedida de los escenarios. Pero siguió: «Yo me quería retirar, pero empezaron a salir contratos y mi hijo, que es mi manager, comenzó a firmar y me dijo «papá, no te retiras nada, te queda un añito más. Además son 19 países de los que tienes que despedirte». Decía que iba a extrañar mucho los escenarios el día que se retirara: «La música ha sido mi vida, me emociona decirlo. Ese día va a ser muy difícil. Pero todo tiene un límite, no se puede salir a demostrar que eres el más viejo que canta baladas, calvo, o con dos pelucas». Se retiró finalmente tras una gira conmemorativa por sus 46 años con la música. Su última presentación en Colombia fue en el 2008, al lado de Rudy Márquez, Palito Ortega, Vicky y Óscar Golden, en el Diamante de Baseball de Cali.

El cantante que ese acento español no lo perdió pese a sus décadas en Argentina, y que le reportó un atractivo extra a la hora de conquistar esas tierras, decía que no pensó nunca en volver a vivir en su país natal: » No, ya no. Ahora España es casi extraña para mí. Tengo todo acá. Lo único que traje de allá fueron dos hijos, acá nació otra, y mi esposa. Bueno, mi ex. Ahora no tengo esposa pero voy a ver si compro alguna». Tampoco le asustaba la vejez: «Es una experiencia y la estoy transitando con mucha dignidad. Me siento bien. Cuando fui joven mi vida no fue más que trabajar, así que creo que voy a disfrutar de verdad de mi vejez, con mis nietos, mi gente y mi caña de pescar. Y el día que quiera cantar, canto y ya está. Cuando uno es artista lo es hasta la muerte». Pero su deseo se truncó en el 2013; a los 66 años murió en Buenos Aires, y de acuerdo a su voluntad, sus cenizas fueron esparcidas en el mar. Dejó un gran vacío en la música, pero por fortuna también un legado de 40 discos, con clásicos inolvidables, maravillosos temas como Poema del alma, Deja de llorar, Te quise, te quiero y te querré, Hijo de ramera, ¿Por qué te marchas, abuelo?, Sólo pienso en ti, Suspiros de amante», canciones que fueron furor en los 70, y que se convirtieron en testigos de muchos romances. Canciones de esas que nacen para la eternidad y para llenar siempre de emoción a quien la escucha.

Manolo Galván, ¡Vida corta, ídolo eterno!

Marzo 13 de 1953: Nace Romualdo Brito

Nació el que puede considerarse como uno de los compositores más grandes del vallenato, fue uno de los más prolíficos y exitosos. La clave de su éxito fue tal vez su habilidad para moverse en un espectro musical que iba sin problema del vallenato más romántico y sentimental, a uno más alegre y divertido. 

Romualdo Brito era treintero. Significa que nació en un corregimiento de la Guajira, que, según él aseguraba, no está en el mapa, llamado Treinta Tomarrazón: «Es un corregimiento al sur de Riohacha donde una vez instalaron un punto de comunicación entre el interior y la Costa. Lo custodiaban 30 soldados, que eran reemplazados cada semana. Se iban para Riohacha en mula. No había carretera y la gente no sabía escribir. Así que les mandaban razones a los parientes con los 30 soldados y los campesinos de allá respondían igual. Por eso, terminó llamándose así».

De las mil canciones que le grabaron numerosas voces vallenatas como Poncho Zuleta, Jorge Oñate, Martín Elías, Silvestre Dangond y El Binomio de Oro, ninguna cuenta esta historia. Sin embargo, mil canciones son mil anécdotas, y en sus 30 años de carrera dejó en sus composiciones huellas de momentos de su vida, del entorno de sus amigos y hasta de sus creencias religiosas. Sus canciones resumen historias, romances, alegrías, tristezas y vivencias. A su hija menor le puso el nombre de la tierra que tanto amaba: Alma Guajira.

Y no le gustaba el vallenato. De niño prefería las rancheras. A los 17 años hizo la primera canción y antes de un mes, Lisandro Meza ya la había grabado: era El dios cantor, dedicada a Leandro Díaz, el de Matilde Lina: «Lisandro y mi papá eran primos y parrandeaban juntos. En esa época los compositores hacían «cantores» de todos lados, El cantor de Valencia, El cantor de Fonseca, y me dije, no voy a hacer eso, voy a hacerle una canción al tío Leandro para indicar que es el dios de los cantores. Desde ahí, me grabaron todas las locuras que se me han ocurrido. Sí, como El santo cachón, que no pensé que fuera a gustarle a nadie. Yo tenía pena con los amigos. Me llamaban a la casa. Me insultaban. Las mujeres estaban ofendidas por el mensaje. Después, se fue olvidando. Afortunadamente el éxito pasó rápido. No hubiera querido que esa canción pegara».

La mayoría de sus obras fueron compuestas tempranamente, por lo que tuvo que cederlas a su padre para que se las administrara. Y también por eso hubo intérpretes que se robaron algunas: «Me ponía furioso, pataleaba y todo, pero ellos arreglaban con mi papá. Como la mayoría de edad era a los 21 años, mi papá me firmaba las canciones y me representaba. Pero él arreglaba todo en las parrandas y de nada me valía protestar». Tuvo una relación cercana con Diomedes Díaz, contaba que el día en que se conocieron se fueron para una finca y la parranda duró tres días. En el 2018, en La gran noche de compositores, recibió la Orden del Congreso en el grado de Caballero.

Se desplazaba hacia Bogotá cuando sufrió el accidente en el que murió en carreteras del Cesar en noviembre del 2020. Muchos fueron los mensajes de condolencia. La Fundación del Festival Vallenato: «El vallenato está de luto con la muerte del insigne compositor Rumualdo Brito López, quien escribió páginas gloriosas en la música vallenata, quedándose en el corazón de todos los que hoy lamentamos su partida». El Ministerio de Cultura: «El Ministerio de Cultura lamenta la partida de Romualdo Brito, gran compositor e ídolo del folclor vallenato. Enviamos un saludo de solidaridad a sus familiares y amigos». Sayco, del que fue presidente: «Triste la partida del gran amigo y cantautor vallenato Romualdo Brito López. La gran familia Sayco está de luto, y Colombia ha perdido a uno de sus grandes juglares».

Marzo 13 de 1967: Nace Andrés Escobar

Hoy recordamos al caballero del fútbol en el que podría haber sido su cumpleaños número 54

Quienes lo conocieron, compañeros de equipo en el Atlético Nacional, en la selección, sus familiares, amigos y periodistas, que siguieron de cerca su evolución como jugador profesional, coinciden en la calidad de sus valores como ser humano, dentro y fuera de la cancha. Era todo lo contrario al tipo de futbolista de la época. Saludaba a cualquier persona que se le acercara.  Era un referente tanto para sus compañeros como para quienes lo veían como un modelo a seguir. Solo pensaba en entrenar, en estar en la mejor condición física posible.

Era un ser desinteresado que siempre trató a todo el mundo de la misma manera. Jamás se aprovechó de su condición ni de su fama para sacar ventaja. Era sencillo, humilde. Hasta en las jugadas más calientes, en las que se pueden perder los estribos, el dos de la selección nunca perdió el control. Por el contrario, recuerdan que se devolvía a pedir disculpas y darle la mano a quien podía quedar en el suelo lastimado. No por nada hoy sigue siendo recordado como el caballero del fútbol. Ni siquiera cuando el país se le vino encima después de la eliminación del Mundial del 94 dejó de recibir a los aficionados que le pedían un autógrafo o una foto. Al día siguiente del partido habló con los periodistas, visiblemente afectado por la eliminación. Y en esas últimas palabras soltó una frase que hoy resulta absurda: “Hay que tener fe. La vida no termina aquí».

Pero se la quitaron. A Andrés Escobar lo mató la mafia. El narcotráfico. Los apostadores del fútbol. Fue un hecho aislado y circunstancial, dijeron las autoridades. O un asesinato completamente ajeno al fútbol, dijo el entonces alcalde de Medellín, Luis Alfredo Ramos. Las hipótesis sobre su muerte siguen siendo varias, pero todas tienen un elemento en común: resaltan la tremenda injusticia de este crimen.

Marzo 12 de 1900: Nace Gustavo Rojas Pinilla

Nació en Tunja e inició su carrera militar en la Escuela de Cadetes en 1920. En 1924 solicitó el retiro del servicio activo para realizar estudios de Ingeniería Civil en Indiana, donde obtuvo el título en 1927. A partir de ahí empezó a participar en la construcción de carreteras y otras obras de ingeniería. En 1953 Colombia experimentaba una crisis política. Las consecuencias del asesinato de Gaitán aún se sentían, el Congreso se encontraba clausurado desde 1949. Laureano Gómez seguía teniendo influencia protagónica en el gobierno, que se tradujo en la convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente para realizar una reforma constitucional que debía empezar a discutir el 15 de junio de 1953. No inició la discusión porque el 13, el General Gustavo Rojas Pinilla, quien era el comandante general de las Fuerzas Armadas, asumió el poder tras un golpe de estado. La condición de presidente le fue legitimada cinco días después por la Asamblea Nacional Constituyente, que, lejos de dejar de reunirse por el golpe, se convirtió en la corporación legislativa de su gobierno. En este caso no hubo ni derramamiento de sangre, ni acciones militares, y el golpe fue promocionado y celebrado por la élite política del país. 

Ocupó la presidencia del 13 de junio de 1953 al 10 de mayo de 1957, y su mandato se caracterizó por la realización de relevantes trabajos de infraestructura, obras como el Aeropuerto Internacional El Dorado, el Hospital Militar Central, la calle 26, el Centro Administrativo Nacional (CAN) y el programa social Sendas.

Durante su gobierno se inició el proceso de despolitización de la policía, la traída del servicio de televisión al país. Su gobierno trajo la esperanza de una paz duradera después de varios años de violencia agudizada. Desde su ascenso y en sus discursos expresó su interés por la consecución de una convivencia garantizada no sólo por la firma de un armisticio sino por la posibilidad de que sectores excluidos tuvieran una mejor calidad de vida.

Según sus ideas, sin la justicia social sería muy difícil la paz y mucho más la libertad: «No se puede hablar de paz sin justicia social y justa distribución y goce de las riquezas». Para conseguir ese fin, creó en 1954 la Secretaría Nacional de Asistencia Social, Sendas, un ideal que tenía componentes cristianos y sociales. En la práctica, esto se tradujo en obras puntuales como la entrega de mercados y ropa, guarderías para niños pequeños, ayudas a madres, y la construcción de casas de bienestar para los menos favorecidos. Con el tiempo se convirtió en la semilla del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar. Con sus acciones, Sendas fue ganando aceptación entre los sectores populares y con ello, también el general.

En 1954 la Asamblea aprobó el cambio constitucional para extender el sufragio a las mujeres. ​La primera cédula que se expidió fue la de su esposa y se dió la numeración partiendo de 20 millones. Hasta 1955, el porte de armas de fuego era legal en Colombia. Rojas Pinilla implementa el sistema de salvo conductos, y el porte de armas se vuelve ilegal.

Su gobierno se caracterizó por mantener un continuo enfrentamiento con la prensa, con la expedición de normas que pretendían proteger a funcionarios de posibles injurias y calumnias. Se ordenó por decreto que «Todos los periódicos del país deben ceñirse al relato de los hechos y evitar la interpretación», y se dictó un decreto que establecía pena de prisión para quien difamara al gobierno. Cerró temporalmente varios periódicos, entre ellos El Tiempo, El Espectador y El Siglo mediante un decreto titulado «Una prensa libre pero responsable».

Estableció impuestos sobre los ingresos y el patrimonio que causaron muchas revueltas y que terminaron con un saldo lamentable de víctimas. Así mismo instauró la persecución religiosa contra el protestantismo al que acusaba de difundir propaganda comunista, y ese partido fue declarado ilegal.

Otros aspectos que se destacaron fueron que en 1955 firma un pacto con los EE. UU. que permite a las compañías extranjeras sacar el 100% de sus ingresos del país. Poco después comienzan a salir vuelos cargados de oro y platino del país, y finalmente el cierre del crédito externo por parte de los organismos financieros internacionales en el último año de gobierno, lo que sin duda profundizó las dificultades que afrontaba y aceleró su caída. Se enfrentó a un juicio político y fue condenado. Sin embargo siete años después, el Tribunal Superior de Cundinamarca le devolvió sus derechos políticos y la Corte Suprema de Justicia confirmó el acto judicial.

En 1970 se presentó a las elecciones presidenciales con su partido ANAPO, enfrentándose a Misael Pastrana. Las elecciones resultaron bastante reñidas y la Corte Electoral proclamó a Pastrana como presidente, hecho que él y sus partidarios calificaron como un fraude electoral. Dentro del grupo inconforme de los anapistas existían grupos de izquierda radical que él no apoyó, y de estudiantes, de los cuales surgió luego el movimiento guerrillero M-19. Y lo demás es historia.

Marzo 12 de 1946: Nace Liza Minnelli

Nace en Los Ángeles la actriz que se inmortalizó en el cine como la bailarina Sally Bowles, en la película que le valió un Oscar a la mejor actriz, Cabaret, que se convirtió en un clásico. Tener éxito en Broadway y Hollywood, dos de las vitrinas más importantes del mundo del espectáculo estadounidense, no es para todos. Y Liza Minnelli se encuentra entre las pocas artistas que lograron la hazaña.

Hija de dos grandes nombres del cine que no necesitan presentación, logró destacarse por sus propios méritos. Interpretó su propia vida en sus mejores películas. No todo lo que filmó es bueno. Pero su arte le salvó la vida. El escenario, y su voz única, potente, clara y abierta, le dieron vida y se la salvaron.

Desde muy pequeña se acostumbró al mundo del cine. El debut cinematográfico fue en In the Good Old Summetime, cuando tenía solo 3 años. Después de un breve paso por la Sorbona, dio su primer gran paso artístico actuando a dúo con su madre en el London Palladium, que tuvo una excelente repercusión. Las invitaciones para actuar en Broadway llovieron, y deslumbró en el espectáculo musical. Fue en esta ocasión que conoció a Peter Allen, amigo de su madre.

El mundo del espectáculo y el entretenimiento fue el día a día en su vida, en su hogar, en su educación, conviviendo con los amigos de la familia y, en consecuencia, con sus fiestas arrolladoras. Tomando prestada una frase de su película más famosa, «La vida es un cabaret», su vida se embarcó en el torbellino que fue Hollywood en los años dorados. Su madre enfrentó problemas prosaicos con la vida cotidiana. A su padre le encantaba organizar grandes fiestas en su mansión.

En 1988 es contratada nada menos que por Frank Sinatra para participar en una larga gira. A partir de este momento forma parte de la pandilla Sinatra, donde no faltaron las fiestas, las bebidas.

Curiosamente, en medio del glamour que la rodeaba, parecía imitar a su madre en temperamento, incertidumbres e inseguridades para manejar una vida con tantas responsabilidades. Con respecto a las relaciones, conocemos la lista de uniones rotas, todas fueron un desastre. El último matrimonio con David Gest fue un disparate. Los presentó Michael Jackson, lo que no era ninguna garantía. Pocos años después le diría a su gran amigo: «¿Cómo dejaste que me casara con ese idiota?»

En un programa de televisión buscó hacer un inventario de su atribulada vida: «La adicción al alcohol vino como resultado de lo que vi y viví. La gente dice que sólo se depende del alcohol si se es débil y no se tiene fuerza de voluntad. Yo he ganado tres premios Tony, un Oscar y tres Globos de Oro. ¿Suena esto a falta de voluntad?».

Recordaba su infancia, cuando su papá y su mamá se divorciaron cuando ella tenía sólo 5 años, pasaba sus días entre uno y otro. «Estaba locamente enamorada de mi padre. Lo echo mucho de menos. Me regaló mis sueños y ese es un regalo enorme». Recordaba momentos difíciles con su madre, pero prefiere quedarse con los felices: «Nos divertimos mucho porque ella era muy divertida y amaba mucho a sus hijos. Era protectora y muy estricta. Quería que hicieras lo correcto, como cualquier madre. Es así de simple». Cuando comenzó a seguir sus pasos y ganó un Tony a los 19 años: «Recuerdo que ella me dijo: No te enojes si te comparan conmigo, porque eres única y eres una gran artista. Era maravillosa, siempre tratando de salvarnos de las cosas malas que decía la gente. No fue una gran tragedia ser la hija de Judy Garland. Tuve una infancia extraordinariamente interesante aunque no tuvo nada que ver con ser una niña». A pesar de que murió cuando ella tenía solo 23 años, dice que sentía su presencia: «Cuando trato de hablar con ella, ella está ahí. Y siempre me decía, ignóralos, ignora las opiniones. Solo continúa».

Liz, a sus 75 años, con el corazón partido desde los cinco y la salud golpeada por la tempestad de su vida, vive lejos de la esfera de la vida pública de forma muy reservada. La vida ha dejado sus huellas, pero como ha dicho muchas veces, no se arrepiente de nada. Y seguramente si un cañón blanco la iluminara ahora y sonaran cuatro compases, abriría la boca, tensaría sus mágicas cuerdas vocales, acomodaría sus costillas, (hay que respirar bien), y cantaría hasta el desgarro, hasta erizarte los pelos con su voz única.

Marzo 12 de 1980: Aniversario de Angélica Blandón  

Hoy apaga las velitas una de las que está en la lista de las tres famosas colombianas que han vivido su embarazo en pandemia. Aunque el embarazo no lo estaba buscando, Angélica Blandon dice que una nueva vida es ver con optimismo el futuro

Querida amiga:

Te escribo empezando con esta pregunta. ¿Por qué me pasa este embarazo a mí si no estaba planeado?

Querida amiga mis planes con la pandemia se han vuelto a modificar. Después de una lejanía de algunos años hacia la televisión había decidido retomar y hacerlo de verdad con ese aliento de los 30’s.

Tú que me conoces recordarás que en mí la idea de ser madre de una sola niña era más que suficiente.

Siempre me he sentido responsable e insegura de ese rol, el de ser mamá; quizá el más difícil de todos.

El de guiar, colaborar en la formación de ese ser sin que eso se convierta en una transfusión de conductas y carácter. Tú sabes a lo que me refiero, yo ya cargo bastante con mis miedos e inseguridades, lidio y trato mis carencias y por fortuna este querer ponerme en los zapatos, en la piel, en el alma de otr@s me ha ayudado en esa búsqueda. La pandemia me devolvió a casa física y emocionalmente, me obligó a mirar más adentro y eso que ya venía haciéndolo con responsabilidad. Al principio nos llegó el covid a casa y Lucas y yo lo tuvimos, por suerte nos pasó como una gripa que te tumba días en cama pero no fue más allá. Nada de fiebre ni problemas para respirar. Esos tengo ahora con la presión de Candela en mi diafragma.

Al parecer no quedaron secuelas y espero que siga así cuando al cabo de unos años sepamos más de este virus que nos llevará en sus páginas a través de la historia.

Durante el covid y después me descuidé con mi bioritmo, (los métodos de planificación los saque hace algunos años por cuestiones hormonales), años de tenerlo controlado y funcionar maravillosamente, pero estando en casa deje de contar las lunas y allí estaba, una nueva semilla en mi vientre.

Esta vez sí puedo decir que no se me pasó por la cabeza abortar como hace una década, así fuese inesperado es una situación muy diferente. Ésta vez no sentía los mismos miedos. Ésta vez no tenía miedo de contárselo a mis padres, o pensar si sería mío o mía solamente, o si contaría con el apoyo de alguien; esta vez ya tenía un techo con un jardín de flores olorosas para que esta nueva vida tomara el sol por las mañanas. Una nueva vida es ver con optimismo el futuro».

Marzo 12 de 1981: Aniversario de Francy

Hoy apaga las velitas La voz popular de América que les canta a los despechados, que son más que los enamorados.

Francia Elena Hernández Ríos, Francy, viene de familia de artistas: su papá es compositor y cantante, y de él heredó ese talento. A los 7 años su mamá escuchó que estaban haciendo un concurso en una emisora y la inscribió. Fueron, ganó el concurso y desde ahí sus padres empezaron a ver las ganas que tenía de ser cantante y su talento, así que estudió vocalización corporal, se preparó, tuvo un gran maestro en casa, su papá, José Antonio Hernández, que además es el creador de varias de sus canciones. Su mamá le ayudaba con la parte estética, la postura y demás: «Siempre estuvo al pendiente para hacerme lucir bella en cualquier escenario».

Empezó su sueño en la música a los 13 años, cuando le tocó compartir tarima en el municipio de Yumbo con el Rey del despecho, Darío Gómez: «Tuve la oportunidad de conocerlo cuando él estaba por abrir una disquera y me dijo que quería que yo fuera parte de ella, cuando tenía trece años grabamos nuestro primer trabajo discográfico. Le agradezco mucho por el apoyo y por la amistad tan bonita que tenemos, todos sus consejos me sirvieron muchísimo, es un gran ejemplo a seguir».

Aunque nació en Guacarí, un lindo pueblo del Valle, la salsa no la sedujo tanto como lo hizo la música popular. Sin importarle que en su momento solo era escuchada por los despechados, decidió apostarle a este género y jamás se ha arrepentido de esta decisión: «Creo que todas las personas, por muy bien que estén, tarde o temprano pasan por una situación de despecho, por eso mismo se logran conectar con este tipo de letras».

Sus referentes favoritas han sido Rocío Durcal y Ana Gabriel, con quien ya ha tenido la dicha de compartir escenario. Con sus canciones, varias de ellas con más de 20 millones de vistas en YouTube, ha grabado en sus 28 años de carrera, siete discos. En febrero lanzó su última producción, Pacto de caricias.

La pandemia la ha afectado como a todos:

«Pienso que la rama artística es una de las más afectadas, y además de las últimas que volverá a la normalidad. Me he visto muy afectada porque tenía muchísimos conciertos, estaba en un gran festival en Aruba, también en Ecuador, Chile, y todo está aplazado. Estábamos muy ilusionados, sobre todo porque mucho público nos estaba esperando, la boletería estaba agotada. Me dio mucho pesar porque iba a visitar varios países que no conozco, pero será en otra oportunidad. A veces quedo impactada viendo la cantidad de gente que sale a la calle como si nada estuviera pasando, y no es momento para estar afuera sin necesidad, debemos estar en nuestra casa, que es nuestro mejor refugio. Si nos cuidamos, pronto volveremos a la normalidad».

Marzo 12 de 1998: Muere Pedro Salcedo

Murió en Bogotá el maestro Pedro Salcedo. Nació en Corozal, la tierra del mote’e queso, de los diabolines, del corozo, del pastel de arroz y de las calles de piedra, en 1912 en una familia numerosa. Era el tercero de ocho hermanos, ya fallecidos.

Precoz director, a los ocho años fundó una banda infantil que interpretaba porros, cumbias y gaitas con unos instrumentos (pitos) que él  mismo fabricaba con el fututo de la hoja del árbol de papayo y de maguey. Tiempo después aprendió teoría, armonía y arreglo musical. A los 10 años hace su primera canción, un porro que titula Emilita, dedicada a una paisana de 8 años. Aprende a interpretar el Saxofón y el Clarinete, su instrumento preferido, que tocaba tan bien como los mejores de la época; y el bombardino lo ejecutaba con maestría.

Siendo muy joven, ejecutando trompeta y bombardino integra la banda musical de Corozal. Entre los 15 y los 20 años crea orquestas que amenizaban las fiestas de los pueblos aledaños y la zona del caribe. En 1935 se casa con Isabel María Benavides, que siempre fue su apoyo y a quien le dedicó dos canciones: un vals que tituló Isabel María, y el Bolero Tengo fe en ti, que posteriormente hará parte del Álbum Carolina Sabino, Las Juanas.

En la década de los 40, en la plenitud de su máxima inspiración, compone los porros, cumbias, gaitas, fandangos y mapalés que más éxito han tenido, tanto nacional como internacionalmente: Corozal y Sincelejo, Sabor de Cumbia (hoy La Medallita, con una nueva letra del maestro Calixto Ochoa), Ayapel, Carmen Helena, y la cumbia instrumental Takasaluma, que sirvió de base para la melodía y el arreglo irrepetible que él le hiciera a la famosa cumbia La Pollera Colorá, que fue  grabada con su agrupación musical, Pedro Salcedo y su Orquesta.

En 1955 viaja con su familia a Barrancabermeja buscando nuevos horizontes para su esposa y sus 10 hijos, que heredaron su talento artístico; En la ciudad petrolera crea una orquesta que tocaba en los Clubes Sociales y también en las festividades y carnavales que se celebraban en el país, alternando con las mejores agrupaciones musicales nacionales e internacionales.

En su larga trayectoria artística, compuso más de 500 obras musicales, y como reconocimiento a su extensa obra musical, que lo acredita como uno de los grandes compositores de Colombia, se hizo merecedor de varios homenajes y distinciones:

En 1998 la Editora Fondo Musical Ltda le da un Disco de platino con la leyenda: «Al maestro Pedro Antonio Salcedo Ortega por las ventas en Colombia del Álbum Carolina Sabino, Las Juanas, que incluye sus temas. En 1975 La Gobernación de Sucre le confiere La Orden de la Corraleja, por su Aporte a la Música Nacional.

En 1992 SAYCO, conjuntamente con CBS le hace un emotivo y gran homenaje donde le entregan una placa Como Reconocimiento por su Labor artística y valioso aporte musical al Folclor costeño. En el 2002 la Fundación para el Desarrollo de Corozal le entrega una placa que dice: «Rinde Tributo a la Memoria de PEDRO SALCEDO ORTEGA, Gloria de la Música», y la Casa de la Cultura de Corozal lleva su nombre.

Marzo 12 del 2007: Muere Octavio Mesa

Muere el Rey de la guasca, el Rey de la Parranda, el Arriero Mayor.

Decía: «Vea, doctor, yo no sé por qué la gente dice que mi música es vulgar, si yo en mis canciones lo único que digo es hp y malparido, ¿Y así no hablamos los antioqueños, pues?».

Octavio Mesa, el más grande compositor de la música guasca, que fue la inspiración de Juanes en algunos de sus éxitos como La Camisa Negra y La paga, nunca se consideró grosero. Es más, ni siquiera en sus últimas horas llegó a creer que sus más de 2.000 canciones que compuso en 50 años de carrera artística tenían algo de vulgar. Por el contrario.

Aunque no fue el iniciador de la música parrandera, desde mediados de los 50 comenzó con este estilo, y de ahí en adelante descubrió un nicho en la música guasca y lo siguió. No fue el iniciador, pero sí el rey de las canciones de doble sentido.

Sus canciones traducen el lenguaje callejero logrando poner a bailar mientras se cantan sus palabras de, debemos decirlo, alto calibre. Intentaba expresar con franqueza y jovialidad el sentir campesino con canciones caracterizadas por la malicia en el juego del lenguaje y su doble sentido, pero también en líneas directas, sin maquillaje y sin ningún pudor.

A los ocho años empezó a cantar en las escuelas y ganó dos concursos escolares. A los quince escribió su primera canción inspirada en un amigo que le quitó la novia. La tituló Mi rival, y fue en 1948.

Fue chofer de buses y camiones, trabajó como amansador de yeguas, recolector de café, y le gustaba el aguardiente. También tuvo su época de arriero. Aprendió el vocabulario de los arrieros que con machete, carriel, sombrero aguadeño y ruana, conducían la recua de mulas cargada de alimentos, correspondencia o algún encargo. Tuvo días de glorias y desventuras en la música.

Terminó sus días viviendo en arriendo con tres de sus nueve hijos en una casa del nororiente de Medellín y dependiendo de una pensión de 750 mil pesos que le daba Sayco.

«Vendió toneladas de discos, claro que han sido más los que le han pirateado. Si las casas disqueras hubieran sido honradas con él hubiera sido millonario. Ganaba más con sus presentaciones en los pueblos que con sus discos. Pero hay que agradecerle a Sayco que le pagó la salud, a Juanes por su ayuda, y a todo su público que lo hizo vivir muy bueno», dijo su hijo.

No alcanzó a ver hecho realidad el que llamaba El último álbum, ni a alabar las 13 canciones que harían parte del disco: «Yo lo llamaba y le cantaba las canciones del disco. Las nuevas, las viejas. Me decía que cuándo salía. Tratamos de hacer lo posible porque saliera antes, pero con estas cosas nunca se sabe», dijo Juanes, quien en el 2006 había fundado su sello 4 Jotas y quería que el primer disco de la marca fuera uno de Octavio Mesa. El disco nunca fue publicado.

Marzo 12 del 2018: Muere Jorge Luis Hortúa

A los 51 años, uno de los representantes más reconocidos de nuestra música popular, terminó perdiendo la batalla contra el cáncer.

Jorge Luis Hortúa nació en Tuluá y dedicó 29 años de su corta vida a su carrera artística. Su niñez la pasó entre cafetales, donde comienzan a florecer sus dotes musicales interpretando canciones de Olimpo Cárdenas y Antonio Aguilar, las que cantaba a cambio de un canasto de café que le regalaban sus compañeros recolectores por escucharlo.

Su adolescencia la vivió en Roldanillo, en donde hizo la primaria. Cuando tenía 14 años sus padres se separaron y se trasladan a Cali, donde conoció al señor Marino Rojas, músico y cantante con quien empezó a buscar en la música otra forma de ingresos. Empezaron buscando Fuentes de soda, cantinas y bares en donde los dejaran cantar; casi siempre regalaban la primera canción, y la mesa que quisiera que cantaran otra vez les debían pagar $500 por canción; en ese ir y venir se les presentó la oportunidad de cantar en un centro artístico, de ahí en adelante comenzaron a devengar un sueldo fijo.

Empezó como músico de otros cantantes, hasta que tuvo la oportunidad de mostrar su talento con canciones de José Miguel Class, un conocido cantante portorriqueño de la época, y  para sorpresa suya, el público enloqueció y pedían a gritos otra; por esta razón su patrón lo convirtió en uno de sus cantantes de planta, y a partir de ese momento su sobrenombre fue El José Miguel Class Colombiano, seudónimo con el que trabajó durante dos años.

En 1991 grabó su primera producción, Se pierde o se gana, que se convirtió en un éxito nacional; fue número uno por varias semanas en las estaciones radiales de todo el país. Para su cuarta producción decide sacar su propio sello PRODUCCIONES JOVEN donde salieron otros de sus éxitos.

En el 2000 decide retirarse de la música después de haber logrado conquistar los corazones de millones de colombianos. Fue el primer adiós de uno de los más grandes del momento de la música popular. En el 2007 decide retomar el camino que había dejado, y qué mejor forma de reaparecer en las tarimas que en un superconcierto con los grandes de la canción popular Darío Gómez, Yolanda del Río, Alicia Juárez y Luis Alberto Posada.

Después de siete años de ausencia, a petición de sus seguidores, regresó con una excelente producción que continuó hasta poco antes de su muerte. En febrero del 2018 agradeció, en un video que publicó en su cuenta de Instagram, a todos sus amigos de los medios de comunicación, colegas, y seguidores, por el gran cariño que le habían brindado en los 29 años de exitosa carrera artística, en los que llevó su música a todo Colombia y el exterior; informó que debido a un proceso quirúrgico y posterior tratamiento, en el cual por instrucción médica debe guardar reposo, se retirará temporalmente del medio artístico, «Durante el tiempo que Dios tenga conveniente para mi recuperación, y así poder cantarle nuevamente a mi querido público, con el mismo amor de siempre. Espero seguir contando con el apoyo de todos, y que mi nueva canción Para mis hijos, continué dejando una linda enseñanza, en todos los que la escuchen en cada rincón del país y el mundo entero. Y  como dice la canción, deseo que no olviden a Dios, luchen con amor y tendrán ganancias, madrúguenle al sol por ese gran sueño con decisión y ganas. Papito Dios los continúe bendiciendo».

Marzo 11 de 1907: Nace José María Peñaranda

Nace un mán 100% barranquillero, José María Peñaranda, compositor de música popular costeña, cumbia, porros, merengues y otros aires. De humilde origen, empezó trabajando en diversos oficios: albañil, plomero, electricista, pero ya entonces cantaba con guitarra o tiple. Nació y creció en Barranquilla, pero fue en Aracataca donde conoció a Francisco el hombre, que lo inició en el arte del acordeón, y lo animó a hacer carrera musical. Entonces se puso a estudiar música y a escribir canciones, logrando muy pronto uno de los éxitos de la música costeña colombiana.

Un día de 1940, le llamó la atención una noticia aparecida en el periódico El Heraldo, según la cual una señora denunciaba que su hijo se había convertido en caimán gracias al poder de un hechizo guajiro. Según el relato, el joven pescador había conseguido una pócima para esos fines, con el objeto de poder ver con tranquilidad a las mujeres que se bañaban en el río Magdalena. Esa fue la semilla de su tema más famoso. El Hombre Caimán, la célebre canción que habla de un caimán que se va para Barranquilla y que luego sería mundialmente conocida como Se va el caimán, la grabó en 1941, y pocos años después ya era un éxito en toda América Latina. El reptil llegó a tener doble sentido político. Pocos años después ya había sido prohibida en España, pues la censura supuso que el caimán era Franco, y Franco no se iba para ningún lado. Hoy, el tema ha sido traducido a siete idiomas y ha tenido los más inverosímiles intérpretes, como Plácido Domingo, y formó parte del repertorio de la Orquesta Sinfónica de Londres. Cuando se le peguntaba por la razón de su éxito, respondía: «Lo que pasa es que su sabrosura es universal». Era tan famosa la canción, que cuando el arquero Efraín Sánchez debutó con el San Lorenzo de Almagro en 1948, se le llamaba con cariño El Caimán Sánchez, para exaltar su tierra de origen.

José María Peñaranda siguió componiendo temas folklóricos que se hicieron rápidamente populares; nunca tan famosos como el del caimán, pero a veces mejores. Escribió más de mil canciones desde que empezó a cantar acompañado de guitarra, dulzaina y posteriormente con el acordeón. Con tanta admiración que le profesaba al Caribe en general, no resulta extraño que hubiera compuesto Santa Marta tiene tren, que también pertenece a nuestro folclor, con el estilo típico de música de letra sencilla que se dio el gusto de componer, y que aumentó la admiración por el tal vez más grande cantautor de la música tropical que ha dado el país.

El maestro era además un insigne humorista, como se deduce de varias canciones grabadas en vivo. En los años cuarenta ya había pegado más de dos docenas, era muy famoso a pesar de que un alto número de sus creaciones eran de doble sentido. Fue el primer creador de la canción picaresca en una época en que existía una moral puritana, y muchos escritores considerados importantes se negaron a escribir sobre su obra pensando que sus versos eran vulgares o hasta inmorales. Poco faltó para ser excomulgado, teniendo en cuenta el veto a que fue sometido. Le significó encabezar en Colombia la lista de autores prohibidos, y parte de su música, sus composiciones y grabaciones, fueron vetadas, por lo que alguna circularía en forma clandestina. Esto incidió para que viajara por  Centroamérica, el Caribe y los Estados Unidos, donde su música era muy apreciada, donde se hizo famoso por este estilo, y cobró estatus de leyenda.

En 1960 ya era un músico andariego que se paseaba por Puerto Rico, México, Miami y Nueva York con honores. Si hubiera nacido en otro país, con la obra que desarrolló, era para que hubiera vivido tranquilamente con las regalías de sus canciones, y tendría más de un monumento en su ciudad natal. El «pollo Barranquillero» tenía veinticinco años cuando fue escogido como el artista extranjero más popular de la Habana. En Cuba no falta nada, compuesta a inicios de los sesentas, es una crítica al sistema de gobierno de Cuba, en un hecho sin precedentes en un país donde los artistas se abstienen de opinar sobre temas políticos, y optan por dedicarse a lo suyo para evitar que puedan verse afectarlos en lo que hacen.

Cuentan que cuando pasaba de los setenta años era normal verlo caminar por el Paseo Bolívar, y localizarlo jugando billar, una de sus grandes pasiones, en compañía de sus amigos. Se fue cercano a cumplir los cien años de sabrosura, pero lo llevamos en nuestros corazones.

Marzo 11 de 1920: Muere Julio Garavito

Murió en Bogotá un símbolo de la ciencia y de la ingeniería colombiana, el primer matemático formado y graduado en Colombia, y el primer físico y astrónomo digno de ese nombre en el país. El hombre que un 24 de abril de 1901 observó un cometa con un simple teodolito, y tal observación le sirvió de base para iniciar una serie de trabajos sobre mecánica celeste. En 1970 por propuesta del Observatorio Astronómico de Bogotá, la Unión Astronómica Internacional le asignó su nombre a un cráter de la Luna de 80 kilómetros de ancho en la cara oculta.

Los correos de Colombia le rindieron un homenaje especial mediante la impresión y circulación de una estampilla de cuatro centavos en 1949, el Banco de la República en 1996 puso en circulación el billete de $20.000 en el que aparece su rostro, y ha sido situado al mismo nivel de otros dos importantes científicos neogranadinos del siglo XIX, José Celestino Mutis y Francisco José de Caldas.

Julio Garavito Armero nació en Bogotá en 1865 en una típica y respetable familia santafereña cuando Colombia era parte de la Federación Granadina y el Presidente era Manuel Murillo Toro. A los diez años entró al Colegio de San Bartolomé donde empezó a mostrar su inclinación y vocación por las ciencias matemáticas y astronómicas. Se graduó como bachiller en Filosofía y Letras en 1884. Al año siguiente, cuando estalló la revolución que dio fin a la Federación Granadina y abrió paso a la República de Colombia, ingresó a la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional, y en 1891 se graduó como ingeniero. Inmediatamente fue nombrado profesor de cálculo infinitesimal, mecánica racional y, posteriormente, de astronomía, cátedras que conservó hasta su muerte.

Cuentan que ya desde su época de estudiante de la Facultad impartía cátedra a sus compañeros, a quienes ampliaba las explicaciones recibidas en las clases y expresaba sus propios criterios. Don Julio, como lo llamaban, «Era un excelente profesor, gran expositor, con estilos propios y originales, que hacía gala de ello en sus demostraciones y soluciones llevadas al tablero en sus sesiones de clase». En el campo de la pedagogía mostró además ideas novedosas sobre psicología infantil y los métodos lógicos y naturales para una enseñanza objetiva.

Contribuyó a la reorganización de la Facultad de Ingeniería, y en la toma de importantes decisiones relacionadas con el Observatorio Astronómico, del que fue Director desde 1892, año siguiente a su graduación, y durante cerca de 27 años, durante los cuales adelantó sus trabajos más sobresalientes.

Fue impulsor de la Oficina de Longitudes, que a partir de 1902 elaboró la carta geográfica del país; fundador de la Sociedad Geográfica de Colombia en 1903, y en 1916 fue nombrado Presidente en propiedad de la Sociedad Colombiana de Ingenieros. En el acceso a la Sede hay un busto en bronce con su imagen.

Marzo 11 de 1940: Nace Alberto Cortéz

Nació en La Pampa como José Alberto García Gallo el poeta que le cantó a las cosas simples y cotidianas, compositor de la canción que hizo famosa Piero, Los Americanos. El intérprete de temas inolvidables como Cuando un amigo se va. Durante una larga carrera artística obtuvo cuatro discos de oro y un premio Grammy a la Excelencia Musical en el 2007.

Desde muy chico Alberto Cortéz fue un apasionado de la música. A los seis años aprendió a tocar el piano. Estudió música en el Conservatorio Chopin en Mendoza, en donde completó sus estudios de teoría, solfeo y piano, y a los 12 compuso su primer tema. A los dieciocho se traslada a Buenos Aires para estudiar en la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales.

Canta con su guitarra en las boites con lo que se ayuda económicamente para pagar sus estudios, que posteriormente abandonó. A los veinte, en su afán de aprender de los grandes maestros de la música popular viaja a Europa, donde comienza verdaderamente su carrera artística. Se embarcó en el Provence como parte de un grupo llamado Argentine  National Ballet & Show con destino a Génova. De ahí viajan a Bélgica, donde a los 21 grabó su primer disco, a los que siguen un gran número de actuaciones en diferentes países europeos.

En Bélgica conoció a Renée Govaert. Eterno enamorado de su compañera, sus canciones no solo estaban inspiradas en las cosas simples de la vida, sino también en ella. Se conocieron, se casaron y se fueron a vivir a Madrid: «Ella está en todas mis canciones, es la musa que me llevó a vivir todo esto».

A partir de 1.970 su intensa y fecunda labor creativa en Europa da sus frutos de popularidad en Hispanoamérica y comienza sus giras por el continente, las cuales siguieron año tras año con un éxito artístico cada vez mayor. Los principales teatros fueron todos testigos de su enorme talento. En 1996 durante una temporada de verano en Mar del Plata sufrió un ACV. Las secuelas lo alejaron de su guitarra pero no de la música. Y siguió siempre sobre el escenario a pesar de sus problemas de salud.

En el 2006 la Fundación Sophía de Palma de Mallorca le otorga el premio-homenaje Una vida dedicada a la canción, destinado a grandes personalidades del mundo de la filosofía, el arte y las humanidades transformados en modelos de referencia para las nuevas generaciones. Murió en Madrid en el 2019; la tristeza fue enorme, como cuando un amigo se va, pero la sutil magia de sus canciones nos dejó un auténtico ejemplo dentro de la música del mundo hispano, un genuino maestro que ocupará siempre un lugar de privilegio que sólo los grandes creadores tienen en el espíritu de un público fiel al buen hacer.

Marzo 11 de 1955: Muere Alexander Fleming

Muere el científico escocés cuyo descubrimiento significó un cambio drástico para la medicina moderna iniciando la llamada Era de los antibióticos.

En su discurso de aceptación del Nobel de Medicina en 1945, (premio que compartió con Howard Florey y Ernst Boris Chain, que fueron en gran parte responsables de transformar la penicilina en un antibiótico al descubrir un método de depuración que permitía su síntesis y distribución comercial), dio un aviso profético: advirtió que demasiado uso de la penicilina podría llevar a la resistencia bacteriana, tal y como está ocurriendo hoy en día con el abuso de los antibióticos.

Alexander Fleming, el que se convertiría en el padre de la penicilina, tras completar su educación escolar trabajó durante cuatro años en una compañía naviera hasta que, en 1901, a los 20 años, heredó una pequeña suma de dinero de su tío John Fleming. Fue su hermano Thomas, con quien vivía y que por entonces ya era médico, el que lo convenció de que cursara la misma carrera que él.

En 1906 Alexander se graduó en medicina y cirugía. Durante la Primera Guerra Mundial sirvió en el Cuerpo Médico del Ejercito Real en Francia, y a su regreso obtuvo el puesto de profesor de Bacteriología en la Universidad de Londres.

En 1922 descubrió la lisozima, una enzima bactericida que impide las infecciones y que se halla presente en numerosas sustancias segregadas por los seres vivos, como las lágrimas, la saliva o las secreciones nasales, y que actúa como una barrera contra las infecciones. El hallazgo fue muy importante ya que demostraba la posibilidad de que existieran sustancias que, siendo inofensivas para las células del organismo, resultaban letales para las bacterias.

Sobre su famoso descubrimiento dijo: «A veces uno encuentra lo que no está buscando. Cuando me desperté justo después del amanecer desde luego no planeaba revolucionar todos los medicamentos al descubrir el primer antibiótico del mundo, o el asesino de bacterias. Pero supongo que eso fue exactamente lo que hice».

El descubrimiento de la penicilina en 1928  es el caso de descubrimiento accidental más importante de la historia. Todo ocurrió cuando se fue de vacaciones, y gracias a su costumbre de mantener su laboratorio en desorden, dejó en un rincón una placa de cultivo bacteriano donde por casualidad creció un hongo. A su regreso ¡eureka!, se topó con el hallazgo científico del siglo. No patentó nunca su descubrimiento pues pensó que facilitaría la difusión de un producto necesario para el tratamiento de las numerosas infecciones que castigaban a la población.

En 1944 fue nombrado Sir por el rey Jorge VI, y en 1951 fue nombrado rector de la Universidad de Edimburgo y llevado a hombros tras la ceremonia de nombramiento. Murió víctima de un ataque cardíaco, fue enterrado como héroe nacional, y un cráter lunar lleva su nombre.

Marzo 11 de 1969: Nace Soraya

Hoy recordamos a una querida cantante estadounidense de origen colombiano en el aniversario de su nacimiento. Soraya nació en Nueva Jersey de padres colombianos; aprendió a tocar la guitarra a los 5 años y el violín clásico a los 9. Estudió literatura y filosofía, y trabajó como azafata durante tres años.

Su carrera despegó cuando una canción de su primer álbum, En Esta Noche, ocupó el primer lugar en las listas Billboard de la Canción Latina Pop en 1996. El éxito fue inmediato en Latinoamérica y en el mercado hispano en los Estados Unidos, y luego de componer la banda sonora para una serie internacional de televisión, le siguieron ventas de cientos de miles de CD’s en países lejanos como Alemania y Australia. Una estrella había nacido, y su potencial era ilimitado. Su inconfundible voz y el poder de las melodías le significaron invitaciones a una gira internacional con Sting.

En el 2000, dos semanas antes de iniciar una gira para promocionar su tercera producción, Cuerpo y Alma, a sus 31 años sufrió un duro revés: le diagnosticaron cáncer de mama, una enfermedad que le había costado la vida a su madre, a su tía y a su abuela. Luego de librar una dura batalla de tres años regresó en el 2003 con Soraya, un nuevo disco con 11 canciones en español y una en inglés. El tema Casi, fue definido por ella como «El canto del triunfo de la vida. Habla de ese instante en que casi te rindes y te entregas, pero al fin tocas tierra nuevamente y recuperas tu estabilidad». La Fundación Susan G. Komen para el Cáncer de Mama la eligió como su vocera latina, y Soraya hizo incansables giras por Estados Unidos, Centro y Sudamérica, generando una importante actividad a nivel de los medios en lo relacionado con la toma de conciencia sobre la enfermedad.

Ganadora de un Grammy Latino al Mejor Álbum de Cantautor en el 2004, tenía solo 37 años cuando nos dejó. Poco antes de su muerte, en su sitio oficial publicó una sentida carta, como despidiéndose de sus seguidores, donde habla de la recaída de su enfermedad: «Mi historia física puede llegar a su fin, pero estoy segura que la que existe en el corazón de ustedes seguirá presente por la eternidad. Confío en que mi existencia dejará huella en la vida de ustedes beneficiando en un futuro a muchas mujeres y que la luz de mi vida iluminará la de muchas familias más. Casi se me acaba la fe. Casi se me escapa el amor. Casi se me quiebra la inocencia, se me agota toda la fuerza para luchar un día más. Casi me rendí, pero hoy no pierdo esta batalla porque sé que lo que he luchado no es en vano, si no que ayudará a vencer una batalla mayor, la de la detección temprana y prevención de este terrible mal. Ahora les toca a ustedes seguir con nuestra misión. Deseo de corazón contagiarles mi amor a la vida y que seas tú un canal que lleve a mucha gente este mensaje que puede salvarles la vida. Te pido comprendas la oportunidad que tienes ahora de prevenir un enemigo que puede acabar con tu vida. ¡No se dejen vencer!, hay mucho camino que recorrer y esta lucha vale la pena».

Soraya perdió la batalla contra ese terrible mal, pero dejó un gran legado musical y humano.

Marzo 11 del 2019: Muere Gloria Zea

Murió la directora histórica del Museo de Arte Moderno, la mujer que además gestionó la restauración de iglesias en Boyacá y estuvo dentro de las personas que apoyaron las inspecciones arqueológicas que permitieron descubrir Ciudad Perdida, en la Sierra Nevada. Gloria Zea, una institución de la gestión cultural en Colombia. Como su padre fue varias veces ministro y embajador, fue una niña privilegiada. Conoció el mundo en su juventud y creció en una familia que era un punto de encuentro de los poderosos del país.

En 1955 estudiaba Arte en Estados Unidos, pero en una visita a Colombia coincidió con el expresidente Alberto Lleras en su casa, que era rector de la Universidad de los Andes. La convenció de regresar a estudiar en esa alma mater. Precisamente allí, en una clase de pintura, conoció a Fernando Botero. Se casó con el Maestro contra la voluntad de sus padres. Sus amigas decían: «Ay, pobrecita Gloria, cómo se casó de mal, ¡con un pintor!» y una de sus tías le dijo: «¿Pintor? ¿De brocha gorda, mijita?». Sin embargo, el amor pesó mucho más. Se separaron pero se mantuvo en Nueva York. Y para no alejar a sus hijos del pintor. Y allá coincidió dos años después con el empresario Andrés Uribe Campuzano, contemporáneo y amigo de su padre.

Se casó contra los deseos de él con el hombre que describía como el «más maravilloso, generoso y noble que conocí», y con quien compartía un profundo amor por la poesía. Vivió con lujos en la Gran Manzana, estableció contactos con importantes entes del arte, y luego regresó a Colombia.

En 1969, recién aterrizada, su amiga Marta Traba, que había sido su profesora en los años cincuenta, la llevó a almorzar al hotel Continental y le dijo que asumiría como directora del Museo de Arte Moderno: «Tienes que hacer el museo que yo no pude hacer». El MAMBO resultó otro reto que asumió, y pasó de ser, cuentan sus allegados, una dama admirada por su belleza a ser una respetada figura en el mundo del arte.

Febrero del 2016 fue un momento difícil para ella, cuando luego de más de 40 años al frente del Museo tomó la decisión de dejar el cargo de directora: «Han sido días de una lloradera permanente. He recibido muchas llamadas, las más bellas que te puedas imaginar, de gente dándome las gracias». Su familia, especialmente sus hijos, le dieron un ultimátum: «Me pusieron un revólver en la cabeza y me dijeron: no más, mamá, hasta acá llegaste. Te estás matando. Entonces, tomé la decisión de retirarme». Pero lograr que este huracán se detuviera era imposible. Para ella, su decisión no fue su jubilación. Salió del MAMBO, pero nunca dejó de vivir de cerca el arte, y se dedicó por completo la Ópera de Colombia.

Era amiga de todos los artistas importantes de Colombia. Todos, absolutamente todos. Se consideraba una mujer privilegiada porque había tenido la oportunidad de trabajar con «Todo lo que hace la vida bella, la música, el arte, la literatura, el rescate del patrimonio cultural, el folclor y la música del país».

Esa mujer a la que Álvaro Castaño le puso el apodo de Los guaduales por esa facilidad que tenía para llorar, y que según ella fue una bendición porque le permitió expresar lo que sentía, aseguraba que no lloraba en los momentos difíciles; la conmovían una película, un libro, un cuadro.

Con su partida, el arte y la música culta del país quedaron huérfanas de una de las impulsoras y batalladoras más importantes. Ese día el MAMBO hizo público su mensaje de condolencias: «El legado de Gloria Zea se mantendrá vivo en la memoria de los colombianos gracias a su aporte invaluable al arte y a la cultura en el país. Su llegada al museo de Arte Moderno, en 1969, marcó un hito en el desarrollo social y cultural de la capital colombiana, con la construcción no solo del edificio que hoy es nuestra sede sino de una marca y un referente dinamizador para el arte en la ciudad y del país».

Marzo 10 de 1916: Nace Gilberto Rojas Enríquez

Nace en Oruro el compositor de la que es sin duda una de las más bellas canciones de las más de 400 que dejó como legado, Ojos azules. Un notable compositor que dejó su legado en composiciones musicales para Bolivia y el mundo. Uno de los grandes creadores que dio Bolivia el siglo pasado. Gilberto Rojas Enríquez dedicó una pieza a cada departamento de su país.

Desde niño mostró un alto grado de precocidad; a los 3 años recibió su primer instrumento: el charango, con el que llamó la atención de sus familiares y marcó el inicio de su talento creador. En su temprana edad seguía atentamente las lecciones de piano que le daba su madre, y luego se entretenía durante largas horas en lograr acordes, mostrando una sorprendente memoria para repetir cualquier pieza musical. Sus padres optaron por registrarlo en el Conservatorio Nacional de Música para perfeccionarse con clases de piano, y su notorio interés por la música determinó que ingresara a una Academia en la capital argentina.

En sus hazañas patrióticas se encuentra el haber asistido a la Guerra del Chaco; a los 16 años fue incorporado al Regimiento de Infantería. Tuvo que lidiar con los sinsabores de la guerra, altas temperaturas, ausencia de agua, suelo desértico, hambre, disparos de morteros, insomnio y enfermedades. Sufrió la picadura del mosquito transmisor del paludismo, fue evacuado, internado, y la intervención oportuna del director del sanatorio le salvó la vida.

Combatiente con méritos, fue declarado benemérito de la patria y condecorado con La Cruz de Bronce. De regreso a La Paz se incorporó de nuevo a sus estudios, finalizándolos en 1936 cuando se graduó en humanidades. Por entonces ya trabajaba como pianista en varias emisoras de radio de La Paz acompañando a cantantes, y empezaron a surgir sus primeras composiciones. Conforme pasaron los años se dedicó íntegramente a difundir su obra musical, como miembro de distintos grupos. Trabajó paralelamente como profesor de música en colegios y Universidades, fue Jefe de la Sección Folklórica del departamento de música del Ministerio de Educación, y llegó a ingresar a la Sociedad Argentina de autores y compositores.

En 1956 recibió la más alta condecoración que otorga el Gobierno de Bolivia, la Orden del Cóndor de los Andes en el grado de Caballero: «Consubstanciado con el hombre boliviano y sus costumbres, impresionado por el paisaje de este mosaico que se sintetiza desde los Andes imponentes pasando por los apacibles valles, hasta fértiles llanos y lujuriosas selvas; conmovido por sentimientos simples unas veces y otras, profundos, Gilberto Rojas, asimiló todo esto y con inspiración genuina supo traducirlas en canciones. Debemos a Gilberto Rojas haber introducido su música alegre y emotiva en los salones de nuestra sociedad, música netamente boliviana».

El 10 de marzo de 1983 celebró su 67 cumpleaños, pero once días después murió.

Marzo 10 de 1940: Nace Chuck Norris

Nace en Oklahoma el héroe que lo derrotó todo, la estrella que decidió dejar su carrera para cuidar a su esposa enferma. Según explicó en una entrevista, había sido envenenada durante una resonancia magnética: «Antes del examen le aplicaron una inyección de gadolinium, un contrastante muy tóxico que le dañó el sistema nervioso y renal. Siente el cuerpo ardiendo, y debe estar en reposo varios meses».

Ídolo de varias generaciones y rescatado con ironía por la generación del milenio, el mítico actor a lo largo de su carrera se enfrentó a los soviéticos, al Viet Cong, a la mafia, a los nazis, a la corrupción policial, a los asesinos en serie, a los mercenarios, a los terroristas de distintas nacionalidades y a todos los criminales que se atrevieron a poner un pie en Texas. Pero desde el 2013 sólo tuvo un enemigo: el gadolinium.

Y como el amor es capaz de cualquier cosa, incluso de frenar la carrera al hombre que derribó un avión alemán apuntándolo con el dedo y diciendo: «Bang, anunció el fin de una carrera cinematográfica que comenzó hace más de cuatro décadas: «Dejo todo. De ahora en adelante no haré más que mantener viva a Gena. Quiero que siga en el mundo, junto a mí y a nuestros hijos. Mi amor por ella es más fuerte que mi carrera, el dinero, cualquier otra cosa. Está enferma, sufre, y yo seré su custodio y su consuelo». Además de esta labor, creó una fundación de artes marciales para niños y adolescentes, llamada Kickstar Kids.

En su primera vida se llamaba Carlos Ray Norris, y era un dedicado jefe de familia que cuidó a su madre y hermanos, hasta que se sintió involucrado en la ola de patriotismo que Ronald Reagan impulsó en la década de 1980. Después de los hippies y el liderazgo pacifista de Jimmy Carter en los 70, surgieron en millones de hogares estadounidenses los temores de que era posible una invasión soviética en el estrecho de Bering. Era el momento de que los héroes dieran un paso adelante y él, capaz de enfrentarse a un ejército de comunistas, dió ese paso y se unió a la Armada para defender a su país en la guerra de Corea, donde descubrió el arte que cambiaría su vida, el tangsudo. De allí regresó con el apodo de Chuck, y creó unos pantalones, los Chuck Norris Action Pants, que, vistos hoy, parecen simples jeans elásticos sin mucho estilo; pero quién se atrevería a discutir sobre moda con el hombre que le enseñó los rudimentos del taekwondo a estrellas como Steve McQueen, Michael Landon y Priscilla Presley?

Tenía un cuerpo para el arte marcial, pero no cabeza para los negocios; la red de gimnasios que había fundado en Los Ángeles estaba al borde de la bancarrota cuando uno de sus estudiantes, Steve McQueen le dijo la frase que cambiaría su destino: «Si no puedes hacer otra cosa en la vida, siempre puedes actuar». Steve McQueen tuvo grandes ideas en su vida, y una de esas fue recomendarle a su profesor de artes marciales, a ese tipo llamado Chuck Norris, que se dedicara a la interpretación. Porque ese pelirrojo con el ceño fruncido estaba destinado a ganarse los corazones de los fanáticos del cine de acción. Gracias a un puñado de personajes memorables su nombre quedó grabado con letras de oro. El segundo empujón se lo dió  otra luminaria de la época, el mítico Bruce Lee cuando le ofreció el papel de antagonista en El vuelo del dragón. La pelea sigue en el altar de los fanáticos del género.

Sus ideas políticas y sus intenciones patrióticas de los últimos tiempos no atrajeron mucho a los críticos. Fue nombrado por un influyente sitio web como el peor actor de los últimos 25 años. Pero, ¿qué importa lo que digan los críticos si eres un exponente de la lucha contra el comunismo dentro y fuera de la pantalla?. Y más aún, si no te limitas a luchar contra el comunismo sino que también te opones directamente a cualquier indicio de progresismo?

Marzo 10 de 1879: Aniversario del Dr. Wu Lien

Hoy se celebra el 142 cumpleaños del epidemiólogo chino-malasio Dr. Wu Lien-teh, padre de la salud pública china, que salvó a la población de la peste neumónica de 1911 con algunas de las mismas medidas que hoy sirven para combatir el Covid-19. Inventó además una cubierta quirúrgica para el rostro que es considerada la precursora de la máscara N95, y bueno, pues hay que compartirlo con el mundo.

Nació en una familia de inmigrantes chinos en Penang, la actual Malasia, en 1879. A los 17 años fue admitido en la Universidad de Cambridge, donde completó sus estudios de medicina dos años antes que sus 135 colegas, y se convirtió en el primer estudiante de ascendencia china en obtener un doctorado en ese plantel. Con una nueva beca terminaría haciendo un curso de posgrado sobre malaria en Liverpool y otro sobre bacteriología en el Instituto Pasteur en París. Después de sus estudios de doctorado aceptó un puesto como subdirector de la Facultad de Medicina del Ejército Imperial de China en 1908.

En el otoño de 1910 estalló una epidemia mortal de una enfermedad en el noreste de China que había acabado con una cuarta parte de la población europea en el siglo XIV. En cuatro meses se extendió a cinco provincias matando a más de 60.000 personas. El gobierno chino lo encargó de investigar la enfermedad, que identificó como la más importante peste neumónica contagiosa que se transmite de persona a persona a través de la transmisión respiratoria. Para combatir la enfermedad diseñó y fabricó una mascarilla quirúrgica especial con algodón y gasa, agregando varias capas de tela para filtrar las inhalaciones. Aconsejó a la gente que usara su máscara recién inventada y trabajó con funcionarios del gobierno para establecer estaciones de cuarentena y hospitales, restringir los viajes y aplicar técnicas de esterilización progresiva; su liderazgo contribuyó en gran medida al final de la pandemia, conocida como la plaga de Manchuria, en 1911, cuatro meses después de recibir la tarea de controlar su propagación.

En 1915 fundó la Asociación Médica China, la organización médica no gubernamental más grande y antigua del país. También dedicó gran parte de su tiempo y esfuerzo a la creación de hospitales, centros de investigación y escuelas de medicina. En 1935 fue el primer malayo, y la primera persona de ascendencia china, nominado al Premio Nobel de Medicina. Un devoto defensor y practicante del avance médico, sus esfuerzos no solo cambiaron la salud pública en China, sino la del mundo entero. Muró en 1960.

Marzo 8 de 1944: Nace Jimmy Salcedo

En los años setenta la televisión estaba por inventarse en Colombia y un muchacho nacido en la remota y húmeda Mompox, procedente de Barranquilla llegó a la capital del país con una fórmula que lo convertiría en una leyenda del espectáculo: mezclar música y humor.

Jaime Alberto Salcedo Tafache, Jimmy, nació en 1944, y se había trasladado a Barranquilla cuando era un adolescente porque Mompox se le estaba quedando pequeño. Su gran talento para la música empezó a hacer bulla en bares barranquilleros, en los que mezclaba sus interpretaciones en el piano, que tocaba con una sola mano, con chistes y apuntes que lo empezaron a hacer famoso.

El momposino llegó a Bogotá a los veinte años empecinado en ser músico. Tenía un afro imperial y un raro talento para tocar las congas. Golpeaba las congas en La Gaité, un desenguayabadero de artistas ubicado en la calle 20 con carrera 9ª. Le pagaban unos 18 pesos de la época, muy poco, porque el salario mínimo era más o menos de 600 pesos. Pero todo era por encontrar un lugar en el mundo. Fue el cantante de Cartago Billy Pontoni quien le descubre y le pide que lo acompañe con su piano en los diferentes Night Club de la ciudad. Como pianista se une pronto a la que sería su primera experiencia en una banda musical, Los Be-Bops. Un empresario cazatalentos viendo que el muchacho era talentoso le dijo que se fuera de gira por Europa. La Federación de cafeteros la patrocinó, pero eso sí, solamente había pasajes de ida para todos los integrantes. Allá debía ganar lo suficiente como para comprar el tiquete de regreso. Y la gira duró 2 años: viajaron por todo el Viejo Continente ganando dinero. Cuando regresó al país conformó la Onda Tres. La rumba era descontrolada, la bohemia no fue clausurada por cuenta de las nuevas responsabilidades, pero La Onda Tres empezó a ser contratada para eventos.

Jimmy en medio de su desorden tenía su método y fue escalando. Su vocación histriónica le dio la oportunidad de entrar de lleno a la televisión, trabajó con varias programadoras, y a mediados de los setenta creó su propia empresa: DO RE Creativa, con la que se planteó tres retos: hacer una tribuna que les hiciera un poco más fácil el camino de la fama a los artistas que como él alguna vez tuvieron que mendigar, impulsar la mezcla de humor y música en la televisión, y convertir sus emisiones en la plataforma que acercara al famoso con el pueblo.

Produjo espacios musicales y periodísticos en los que aprovechaba al máximo a sus invitados, con diálogos, anécdotas, y una buena dosis de humor. Quizá la palabra que más utilizó fue chévere. Para él todo era chévere, cuando estaba de buen genio. Porque cuentan que podía ser humillante en ocasiones. Durante una audición le dijo a un guitarrista: Diga peras. Peras, respondió el muchacho. Bien, ahora diga aguacates. Aguacates, contestó el sorprendido músico. Apréndase esos nombres porque ese es su futuro: vender en una plaza de mercado. Lo que a él más le molestaba sin embargo era que la gente le escondiera las cosas: «No me hable como Cantinflas». La gran creación de su vida no fue una canción sino un Show, el que llevaba su nombre, y que todos recordamos. Pero todo se truncó después de esa rumba prenoche de las brujas del 89. Murió tres años después. Eso de descansar en paz no fue tan sencillo de lograr. Fueron tres años en estado vegetativo. Édgard Hozzman, su compañero de trabajo por mucho tiempo comentaba: «La última etapa de su existencia fue épica, triste para quienes lo acompañamos y fuimos testigos de su ausencia en vida de la razón e inspiración que animó su paso por esta dimensión. A pesar de que se ha dicho que era un tipo muy jodido por su temperamento, él siempre fue un tipo abierto, la gente no lo conocía, lo juzgó mal. Jimmy vivió intensamente, libre de prejuicios, consciente de su roll y compromiso con su generación. En el acto de la escena de su existencia fue el protagonista de su historia, intensa romántica, épica y trágica».

Inolvidable Jimmy. Su talento fue indiscutible. Nos alegró a millones de colombianos que seguíamos su programa, por el que ganó los Premios India Catalina en 1988 y en 1990.

Marzo 9 de 1993: Nace Éider Arévalo

Nació en Bogotá una institución en una de las pruebas más exigentes del atletismo, la marcha olímpica.

Para conocer su historia tenemos que ir a Pitalito, Huila, donde doña Jenny Truque lo crió y le daba permiso para que después de estudiar pudiera entrenar para competir en los intercolegiados del municipio.

El tiempo pasó y su pasión por el atletismo creció. A los 14 años volvió a Bogotá para buscar oportunidades que lo vincularan de lleno al deporte; ahí fue donde conoció a Fernando Rozo, entrenador, mentor y compañero de carrera que le enseñó todo.

Éider Arévalo es uno de esos deportistas que ha luchado por sus sueños desde que tiene memoria. Su entrega lo llevó a ganar la medalla de oro en la Copa Mundo en Chihuahua en el 2010. Ocupó el puesto 20 en la marcha de los Juegos Olímpicos de Londres del 2012, y llegó 15 en Río 2016. Esa fue una competencia difícil para él; esperaba estar entre los 5 primeros, pero tuvo inconvenientes de salud. Se sintió frustrado por tanto trabajo que no dió los resultados que esperaba, pero no se desanimó. Se concentró en su preparación para el 2017 pensando en mejorar en cada entrenamiento. Las ganas eran todas, lo que siempre soñaba era llegar a la meta con la bandera de Colombia. Usó una técnica que le aconsejó su sicóloga y que sólo sabían ellos dos: se repetía continuamente la frase: voy a ser el Rey de Inglaterra. Y en ese 2017 llegó el gran premio a su esfuerzo cuando en el Campeonato Mundial de Atletismo logró el oro en los 20 km de marcha.

Al inicio de su carrera empezó haciendo todas las modalidades. Luego de un año, viendo a algunos de sus compañeros hacer marcha atlética, y escuchando los relatos sobre sus experiencias, se animó a ir a un evento. Ahí tomo la decisión; y su profesor viendo que tenía talento lo animó a especializarse.

Practicó los 20 y los 50 km. pero se quedó en los 20. Sobre el dolor físico que siente cuando está en el límite al que tiene que enfrentarse dice: «Uno entrena mucho el umbral, pero en competencia se llega a sentir un dolor que va desde la punta del pie hasta la cabeza, muchas veces insoportable; pero ahí es donde aparece la parte mental, el resultado del entrenamiento sicológico. El que más logre soportarlo es el que logra llegar en primera posición». Grande!

Marzo 9 del 2010: Muere Teresa Gutiérrez

Muere una de las pioneras de la televisión y la radio en Colombia, 75 años de carrera, La dama del velo negro. Cuando llegó a la pantalla chica ya traía un largo recorrido por la radio y era conocido su talento, pues a los seis años hizo sus primeros pinitos en la serie radial El doctor X.

Un poco más grandecita, a los 14, empezó a trabajar con su papá en la emisora Nueva Granada en Bogotá. Quienes la conocieron saben que desde ese momento Teresa Gutiérrez supo que lo suyo serían los medios y que su paso por allí no sería momentáneo. El reto no fue fácil, pero la rebeldía y el coraje venían desde niña con ella, y tuvo el valor de dejar sus estudios para incursionar en un mundo que en aquella época era dominado por hombres.

No todo para aquella joven rebelde era trabajo. Cuando tenía 17 años llegó su primera ilusión amorosa. Enamorada, intentó formar el hogar perfecto con el que soñó desde niña, pero las cosas no siempre salen bien y el destino la llevó, dos años después, a dar por terminada la relación con el cantante Alberto Granados. Once años después, el violinista argentino Américo Bellotto Varoni llegó a su vida y entre tangos y milongas le robó el corazón, a tal punto que decidió abandonar Colombia con sus dos hijos e iniciar de cero en el país gaucho. Para aquella época Teresa tenía 31 años y una carrera que comenzaba a dar frutos, pero el amor era tal que nada importó. Pero las cosas no siempre son como se desean y la muerte del artista, luego de 12 años de matrimonio, dio fin a lo que fue «la mejor segunda oportunidad de Teresa Gutiérrez», según su hija. Recuerda que nunca vio derramar una lágrima a su madre por el fallecimiento de su padre. Según ella, «A veces no entendíamos cómo podía ser tan dura, era algo difícil de comprender». Desde entonces, Teresa nunca volvió a organizar su vida en pareja y se entregó por completo a sus hijos y a su trabajo.

El cariño y profunda admiración hacia Teresita, como le decían sus buenos amigos, no llegó solo. Su constancia, talento y su fuerte temperamento, la convirtieron en una mujer única dentro de su medio.

«Ella puso a más de un director en su sitio y ha demostrado que las «estrellas» están en el cielo y las buenas actrices están en el set», recordaba Manuel Busquets al referirse a su buena amiga y compañera de trabajo. Para Manuel Pachón, su compañero por cerca de 65 años en la actuación «Ella tuvo los pantalones de ganarle el partido a la vida y conseguir, a punta de berraquera, lo que se propuso»

Por seis décadas esta mujer se fue ganando los corazones y el respeto, no solo de quienes trabajaron con ella sino del público en general. «Sin buscarlo», decía su hija, porque si algo la caracterizaba es lo poco que le preocupaba lo que el mundo podría pensar de ella (…) claro está que siempre agradeció y la emocionó cuando escuchaba las manifestaciones de cariño».

Siempre recordada por su actuación en La abuela, la perversa abuela que dominaba a todos en una casa. ¡Grandísima!

Marzo 8 de 1957: Muere Emilio Sierra

Que vivan los novios, viva la alegría,

Que yo me iré ahora, con la negra mía,

Pues con mi negrita, yo seré feliz,

Allá en la casita donde me espera tu porvenir.

El Maestro Emilio Sierra, fue, es y seguirá siendo un importante  músico y compositor fusagasugueño. Es considerado como uno de los íconos del municipio.

Nació en 1891, y desde muy pequeño empezó a mostrar sus aptitudes musicales. Precoz intérprete del piano, el tiple y la guitarra, por su afición musical fue incluido en los coros de la iglesia de su ciudad natal, llegando a ser director. También dirigió algunos coros parroquiales en zonas vecinas.

En 1938, ya en la capital, logra realizar su sueño dorado: tener una gran orquesta. Y la organiza con la participación de 25 músicos de los mejores que para la época trabajaban en Bogotá. El éxito fue apoteósico, a tal punto que la R.C.A Víctor envió de los Estados Unidos técnicos y equipos para grabarla. Fue ésta la orquesta que grabó la primera versión de El Sanjuanero, de Anselmo Durán.

Gracias a su aporte para llevar el bambuco a un contexto bailable, en 1.940 dio a conocer Que vivan los novios, que para algunos era una rumba criolla y para otros un bambuco fiestero. De todas maneras fue recibida como una verdadera revolución, y como la aparición de una típica expresión folclórica bogotana. Como producto del éxito se inició un programa en Radio Santa Fe, que se emitía los domingos y tuvo como tema central esta pieza musical. El programa duró hasta mediados de los años 60. Así pues, Emilio Sierra partió la historia de la música colombiana en dos al introducir y difundir con su orquesta ese ritmo que dominó en la década de los cuarenta, y que modificó las preferencias de baile en Colombia, reemplazando a los valses, danzas y pasillos, ritmos bailables dominantes de la época. La alegría de la Rumba Criolla se encargó de abrir el camino a la que luego entraría de manera definitiva en el sentimiento bailable nacional: porros, cumbias, vallenatos, gaitas, merecumbés.

Fue el maestro Sierra quien organizó en 1943 el dueto de La Hermanas Díaz, dos jóvenes tolimenses de Icononzo recién llegadas a Bogotá. Acompañó a Matilde con su orquesta en su primera grabación discográfica, que fue un éxito en la época, pocos años antes de que ella iniciara su carrera al estrellato al lado de su gran maestro y esposo, Lucho Bermúdez.

Emilio Sierra fue además compositor de temas de la región Andina y de uno que otro del folclore Caribe. Su obra es una de las más copiosas de nuestra historia musical; abarcó no sólo rumbas criollas y bambucos fiesteros, sino  joropos, congos y boleros, himnos y música religiosa. Compuso la música para el primer largometraje que se filmó en el país, La Maria, de Jorge Isaacs, y como si fuera poco, fundó en 1.940 a Sayco, de la que fue su primer presidente. Se radicó al final de sus días en el Valle del Cauca, dedicado a la docencia, y murió en Cali.

Marzo 8 de 1983: Muere Chabuca Granda

Muere una Diosa de la música criolla. María Isabel Granda Larco, Isabela, Chabela, Chabuca. Hablar de Chabuca Granda es mencionar a la crema y nata de la música peruana, la cumbre máxima, su representante con palabras mayores. En el mosaico Perú es una de sus piezas más grandes

De cuna aristocrática, miembro de la alta sociedad limeña, nació en 1920 en un asentamiento minero  a 4.800 metros sobre el nivel del mar, en la Sierra, donde su padre era ingeniero. Fue la segunda hija de un gran amor de años entre Eduardo e Isabel, quienes decidieron trabajar y vivir más cerca del cielo. En ese escenario dieron vida a la peruana del siglo XX, a la mejor de las poetas de ese país, admiradora de los Beatles, Milanés, estudiosa e impulsora de la música negra.

Su aporte a la literatura, música y cultura es inconmensurable. Su origen andino y criollo dio por zanjada ridículas distinciones entre peruanos. Andina y costeña, le rindió con su obra constante homenaje a la peruanidad. Contaba siempre que su infancia estuvo marcada por la diversidad y por el amor a la tierra. Sus padres la vestían con los trajes de los andes y nunca tuvieron que imponérselo, orgullosa de su origen.

A los doce años descubrió su vocación musical; comenzó a cantar, y su registro soprano le permitió integrar el coro del colegio, y fue escogida vicepresidenta de la Asociación de Canto.

En su corta vida se dio tiempo también para ser esposa y madre. En medio de una sociedad machista se casó, tuvo tres hijos y se separó, lo que supuso un no pequeño escándalo en la sociedad de la época. Ese mismo año inició su carrera en solitario. Cuando le preguntaban por esta época siempre la eludía diciendo que lo mejor que le dejaron esos años de matrimonio fueron sus hijos.

Muy moderna para los tradicionalistas y anticuada para los de vanguardia, su propuesta era sin duda subversiva. Una vez al escuchar a Pablo Milanés dijo que eso era lo que siempre quiso hacer: canciones en las que la voz cambie de melodía entre estrofa y estrofa. Es esa característica la que hace que sus canciones suenan incluso ahora, modernas. No es trova, ni folclore, lo suyo es celebración y vanguardia. Su voz ronca le cantó a la costa, a la sierra y a la selva peruana. También la belleza de la mujer negra peruana. En su lírica enamorada siempre está la esencia peruana.

La Flor de la Canela se convirtió en su obra máxima, y la lanzó al estrellato nacional, cuando se grabó en 1953. Pero la historia de este himno representativo de la música peruana tiene su orígene en 1948 cuando fue compuesto en homenaje a Victoria Angulo, distinguida señora de raza negra. Fina Estampa la compuso dedicada a su padre, quien fuera, en palabras de ella misma «un hombre a carta cabal», y al que consideraba su mejor y más grande amigo.

En 1956 viajó a Estados Unidos para ser operada de la garganta, y esto dejó secuelas en su voz volviéndola más grave. Sin embargo, definió su cantar peculiar, el que le dió una personalidad artística inconfundible. Dejó de existir estando en Miami, de forma sorpresiva debido a una isquemia cardíaca, y cuando se encontraba ocupada en muchos proyectos artísticos.

Chabuca, Chabuca de Lima, Chabuca del Perú no tuvo precursoras, fue pionera, tradición y revolución al mismo tiempo. En el 2017 su obra musical fue declarada Patrimonio Cultural del Perú, y en el  2019 el gobierno de su país le concedió a título póstum la máxima condecoración nacional, la Orden El Sol del Perú. Y como parte de la labor de remodelación del Centro Histórico de Limase se reservó una extensa área para actividades recreativas y culturales que fue bautizada Alameda Chabuca Granda. El reconocimiento del mundo a su obra se vió reflejado dando su nombre un paseo en Buenos Aires y a dos plazas, una en Madrid y otra en Santiago de Chile.

Marzo 8 del 2002: Muere Matilde Díaz

Muere una de las voces de más ricos matices de Colombia. Su nombre está unido a Carmen de Bolívar, Sanfernando, Caprichito, Te busco; composiciones del maestro Lucho Bermúdez con quien peregrinó por Colombia y América difundiendo el bolero, el porro, la cumbia, pasillos y bambucos. Una mujer emancipada, y su vida parece un tema de canción. Ese día se nos fue Matilde Díaz, pero no su voz.

Aura Matilde Díaz Martínez, bautizada Aura por su madre y Matilde como su abuela materna, las reseñas dicen que nació en San Bernardo (Cundinamarca), pero en alguna entrevista ella contó que nació y creció en Icononzo, Tolima, y fue allí donde comenzó su amor por la música conformando un dúo con su hermana Elvira, Las Hermanitas Díaz, que alcanzó notoriedad cuando la familia se trasladó a vivir a Bogotá y lograron presentarse en varios programas musicales y en teatros de la ciudad. El dúo finalizó cuando su hermana Elvira se casa. Sin embargo Matilde continuó cantando como solista.

Se necesitaba un carácter fuerte para ser mujer y convertirse en cantante en un tiempo en el que pertenecer a una orquesta tropical era motivo de escándalo. Pero Matilde Díaz lo decía con voz fuerte y orgullo: «fui la primera». Se ganó su lugar en la Orquesta de Lucho Bermúdez a pulso, cuando su voz se impuso en un concurso de talento con una canción nunca grabada: Veneno de los hombres, en 1944. Es allí donde llama la atención del maestro, que le pide que se una a su orquesta, siendo así la primera mujer en asumir esa posición en el país. No se amilanó ante las habladurías de esa época.

Relataba, como si se tratara de una gran aventura, la inocente estrategia que utilizó: la de hacerse pasar por mexicana. «No lo hacía por falta de amor a Colombia y a su música, sino porque andar de gira en compañía de una orquesta despertaba suspicacias». Y en últimas, fue Matilde Díaz quien abrió caminos a muchas intérpretes que vinieron después. Su voz no solo revolucionó la música colombiana, también le dio una cara nueva a las mujeres del país. La mujer que se iba de gira a cantar con una orquesta cuando el canon mandaba todo lo contrario, fue el ejemplo para que muchas se desempeñaran en carreras artísticas.

Al año siguiente de integrarse a la Orquesta viajaron a Buenos Aires y allí grabaron un disco, iniciando así una sobresaliente carrera internacional que duro dos décadas. Se casa con Lucho Bermúdez. De esa unión, que duró 18 años, nació una de las duplas artísticas más famosas de todos los tiempos en nuestro país, y la que dio a conocer el porro y la cumbia, los pasillos y bambucos, en los demás países de Latinoamérica.

En 1952 viajan a Cuba, se presenta para la radio con Celia Cruz con la Orquesta de Bebo Valdés, y de este viaje nace una indisoluble amistad con la guarachera de Cuba que en ese entonces tenía 25 años. Matilde 28. Se retiró del medio artístico después de su segundo matrimonio con el hijo del expresidente Alberto Lleras Camargo. Pero ya era una leyenda. Al hablar de su retiro afirmaba a veces que prefería la vida tranquila del hogar a la artística, ya que la música colombiana había perdido el apoyo de los medios y de las casas disqueras. En los últimos años conformaba el coro de la iglesia de su barrio y junto a su hija interpretaban música religiosa.

«Matilde Díaz era una mujer otoñal, simpática y agradable tanto en su físico como en su trato. Creo que le hizo falta más reconocimiento. En compañía de Lucho Bermúdez hizo un gran aporte a la música colombiana. El porro, que era un aire desconocido en el país, llegó con ellos a los grandes salones de Bogotá, Ibagué y Cali. Gracias a Lucho y Matilde, la música costeña dejó de ser desconocida. A mí me tocó seguir sus pasos con el vallenato. Guardo un agradecimiento eterno con ella por su hospitalidad y por haberme dado el padrinazgo de su hija Gloria María» (Rafael Escalona).

«Matilde era una auténtica mujer, me gustaba por su seriedad. Uno de sus méritos fue elevar y replantear los aires nacionales del porro, el pasillo y el bolero. Su voz era especial por su melodía, sabor y belleza. Eramos muy amigos y ella siempre se encargó de admirar mi música y mis actuaciones» (Jorge Villamil).

Marzo 7 del 322 a.c: Muere Aristóteles

A lo largo de los siglos han surgido grandes almas que terminaron cambiando el curso de la historia para siempre a través de sus descubrimientos. Algunos dicen que en la Tierra, alguien tan inteligente y brillante como el griego Aristóteles, (que vivió del 384 al 322 a.c.), aún no ha pisado.

Trató en sus obras prácticamente todas las disciplinas científicas y humanísticas. Siempre tuvo ideas interesantes, y siempre se le ocurrió una nueva forma de estudiar el mundo. Anotó todo lo que vio, hizo sus observaciones, y en busca de comprender más sobre el reino animal, comenzó a diseccionarlos, lo que para ese momento era una práctica nueva.

Formó parte de la nobleza al igual que su padre, que era médico en la corte del rey de Macedonia. Sus padres murieron cuando era un niño, por lo que su hermana, junto con su marido, se convirtieron en sus tutores hasta que alcanzó la mayoría de edad. Un día, un joven de 17 años se presentó para inscribirse en la Academia de Platón. Era la imagen perfecta de refinamiento. Su llegada causó sensación entre los estudiantes; era afable, extraño, gracioso, de voz suave, delicado, educado, un modelo de buen comportamiento y elegancia en el vestir. Mostró habilidades intelectuales increíblemente variadas. Parecía casi imposible que un solo espíritu estuviera abierto a tantas facetas del conocimiento.

Fue uno de los mejores estudiantes, y Platón solía llamarlo «la mente de la escuela», decía que su Academia estaba formada por dos partes: el cuerpo de sus estudiantes y el cerebro de Aristóteles. Pero como era de esperarse, el mejor maestro y el alumno extraordinario muchas veces estaban en desacuerdo. Discutían a menudo, pero se adoraban. Aunque Aristóteles reconocía a Platón como un genio, llegó a estar en desacuerdo con una idea fundamental de su filosofía y entonces su pensamiento se distanció.

Platón concibió la existencia de dos mundos: el de los sentidos, concreto y en constante cambio; y el mundo de las ideas, inmutable, al que solo nos es accesible con el intelecto. Correctamente combinados (método dialéctico), deben ser la base del conocimiento científico, y deben permitir explicar el mundo que muestran los sentidos. Para Aristóteles sólo hay un mundo: aquel en el que vivimos. Sólo en él encontramos bases sólidas para emprender investigaciones filosóficas. Es nuestro deslumbramiento con este mundo lo que nos lleva a filosofar, a conocerlo y comprenderlo. No veía ninguna razón para creer en el mundo de las ideas platónicas.

Cuando Platón murió Aristóteles tenía treinta y siete años. Esperaba ser elegido sucesor en la presidencia de la Academia pero fue decepcionado. Los administradores lo rechazaron como extranjero y eligieron al sobrino de Platón. Dejó la Academia después de haber pasado 20 años de su vida allí, y poco después abandonó Atenas. Viajó por la costa de Asia Menor durante unos años, y parte de este período lo pasó en Lesbos, donde contrajo matrimonio con Pitias de Aso, con la que tuvo una hija. En sus últimos años mantuvo una relación con una esclava con la que tuvo un hijo varón.

Regresó a Atenas y estableció su escuela de filosofía que se conoció como el Liceo, donde enseñó hasta un año antes de su muerte. Daba clases científicas por la mañana dirigidas a los estudiantes, quienes debían colaborar en las tareas de búsqueda de información, clasificación y catalogación de documentos, y sobre todo, de animales y plantas, vivos o disecados. Por la tarde daba conferencias públicas sobre temas de interés general.  Alejandro el Grande y otros de sus estudiantes más tarde se convirtieron en reyes. Probablemente la mayor parte de sus obras las escribió allí. El Liceu tenía una colección de manuscritos que fue considerada una de las primeras grandes bibliotecas del mundo. Se cree que redactó unas 200 obras. Sin embargo solo algunas sobrevivieron con el tiempo en forma de notas, manuscritos de diálogos, observaciones científicas, y trabajos de sus alumnos, que fueron utilizados por los eruditos posteriormente.

Preguntado en qué se diferencian los sabios de los ignorantes, respondió: «En lo que los vivos de los muertos». Decía que «El saber, en las prosperidades sirve de adorno, y en las adversidades de refugio. Que «Los padres que instruyen a sus hijos son preferibles a los que solamente los engendran, pues éstos les dan la vida, pero aquellos la vida feliz». A uno que se vangloriaba de ser de una ciudad grande, le dijo: «No conviene atender a eso, sino a si uno es digno de una gran patria». Sobre qué cosa es el amigo, respondió: «Un alma que habita en dos cuerpos». Decía que «Probar no significa tener éxito, pero lo más seguro es que quien lo logró, lo intentó».

Marzo 7 de 1917: Nace Álvaro Dalmar

Nace el compositor de, Mírame, mírame, quiéreme, quiéreme, bésame morenita.Y de, Amor se escribe con llanto, en el diario amargo de mi desencanto

Álvaro Chaparro Bermúdez nació en Bogotá en un exclusivo barrio que ya no lo es tanto, Las Cruces. Por imposición de su padre al país casi se le niega un gran músico. Siguiendo el rumbo esperado de una familia tradicional, aspiraba a que su hijo fuera abogado, en tanto que se preocupaba porque su hija Leonor se cultivara como una mujer de virtudes. Por eso recibía clases de bandola con un maestro particular en cuyas clases el joven tenía prohibido estar. Pero él decidió contra cualquier amenaza del papá entreabrir la puerta de clases y memorizar a escondidas cada movimiento y lección del maestro.

Tuvo un primer grupo llamado Los Cuatro Diablos, con el que se hizo conocer en Bogotá como el mejor mandolista. Fue contratado por una popular estación de radio para actuar una vez a la semana. Se convirtió en una sensación instantánea y comenzó a escribir música. Escribió una canción a la semana mientras estaba en la emisora, en unos dos años había compuesto cerca de 150s. Estuvo en la agrupación hasta que a los 17 años se fue a Nueva York para estudiar en la prestigiosa Academia Julliard; Allí tuvo entre sus maestros a Andrés Segovia.

En la Gran Manzana también cambió su nombre; como los norteamericanos no podían pronunciar su apellido Chaparro, decidió combinar palabras hasta que halló Dalmar, y lo adoptó como su nombre artístico. También fue un trotamundos, viajó por España, Francia, Italia y pasó por la India. A pesar de esto, siempre estuvo ligado al país por su música y su cultura, y nunca dejó de ser el típico santafereño de humor fino, buen conversador, educado, galante y bondadoso, según lo recuerdan quienes lo conocieron.

Sus primeros trabajos se basaron en la composición clásica para guitarra. Su gran sueño era ser un gran concertista de guitarra clásica, pero un accidente cerrando la puerta de un taxi afectó uno de los dedos de su mano y le impidió desarrollar esa carrera. Pese a esa frustración se consolidó como músico durante esos años en Nueva York. Fue allí donde fundó el Trío Dalmar, con el que creó una propuesta que influiría el panorama de la música latinoamericana, el formato de trío para interpretar boleros. El Trío estuvo conformado además por dos músicos cubanos.

Luego de presentarse en diversos sitios nocturnos de NewYork un sello discográfico le propuso grabar un disco de boleros en 1956. Tuvo tanta popularidad que una emisora hizo un concurso con los oyentes para que escogieran el mejor trío entre ellos y Los Panchos, y el público eligió al trío de Álvaro. Fue en ese tiempo contratado por Colombia Pictures para interpretar la música de 3 series. También conoció a Carlos Julio Ramírez y compuso su primer éxito mundial, Besame Morenita. Carlos Julio fue el primero en grabar sus composiciones, pero además las grabaron otras grandes voces. Contaba que Bésame morenita nació porque muy joven se enamoró, pero fue rechazado por la familia de ella por ser músico, y compuso esta canción con su fino humor. También recordaba que Amor se escribe con llanto le surgió porque en algún lugar leyó que Amor se escribe con h. Él pensó que era mejor con llanto. Estas dos canciones han tenido más de 60 versiones, incluso en otros idiomas.

En un concurso organizado por RCN y la Alcaldía de Bogotá para escoger la mejor canción romántica colombiana, el público eligió a Amor se escribe con llanto.

Regresó al país a comienzos de la década de 1980 para quedarse definitivamente. Y uno de los más grandes y prolíficos músicos y compositores colombianos del siglo XX, murió 1999 dejando al país miles de composiciones, muchas vigentes aún a más de 20 años de su partida. Y aún lo extrañamos.

Se cuentan más de 2.000 canciones compuestas en diversos géneros como suites, himnos, misas, oratorios, sonatas, preludios, danzas, boleros, guabinas, valses, pasillos y bambucos. Berenice Forero su esposa lo definía como: «Un hombre humanitario, que ayudaba a los demás, una persona muy agradable, de un extraordinario humor».

Marzo 7 de 1926: Nace Jaime Molina

Nació en Patillal, un amigo incondicional de Rafael Escalona. Fueron dos amigos que se quisieron con el alma. Tanto que a su muerte le compuso la Elegia a Jaime Molina, haciendo posible que naciera una canción insignia de la música vallenata:

Recuerdo que Jaime Molina cuando estaba borracho ponía esta condición.

Que, si yo moría primero me hacía un retrato o, si él se moría primero le sacaba un son.

Ahora prefiero esta condición, que él me hiciera el retrato y no sacarle el son.

Jaime Molina puso su marca en territorio vallenato, y se distinguió por sus caricaturas y pinturas. La mayoría de su tiempo se la pasaba ensimismado en sus lienzos y pinceles, y pintaba al pueblo, a personajes, a los amigos, y a las cosas cotidianas, mientras que caricaturizaba a los políticos de la región.

Fue un pintor contador de historias que hizo posible que sus trabajos hoy hagan parte del inventario de la cultura vallenata. Además, tenía un humor inteligente. Según la ex ministra de Cultura Consuelo Araújo, fue: «Un hombre introvertido tímido y talentoso. Maestro de la ironía y la mordacidad, que de cuanta cosa ocurría pintaba un cuadro para ridiculizar la situación y a sus protagonistas».

Entre las anécdotas que se cuentan de sus primeros años está la ocasión en que le pidió a su profesor que le permitiera asomarse a la ventana para dibujar en un tablero la procesión que estaba pasando. Tal fue la precisión, que el maestro decidió darle vuelta al tablero para conservar el dibujo.

Murió en 1978 y sus amigos decían: «Cada año que va pasando notamos más y más su ausencia; no podría ser de otra manera, porque en él pudimos ver la valía de un personaje artístico que recompensaba con su originalidad el afecto de sus coterráneos. Nada ni nadie podrá desbaratar la obra de tan dilecto personaje por cuanto los dotes de inteligencia, capacidad creativa y personalidad, eran innatas, producto de un medio en el cual un hombre de esta clase no se da con frecuencia».

«Quienes lo conocimos, compartiendo con él su imaginativa creación, no podemos menos que decir que su muerte truncó la entereza de un pueblo que en Jaime Molina tenía el crítico acervo, como quiera que sus caricaturas exponía su inspiración profunda definiendo hechos recientes o pasados con la más audaz pluma». «Pintor por vocación, sin conocer ciudades ni vivir la bohemia civilizada, no puede explicarse uno cómo este genio ocupó tanta preferencia en el campo de la inteligencia, llegando a la conclusión de que fue un caso único en un hombre cuyas virtudes son iguales a las de él mismo».

Entre los dibujos que más se destacan de Jaime Molina están el logo que hizo para la Fundación Festival de la Leyenda Vallenata y el Escudo de Valledupar. El auditorio Jaime Molina Maestre de la Escuela de Bellas Artes de Valledupar fue nombrado en su honor, y en el 2099 el Vigésimo Festival Tierra de Compositores, versión Rey de Reyes de Patillal estuvo dedicado en su honor.

Marzo 7 de 1931: Nace Graciela Arango de Tobón

Nació en Ovejas, Sucre, una de las compositoras más importantes y polifacéticas de Colombia. Su producción como compositora es extensa y comprende una gran variedad de géneros musicales, desde los de su tierra costeña natal hasta los aires andinos. Graciela Arango de Tobón no tenía dificultad alguna para pasar del bolero a la cumbia, y del pasillo al currulao.

Ejemplos de sus famosas canciones son Señor, inmortalizada por Helenita Vargas; Don Goyo, conocida como Ese muerto no lo cargo yo, llevada al disco por Los Graduados y por el Gran Combo de Puerto Rico. Y, por supuesto, no hay quien no haya bailado en diciembre clásicos como Por las buenas o Me voy pa’Macondo. Esa facilidad para componer todo tipo de ritmos le mereció un gran reconocimiento a esta artista nacida en Ovejas pero considerada como una caleña adoptiva.

De niña se trasladó con su familia a Cartagena, para ser enviada luego a Medellín a estudiar en el Colegio. Allí aprendió a tocar piano y guitarra, y después tiple y acordeón. Se casó a los 18 años y se fue a vivir a Cali donde brotó su vena de compositora. Descubrió su talante por casualidad en 1965, cuando Phillips, a través de una radiodifusora, convocó a un concurso nacional.

Ya casada con Hernán Tobón Pizarro, envió Tus trenzas, una de sus primeras inspiraciones, y que a la postre le mereció su primer reconocimiento nacional, cuando los organizadores anunciaron que ella había sido la ganadora del máximo trofeo del concurso, la Orquídea de plata.

Más de 300 de sus temas han sido grabados por diferentes artistas. Sus letras se constituyeron en la materia prima de figuras nacionales como Helenita Vargas, Claudia de Colombia, Lida Zamora, Oscar Golden. Sus composiciones traspasaron también las fronteras nacionales con intérpretes como María Dolores Pradera, y su obra también llegó a México, Chile, Perú, República Dominicana.

Como compositora fue la primera colombiana en llevar una pieza ganadora al Festival de Viña del Mar en 1973, y tres años después recibió el premio como Compositora de las Américas, certamen en el que compitió con los maestros Jorge Villamil y Arnulfo Briceño. En 1982 fue distinguida como la mejor compositora en el Festival Mono Núñez, y ese mismo año Sayco le otorgó la Lira de Oro como la compositora más prolífica y polifacética del país.

Graciela Arango de Tobón se caracterizó no sólo por sus virtudes artísticas, sino también por su especial vocación de ayuda al artista nacional. Recuerdo que por varios años tuvo una sección en El Espectador, donde enseñaba a tocar canciones populares en guitarra.

Marzo 6 de 1927: Nace “Gabo”

Cuando sus padres, Gabriel Eligio García y Luisa Santiaga Márquez, se enamoraron, el padre de ella se opuso a la relación, pues Gabriel Eligio, que había llegado a Aracataca como telegrafista, no era el hombre que consideraba más adecuado para su hija, por ser hijo de madre soltera, pertenecer al Partido Conservador, y ser un mujeriego confeso.​ Con la intención de separarlos, Luisa fue enviada fuera de la ciudad, pero Gabriel Eligio la cortejó con serenatas de violín, poemas de amor, innumerables cartas y mensajes telegráficos. Finalmente, la familia capituló, y Luisa consiguió el permiso para casarse. Y el que se convertiría en un genio de la literatura universal, Gabriel José de la Concordia García Márquez, tuvo un hogar donde nacer en Aracataca. Poco después de su nacimiento su padre se convirtió en farmacéutico, y se trasladó a Sucre dejándolo al cuidado de sus abuelos maternos. Durante su niñez, cuando visitaba a sus padres, conoció en un baile de estudiantes a Mercedes Barcha, también hija de un boticario. Decidió enseguida que tenía que casarse con ella cuando terminara sus estudios, y le propuesto matrimonio desde sus trece años.

Tenía 8 años cuando su abuelo murió, y debido a la ceguera de su abuela se fue a vivir con sus padres. Poco después de llegar a Sucre fue mandado a un internado en Barranquilla, donde adquirió reputación de chico tímido, que escribía poemas humorísticos y dibujaba tiras cómicas. Desde pequeño le gustaba escribir, creaba cuentos y pequeños artículos para publicarlos en revistas juveniles. Cuando todavía no cumplía 15 años ya daba indicios claros de que sería un magnífico escritor. Un Gabo de corta edad y estudiante a quien impactaban emocionalmente la belleza, el amor y la muerte, había comenzado a componer hermosos poemas que más tarde en medio del boom de las grandes obras terminaron refundidos.

Serio y poco dado a las actividades atléticas, fue apodado El Viejo por sus compañeros de clase. Gabito, como lo llamaban sus familiares y amigos, comenzó a estudiar la carrera de derecho en Bogotá, presionado por sus padres. La verdad es que no le gustaba demasiado, y empezó a publicar sus primeros cuentos en el periódico El espectador. Tras la ola de violencia a raíz del bogotazo en 1948, se trasladó a la universidad de Cartagena y empezó a trabajar como reportero en el periódico El Universal. En 1950 desistió de convertirse en abogado y se centró en el periodismo. Se trasladó a Barranquilla y empezó a trabajar como columnista y reportero en El Heraldo.

En 1954 convencido por su amigo Álvaro Mutis, regresa a Bogotá para trabajar en El espectador como reportero y crítico de cine. Desarrolló un interés particular por la televisión y el cine. A lo largo de su vida participó como guionista, mecenas, y permitió la adaptación de su obra a las pantallas. Mientras trabaja en el periódico, publica su primera novela, La Hojarasca, y un extenso reportaje por entregas, Relatos de un náufrago, que fue censurado por el gobierno del momento. Fue enviado como corresponsal a Europa, donde se quedó recorriendo el continente.

A su vuelta a América en 1958 se casó, y se convirtió en director de la Agencia de noticias Cubana Prensa Latina. Al año siguiente viaja a Nueva York como corresponsal pero pronto renuncia tras tener problemas con el exilio cubano. Se trasladó a México y publica su segunda y tercera novela, El Coronel no tiene quién le escriba y La mala Hora. Durante meses se encerró en su casa de la Ciudad de México para completar Cien años de Soledad, que fue publicada en 1967, aclamada internacionalmente, y vendió millones de copias en todo el mundo.

Durante las siguientes décadas escribió varias novelas más, y volúmenes de cuentos y relatos. En 1970 se trasladó con su familia a Barcelona, donde permanecieron hasta 1975, cuando regresa a México. En 1982 gana el Nobel, y años más tarde publicó El Amor en los tiempos del cólera, inspirada en la historia y tragicomedia de amor de sus padres.

En sus últimos años escribió sus memorias, Vivir para contarla, y dos años después su última novela. Había sido diagnosticado con cáncer linfático a finales de los 90, y tras una recaída, murió en Ciudad de México a los 87 años un genio de la literatura universal que se pasó la infancia escuchando las historias familiares, reminiscencias militares de su abuelo, las historias llenas de fantasía de su abuela, y las aventuras amorosas de sus padres, que lo inspirarían en muchas de sus obras.

Marzo 5 de 1940: Nace Dyango

Nace en Barcelona uno de los cantantes más románticos y destacados, uno de los mejores intérpretes. Uno de los míos de siempre. Todos cantamos sus canciones, y hasta la nueva generación las conoce y las canta.

Latin Grammy 2018 a la Excelencia Musical, a lo largo de su carrera obtuvo más de 50 Discos de Oro y 40 de Platino. José Gómez Romero adoptó el nombre de Dyango tomado del guitarrista de jazz gitano Django Reinhardt. Dicen que canta lento, pero tiene un corazón mágico y es dueño de una refinada voz.

Es padre de cuatro hijos, dos de los cuales son cantantes, Marcos Llunas y Jordi, a pesar de que no quería que siguieran sus pasos. Tuvo un 2020 duro como todos, pero es consciente de que se tiene que cuidar: «Sobre todo cuando uno está en edad justa que te puede tocar la lotería. Estamos cuidándonos con mi mujer, en casa, como debe ser para todo el mundo». Para este año está pensando en dormir de verdad, levantarse lo más tarde posible: «Me encantaría salir a cantar, pero no puedo, y cuando no canto me toca pintar, otra de mis pasiones; hice además streaming».

Más allá del reguetón, del pop, de la bachata, el género romántico no deja de ser tendencia, y él tiene muy claro por qué: «Porque somos muchos los románticos, los que sentimos de esta manera, por eso, cuando uno es así, aparecen las canciones románticas y se quedan para toda la vida».

Es popular en todas las Américas, de arriba a abajo, pero Argentina le abrió las puertas a los 20 años y por eso siempre ha amado ese país; va todos los años, y fue declarado Huésped de Honor de la Ciudad de Buenos Aires en el 2014: «Por su amplio registro, es habitual encontrar en el repertorio de Dyango los mejores boleros, tangos y rancheras, decenas de éxitos propios y hasta piezas líricas. Para esta casa de la Democracia de la Ciudad de Buenos Aires, es un orgullo destacar a Dyango. Es un reconocimiento a una persona que le ha dado su música a muchas mujeres que han suspirado por sus interpretaciones. Lo sentimos como un argentino más», fueron las palabras del entonces vicepresidente. «Vine a esta ciudad cuando poca gente me conocía. Aquí gané mi primer disco de oro. Nunca he dejado de venir porque siempre me trataron con respeto y dulzura», fueron sus palabras de agradecimiento, y agradeció de todo corazón la distinción cantando dos tangos.

En el 2013 se unió a varias personalidades y participó en el Concierto por la Libertad, celebrado con el objetivo de reclamar mediante el lenguaje universal de la música el derecho del pueblo catalán y de todos los pueblos del mundo a poder decidir libre y democráticamente su propio futuro, y prestó su rostro a la campaña de la Assemblea Nacional Catalana. Cuando anunció su participación indignó a muchos sectores del resto de España. Dyango respondió de forma firme que es necesario conseguir la separación de España.

Marzo 5 del 2016: Muere Eliseo Herrera

Se fue el Rey del trabalenguas, un juglar. Eliseo Herrera fue uno de los más grandes artistas que ha dado el Caribe colombiano, uno de los más conocidos de nuestro folclor, uno de los cantantes más versátiles, creativos y prolíficos de Los Corraleros de Majagual.

Nació en la isla de Bocachica, Cartagena. Cuentan que hacia 1961 el jefe de personal del Terminal Marítimo de Cartagena quedó perplejo cuando escuchó la voz de uno de los trabajadores del puerto, un estibador cualquiera, cantando cosas extrañas, algo que él nunca había oído. Una voz fuerte, entonada que decía cosas ininteligibles, como si estuviera cantando en una lengua africana. El dueño de esa voz tenía 37 años, y se asustó cuando el jefe lo llamó por su nombre. Pensó: «Ya está, me van a botar del trabajo». Pero en vez de un regaño se encontró con un abrazo de felicitación. Lo llevó donde el amo y señor de Discos Fuentes, que cuando lo oyó dijo: «Este tipo es un fenómeno», y lo contrató para que cantara con Calixto Ochoa y después con los Corraleros de Majagual. Sus primeras grabaciones rápidamente se convirtieron en éxitos en la radio. «En adelante me desboqué a componer, parecía un loco cantando a toda hora».

En Colombia y en el mundo no ha habido un artista con esa capacidad para cantar trabalenguas y jerigonzas. Fue su mamá la que le enseñó. Se llamaba Eufrosina: «Cuando mi mamá quería hablar con mi padre sin que nadie se enterara de la conversación, usaba su lenguaje enredado, que sólo vine a descifrar varios años después. Por ejemplo: epestapa vipiepejapa sipi epes chipismoposapa». Les suena? :-).

Con el tiempo creó sus propias jeringonzas, y aseguran que nunca  dejó de ser el hombre sencillo pese a que compuso más de un centenar de canciones, su fama traspasó suelos nacionales, y sus temas fueron grabados hasta por el director de orquesta Frank Pourcel. Sus composiciones salían de lo cotidiano: «Le bastaba ver merodeando cualquier animal en una noche de farra para crear un cumbión. Con la milésima parte de las canciones que compuso, cualquier autor de la nueva generación estuviera aspirando a un Grammy o anduviera tapado en dinero», decía Alfredo Gutierrez, quien estuvo con él más de 15 años en Los Corraleros.

Vivía en Cartagena, y si alguien iba a visitarlo no había que rogarle para que le cantara sus pegajosos cantos, que entonaba todo el día en la terraza «para espantar los demonios que casi me llevan dejándome medio cuerpo dormido». Los médicos le dijeron que siguiera cantando, que mientras tuviera voz la aprovechara para descargar las malas energías, y él seguió al pie de la letra las indicaciones. Incluso tuvo la disposición de ir a un estudio de grabación para cantar cuatro canciones que mantenía inéditas. Cuando no estaba cantando se la pasaba descifrando acertijos y resolviendo crucigramas para ejercitar la mente, que seguía lúcida, y recordaba con precisión detalles de su vida, como cuando enamoró a Ana Isabel, la madre de 9 de sus 17 hijos. «Tenían 14 años y todas las tardes nos escapábamos por los alrededores del fuerte de San Fernando a contemplar el mar y a sentarnos en la hierba húmeda». En recuerdo de ese noviazgo juvenil compuso La yerbita. Tenía una pensión de Colpuertos y recibía sus regalías, así que se dió el lujo de ser de los pocos compositores colombianos que pudo vivir de lo que compuso.

Una vez por semana iba a visitar a Romelia, la Cachaca, su otra mujer y madre de sus otros seis hijos. Siempre, desde que la conoció en las playas de Marbella, compartió su vida entre los dos hogares: «Y si un día compraba una nevera para Ana Isabel, al otro día ya Romelia tenía la suya. A ambas les puse tiendas en su casa para mantenerlas ocupadas. Con las regalías ha pasado lo mismo: la mitad se va para una casa y la otra mitad para la otra». Romelia nunca le reclamó nada. Y ese carácter conciliador y festivo lo puso como sello en sus canciones y en su vida. Nunca lo vieron bravo ni peleando con nadie.

 Marzo 4

A mí me encantan las celebraciones que hace Google, y creo que hay que destacar las muchas buenas historias sobre los logros de las mujeres en cualquier campo. Cuando la historia involucra y celebra el nacimiento de dos de ellas, bueno, pues hay que compartirlo con el mundo. No estamos familiarizados con su trabajo ni con su nombre, pero no es demasiado tarde para conocerlas.

1879 Rosa Sevilla

Periodista, educadora y activista, considerada una de las sufragistas más influyentes de la historia de Filipinas, nació en Manila, hija de un sargento del ejército español. Cuando era niña la enviaron a vivir con su tía, una educadora que acogió a patriotas e intelectuales filipinos en su casa. Contaba que a menudo escuchaba a escondidas sus conversaciones sobre la lucha contra el colonialismo, discusiones revolucionarias que ayudaron a moldear sus creencias.

Fue una educadora consumada. Se graduó de maestra superior en la Escuela Normal y con tan solo 21 años fundó el Instituto de Mujeres de Manila, una de las primeras escuelas para mujeres en la historia de Filipinas, y el instituto se convirtió en un semillero de progreso bajo su liderazgo. Luego pasó a ser la primera Decana en una Universidad en su país. También colaboró ​​con notables poetas filipinos que crearon un movimiento buscando que el tagalo se convirtiera en el idioma nacional.

Dejó Manila en 1916 para unirse a las mujeres de todo el país en su lucha por el sufragio, y luego fundó la Liga Nacional de Damas Filipinas para apoyar su causa. Fueron de casa en casa para hablar sobre los derechos de la mujer, lo que resultó en la victoria de las filipinas a la hora de votar y ser elegidas para cargos políticos en un tiempo en que la constitución limitaba el derecho al sufragio a los varones de 21 años con la creencia de que el voto de las mujeres «arruinaría la unidad familiar, dando menos poder al marido o al hombre de la casa en la familia». Incursionó en la literatura como poeta y escritora, difundiéndose más en el campo del periodismo. Murió en 1957.

1932 Miriam Makeba

Esta cantante y activista de derechos civiles sudafricana nació en Johannesburgo. Desafortunadamente, su vida de joven se vio empañada por la tragedia y las dificultades; cuando tenía solo 18 días, su madre fue enviada a prisión y ella la acompañó durante un tiempo. Más tarde vivió con su abuela en Pretoria y se unió a los coros de la iglesia y de la escuela.

En la década de 1950 se trasladó a Sophiatown, donde la música llenaba las calles con big band, jazz africano y cualquier otra cosa que moviera a la gente a cantar. Gracias a su talento musical a finales de la década se había hecho un nombre en todo el país. Actuó con algunas bandas y se embarcó en una carrera como actriz.

En 1959 apareció en un documental que enfureció a las autoridades sudafricanas, y como resultado su pasaporte fue revocado. La llegada del apartheid la llevó a abandonar Sudáfrica, pero encontró el éxito en los Estados Unidos. Ganó un Grammy en 1965 y se unió a Paul Simon en su gira Graceland en la década de 1980.

Usó su nueva fama para llamar la atención sobre el sufrimiento y la opresión de Sudáfrica bajo el apartheid, y continuó haciendo música y luchando por causas humanitarias durante el resto de su vida. Tras su muerte, Nelson Mandela dijo: «Sus melodías inquietantes dieron voz al dolor del exilio y la dislocación que sintió durante 31 largos años. Al mismo tiempo, su música inspiró un poderoso sentido de esperanza en todos nosotros».

Marzo 4 de 1926: Muere Pedro Morales Pino

Muere en Bogotá uno de los artistas más importantes de nuestro país. Músico y pedagogo, compositor, pintor, este cartagüeño de nacimiento fue un gran ejecutante tanto en la bandola como en la guitarra, instrumentos para los que escribió además algunos métodos.

La historia de la música colombiana no registra otra persona que haya divulgado en forma tan amplia nuestra música, en una época marcada por medios de comunicación muy limitados. Su labor permitió dar a conocer por otros territorios el bambuco, los pasillos y la danza. Pedro Morales Pino fue un músico que se consagró íntegramente a su profesión con fe, desinterés y abnegación. Además a él se debe el perfeccionamiento de la bandola; agregó una sexta cuerda con lo cual hizo más completo ese instrumento.

Llevó la música europea a conjuntos típicos, permitiendo que la gente tuviera acceso a ella. Participó en la creación de numerosos tríos y estudiantinas. Su fama como docente también es bastante profusa razón por la que se le reconoce haber formado a la siguiente generación de músicos colombianos.

Sus padres fueron personas muy humildes, y debido a esto tuvo que trabajar desde muy joven, lo que lo relacionó con músicos y trovadores de la calle. Esta proximidad le despertó su talento por la música y el arte en general. Su madre, de origen centroamericano, reconociendo sus aptitudes, le regaló un tiple y un curso de cuerdas y de bandola.

A los 13 años viajó con su familia a Ibagué donde empezó su carrera de dibujante; como se destacó en este campo haciendo retratos de conocidos personajes de la época, consiguió una beca para estudiar en Bogotá en la Academia de Dibujo. Mantuvo a lo largo de su vida su afición, pero su preferencia por la música lo llevó a entraren la Academia Nacional de Música.

Su gran producción musical, que puede llegar al centenar de composiciones, especialmente instrumentales, comenzó por 1890, con intermezzos, valses, danzas, pasillos y bambucos. Desde ese año se entregó de lleno al cultivo de la música típica, y a la tradición oral que existía hasta entonces, le sumó lo más importante para su desarrollo y universalización: la escritura; es decir que a cada ritmo (bambuco, valses, pasillo, danza y contradanza) le marcó su estructura precisa, que, por lo perfecta, fue aceptada por todos los compositores en los años siguientes.

En 1897 crea la Lira colombiana, una agrupación que contó con 16 músicos donde él era primera bandola y director. Con este grupo se dieron a conocer a nivel internacional muchas de las canciones típicas de Colombia. La Lira colombiana tuvo el privilegio de ser el segundo grupo de artistas que se iba de gira por el mundo. Viajó con sus integrantes por las tres Américas. El grupo se fue diezmando poco a poco por diferentes circunstancias hasta que en 1908 se extinguió.

Estando en Guatemala se enamora de la pianista Francisca Llerena con quien se casó en 1.905. Después de vivir un tiempo allí, regresó a Bogotá en 1912 y fundó su segunda Lira Colombiana que tuvo corta duración. En 1916 murió su esposa y decidió regresar a Guatemala en busca de recuerdos de los tiempos vividos allá, y para acercar a sus hijos a la familia de su esposa.

Cuando lograba recuperarse emocionalmente, en 1917 un fuerte terremoto afectó ese país y decidió regresar a Bogotá. Y  creó la tercera etapa de la Lira. En la capital realizó algunas actuaciones y después hizo una gira por Suramérica. De regreso a Bogotá, como su salud se fue deteriorando, dedicó su tiempo a dibujar retratos al crayón, que había sido una de sus primeras actividades. Debido a las dificultades económicas que lo acosaban, tuvo que deshacerse de sus valiosas condecoraciones, recibidas de distintos gobiernos en sus giras internacionales. Finalmente, gravemente enfermo, fue internado por sus hijos en el Hospital San José, donde dos de sus buenos amigos lo encontraron y lo instalaron en un centro de mejores condiciones. Lamentablemente tres días después murió, rodeado de sus hijos y un puñado de fieles amigos. Un año antes de su muerte había ganado el Concurso Nacional de Música.

Tengo que reconocer que de sus composiciones la única que recuerdo es Cuatro preguntas.

Marzo 4 de 1968: Aniversario de Jorge Celedón

Sí. Hoy apaga las velitas! Cuando en 1981 Daniel Celedón Orsini invitó a su sobrino Jorgito Celedón Guerra, que en ese momento tenía menos de 13 años, para que cantara la primera estrofa de la canción Drama Provinciano, tuvo el pálpito de estar ante un excelente cantante de nuestro folclor. En 1996 se vinculó a El Binomio de Oro, y en la considerada Universidad del Vallenato grabó grandes éxitos.

En el 2000 llegó el momento de iniciar su vida artística como solista, y comenzó su proyecto con el acordeonero Jimmy Zambrano, con el que grabó varios discos, todos repletos de obras clásicas, 18 en compañía de la Orquesta Sinfónica de Bogotá. Jorge y Jimmy se separan de manera cordial en el 2013, y comienza su camino con Cesar Tavo García, con quien se consolidó cada día más, cumpliendo además el sueño de grabar con artistas internacionales como Marco Antonio Solís, Óscar De León, Franco De Vita, Totó La Momposina, Andrés Cepeda, Gilberto Santarrosa, Víctor Manuelle. Pasaron semanas consecutivas ocupando el primer lugar en las principales estaciones radiales del país y no sólo.

A Jorge Celedón, un artista con 4 décadas de trayectoria artística, lo describen como un hombre sencillo, noble, con carisma. Proviene de una dinastía musical de Villanueva, La Guajira, Colombia. En sus comienzos compitió como compositor y cantante en la categoría de canción inédita en distintos festivales vallenatos que se organizaban en la región Caribe. Como amante del buen vallenato se interesó por rescatar los ritmos olvidados del folclor, como el merengue y la puya; es así como sus mejores éxitos están enmarcadas en estos aires, y ha demostrado con su perseverancia que están vigentes y aportan su riqueza musical al folclor. Su esfuerzo ha servido de ejemplo para que otras agrupaciones vallenatas recojan su legado.

Su espíritu solidario y corazón filantrópico lo condujeron a crear en el 2004, en Bogotá, la Fundación Ay hombe, y la Fundación Saludemosmientras en su natal Guajira, a través de las cuales ayuda a niños de escasos recursos económicos. Shakira lo llamó para que integrara la Fundación Alas que busca eliminar la pobreza, el trabajo infantil y el analfabetismo en América Latina. Se vinculó al programa de las Naciones Unidas que tiene como política la alimentación en la niñez.

La serie de éxitos en sus años como solista lo han llevado a lograr una estela de triunfos, entre los que se destacan la internacionalización en firme de la música vallenata, discos de Oro, de Platino y Diamante, y cinco Latin Grammy. Más y más premios y reconocimientos: Orden Gran Caballero del Congreso de la República de Colombia, Embajador Ecológico ONU, y La OEA le entregó el reconocimiento Embajadores Culturales de Colombia. Jorge y Jimmy fueron incluidos en la lista del Top 50 de los Artistas Latinos.

Actualmente tiene nuevo compañero de fórmula, y se unió a la campaña «PonteLosAnteojosPorLaVida» del Ministerio del Ambiente: «Protejamos y cuidemos nuestros Osos de anteojos, ellos habitan en los 23 parques nacionales naturales que tiene nuestra hermosa Colombia». Como a todos, la muerte de Jorge Oñate lo conmovió: «Me embarga una tristeza muy grande, es una pérdida irreparable para nuestro folclor vallenato, maestro Jorge Oñate, su canto seguirá siendo inmortal, gracias, gracias, gracias infinitas, le debemos mucho, su aporte es invaluable. Gracias maestro por todo! Y publicó un videíto recordando al maestro.

Algo que les hace mucha falta a los artistas en esta pandemia son los conciertos, tener más contacto con su fanaticada: «Nos hace falta la gente, el público. Se hacen cosas virtuales, pero no es lo mismo». A pesar de todo, ha encontrado cosas buenas, y es que ha tenido mucho más tiempo para componer y puede estar más con su familia: «Antes cada 8 días estaba viajando. Me he leído algunos libros, he trabajado un par de canciones, y sobre todo he trabajado desde casa. Los invito a quedarse en casa, es necesario por ti y por todos».

Marzo 4 de 1977: Muere Andrés Caicedo Estela

Terminó la vida del hombre, pero comenzó el mito de un escritor: Andrés Caicedo Estela. A pesar de su prematura muerte, su obra es considerada como una de las más originales de nuestra literatura. Niño precoz, empezó a escribir a los 9 años, y a los 14 años ya era cinéfilo, ávido lector, amante de la música, los blues, la salsa, el bolero, y fan de los Rolling Stones; escribió varias obras de teatro en sus años de bachillerato y ganó varios concursos de cuentos.

Cuentan que cuando niño se ganó fama de mentiroso pues contaba aventuras fantásticas y se inventaba genealogías familiares descabelladas. Eso y su conducta insolente le valieron la expulsión de varios colegios, aunque pudo graduarse de bachiller en 1968.

Luego inició la educación superior en la Universidad de Valle, donde fue premiado por La historia de Berenice. Nació en Cali en 1951 en una familia de la pequeña burguesía caleña, en la generación del Frente Nacional, y con sus amigos se manifestó rebelde con el sistema. Promovieron el movimiento de jóvenes de pelo largo y lograron formar un gran movimiento cultural.

En 1969, uno de los años más productivos de su carrera profesional, debutó en los periódicos como crítico de cine, y en 1970 ganó el I Concurso Literario de Cuento de Caracas con Los dientes de caperucita, lo que le abrió las puertas a un reconocimiento intelectual. Pero su pasión fue el cine. Fundó en 1974 un cineclub, y luego la revista Ojo al Cine, que con apenas cinco números se convirtió en la publicación especializada más importante del país. Esa fue su primera fama y su primer impacto a un público asombrado ante el nuevo prodigio. Ese año viajó a Estados Unidos con la ilusión de vender cuatro guiones para largometrajes, sin éxito. Sin embargo no se detuvo, y se tomó un tiempo para comenzar su novela más famosa ¡Que viva la música!

El escritor con cara de estrella del pop, como lo definían algunos, no asumió el mundo de las drogas como un escape sino como un insumo. No alabó el consumo; al contrario, fue valiente al mostrar los estragos que provoca. Sin embargo no expresó nunca una postura moralista, una moraleja o un consejo. Utilizó un lenguaje culto, preciso, y a veces satírico. Sus historias trataban sobre los jóvenes, la vida en la ciudad, la música, las películas, el sexo, el amor, la locura y las adicciones.

Odio a Cali, una ciudad que espera, pero que no le abre las puertas a los desesperados, llegó a escribir. Casi todas sus obras son en primera persona, y decía que vivir más de 25 años era una insensatez; advirtió que pasar de esa fecha no sería estimulante para un ser humano, lo que es visto por muchos como la razón principal de su decisión cuando tenía solo 25 años, y acababa de recibir una copia de su único libro editado, (por Colcultura), dejando un legado de miles de cuartillas en un baúl en la casa familiar.

Su producción inédita comprende decenas de cuentos, varias novelas, obras de teatro, adaptaciones para el cine; guiones de largometrajes, reflexiones, y numerosa correspondencia. A su muerte, ¡Que viva la música! se convirtió rápidamente en un éxito y en símbolo del sentimiento de los jóvenes; la novela apareció publicada también en Italia.

Contrario a la escuela literaria del realismo mágico, su obra se inspira en la realidad social, lo que ha hecho que algunos le den la importancia como alternativa en América Latina a figuras como Gabriel García Márquez. Pocos años después de su muerte sus familiares, que siempre lo respaldaron, crearon con la colaboración de algunos amigos una fundación para publicar toda su obra inédita

Marzo 3 de 1934: Nace “La Ronca de Oro”

Nació en Cali la Ronca de oro de América, la cantante de música popular más importante del país. Todo el mundo la quería. Era carismática y, sobre todo, sencilla, genuina, no se comportaba como una diva.

Helenita Vargas siempre cantó historias de amor y desengaño con tal pasión, que es normal pensar que su vida se parecía a sus canciones. Ella decía que eso no era más que un mito.: «Soy la persona menos conflictiva del mundo; soy elemental en mis cosas: sincera, francota y muy modesta. Pero la gente se imagina que Helenita es la trágica, la que tiene mil hombres, la devoradora»

La vida real, en todo caso, también tiene su cuota de drama. Decía que le gustaba la música desde que estaba en el vientre de su mamá, una mujer amante de los tangos. Era estricta, pero ella y su esposo apoyaron su sueño de convertirse en cantante, y la inscribieron en el conservatorio de Cali, donde no duró mucho. Llamaron a sus papás para aconsejarles que dejaran de perder la plata porque en clase hacía lo que quería. Ella aprendió a tocar piano y guitarra a oído, y se aburría cuando le metían matemáticas y términos raros a la música. Su actividad se truncó por unos meses, pues sufrió una parálisis que la mantuvo en cama, consecuencia de una enfermedad autoinmune que le diagnosticaron años después, y que desembocó en la que acabó años después con su vida.

Sus padres se la llevaron de Bogotá, donde estudiaba interna en el colegio, para cuidarla en su casa. Tan pronto se recuperó, siguió cantando en fiestas y reuniones privadas. Su encuentro con Agustín Lara, cuando tenía 16 años, selló definitivamente su amor por las rancheras y los boleros. A partir de ahí nadie pudo volverla a bajar de los escenarios. Ni siquiera el abogado Hernán Ibarra, el perro marido, como ella lo llamaba, con quien se casó a escondidas en 1951. Hernán era un reconocido político liberal que había trabajado al lado de Jorge Eliécer Gaitán, y se conocieron porque ella era la mejor amiga de su hija. Él había quedado viudo y acababa de cumplir 41 años. Como la ronca apenas tenía 17, le ayudó a falsificar los papeles para que apareciera de 21. El matrimonio se celebró poco después de que Helenita participó por el título de señorita Valle. Fue un golpe muy duro para sus padres y hubo un distanciamiento de varios años después de que cometió tal bestialidad. Porque la pasó muy mal en esa época. Ella decía que era un hombre inteligente, pero un pésimo esposo. Cinco años más tarde, y esperando a su hija Pilar, decidió regresar a casa de sus papás. Gracias a su hija conoció a su verdadero amor, el médico Gonzalo Zafra, pues en una de sus travesuras la niña de 3 años se reventó la boca y la llevó de urgencias al hospital donde él estaba de turno. En 1960 el divorcio no existía en Colombia, así que salieron del país para casarse por lo civil. Al comienzo se instalaron en Bogotá, lejos de los rumores y señalamientos de la sociedad caleña, pero luego volvieron a su ciudad natal. Entonces llegó el éxito: los discos, los contratos y los conciertos multitudinarios. Decía que solo dejaría de cantar el día que el salón estuviera vacío, algo que por supuesto nunca ocurrió. Desde que grabó su primer álbum en 1968, la música se convirtió en su vida y en la de su familia, pues afortunadamente Gonzalo, a quien llamaba Zalo, también era un melómano apasionado. Se entendían en todo, lo único que los separaba era que a él le gustaban la salsa y el jazz, y a ella los tangos y las rancheras. Tras 25 años de matrimonio feliz, enviudó, pero continuó adelante con su carrera, y cantó con la misma energía y amargura hasta el final. Su carácter no se doblegaba ante nada. Siempre asumió la vida de forma optimista. Nunca quiso escribir una biografía ni autorizó a nadie a que lo hiciera. Solo en sus últimos días aceptó que su hija Pilar contara su vida en un libro de fotos. El proyecto quedó en suspenso porque Helenita se enfermó gravemente y su familia se dedicó a cuidarla de tiempo completo. Tras la muerte, Pilar decidió retomar la iniciativa.: «En la casa había un baúl enorme lleno de fotos y mientras estaba organizando el material surgió la propuesta de Caracol de hacer una serie». Y así fue como nació La ronca de oro, el programa más visto en el país en el 2014, con cerca de 6 millones de televidentes cada noche. «Yo creo que hoy, mi mamá estaría feliz de verse en la pantalla porque a ella le encantaba el drama», comentaba Pilar en ese tiempo.

Marzo 3 de 1940: Aniversario de Germán Castro Caycedo

Sí. Hoy apaga las velitas. Nació en Zipaquirá. Cursó un año de Antropología pero el periodismo es el oficio que ha desempeñado toda su vida. Germán Castro Caycedo, dice que es periodista porque su mamá le enseñó a leer desde muy niño: «Mi mamá fue una gran lectora. La apasionaban la literatura, el arte, la historia del mundo, la actualidad. Recuerdo que cuando yo tenía unos catorce años me hizo interesarme por leer la prensa diaria. Como buena mujer de su época no pudo ir a una universidad, porque entonces creían que la mujer debía cursar solo hasta cuarto de bachillerato. Pero por otro lado, en nuestro medio era costumbre que la mamá fuera quien le enseñara a leer y a escribir a sus hijos, a sumar y a restar. Nosotros éramos siete hermanos y nos enseñó a todos, de manera que  cuando fuimos llegando al colegio, nada de kínder, nada de primero de primaria, entramos a segundo. Su sueño era que llegáramos a ser bien educados».

Sus primeros pasos fueron en La Voz de Cundinamarca en su pueblo: «Siendo yo bachiller, y además aficionado a los toros, el dueño me permitió hacer un programa de media hora que se llamó Oro y grana».

En 1962 fue nombrado corresponsal taurino de la revista El ruedo de Madrid. Luego conoció a Carlos Alberto Rueda que lo llevó a Carvajal y Cía. para que dirigiera una revista deportiva, Deporte Gráfico, cuyo interés era que donde hubiera un deportista colombiano estuviera un periodista. Se le asignó a Cochise Rodríguez con quien recorrió la mayor parte de América. Dos años más tarde la revista se acabó, pero inmediatamente entró al periódico El Tiempo como redactor, donde permaneció durante diez años.

Luego fue el creador del programa de televisión que marcó un cambio en el periodismo televisivo colombiano, Enviado Especial, primer espacio periodístico en sacar las cámaras de los estudios para realizar un periodismo de profundidad y denuncia, y del cual fue director durante dos décadas. Lo de escribir libros llegó a su vida cuando salió de El Tiempo.

Germán Castro cuenta con más de 50 años de labor como periodista y escritor, y sus investigaciones de diferentes y crudas realidades nacionales y del mundo le han hecho merecedor de diez premios nacionales de periodismo y del Premio Simón Bolívar a la Vida y Obra de un Periodista. Ha recibido ocho premios internacionales y ha escrito veintidós libros de narrativa no-ficción. Su trabajo ha sido traducido a diez idiomas y publicado en España, Francia, Hungría, Japón, China y Grecia.

Y definitivamente su vida profesional la determinaron dos mujeres: su madre y su esposa, a la que considera mejor periodista que él: «Nos conocimos en El Tiempo. Un mes y medio después de conocerla le pedí que se casara conmigo: dijo que sí, pero con mi sueldo había que esperar. Sin embargo, al mes y medio entré a la televisión, diez veces más sueldo, y le dije: Gloria, pon tú la fecha».

Marzo 3 de 1958: Nace Marcos Díaz Alarza

Sucedió en El Molino, Guajira. Por eso de las 5 de la mañana, doña Rosa Beatriz despertó a su esposo Marco Sergio diciéndole: levántate, que lo que es, viene ya. Era Marcos Díaz Alarza, un cantautor que venía en camino. No hubo tiempo para trasladarse al puesto de salud así que nació en el hogar humilde donde vivían. La abuela fue la que lo recibió. Hizo de comadrona, y a partir de ahí le salió trabajito, pues comenzaron a buscarla en el pueblo como partera.

Creció en medio de la música porque su mamá, su papá y sus tías eran todos músicos. Con ese semillero se hizo cantante en una orquestica que es un orgullo del pueblo, la banda Rita Cecilia, por donde pasaron todos los Díaz tocando varios instrumentos. En el colegio, donde sonaba un acordeón o una caja, ahí estaba él. Después de integrar el conjunto del colegio y aparecer en todos los actos, se dio a conocer en toda la provincia. A los 20 años entró al Binomio de oro. No lo creían en el pueblo, y a su papá le decían mentiroso, hasta que un día lo vieron en el programa de Jorge Barón, y así los dudosos se callaron. Con ellos viajó por casi todo el mundo. Después de hacerle coros a Diomedes, a los Zuleta, a Rafael Orozco, y a muchos grupos vallenatos vino la etapa de compositor.

Cuando le tocan las fibras del amor y el desamor, empieza a hacer canciones. La primera fue: «Porque no te tengo Mi vida es que soy así, porque no te tengo ay mi vida yo no soy feliz». Y de ahí en adelante el amor le dio siempre tema para componer: «El corazón hinchado porque un día uno amanece queriendo más, y de pronto la mujer ese día no está en su día. Así fue. Mientras le dije a esa mujer: mi vida hoy te quiero más que ayer, ella me respondió; sabes  una cosa, lo de nosotros no puede ser, yo quiero que esto se termine. Ni tu familia gusta de mí, ni yo gusto de tu familia». Fue como un cuchillo para él, se puso a llorar, y compuso otra de sus canciones, Me vieron llorando, de eso se agarrraron …  con la que encontró el reconocimiento nacional e internacional.

Su talento como compositor no tiene dudas. Muchas de sus canciones se han hecho famosas en las voces de innumerables intérpretes de la música vallenata. En cuanto a sus propias interpretaciones, el cantautor del amor se considera a sí mismo como el precursor del mal llamado vallenato llorón. Ese es el vallenato bonito, que no debe morir, el que toca el alma, dice con razón.

En 1985 toma la decisión de retirarse del Binomio para hacer su primera grabación acompañado del acordeón de Jesualdo Bolaños conformando los inolvidables Pechichones, palabra que hace referencia a los consentidos y mimados. Tuvieron una gran aceptación, y de ahí en adelante todo fueron éxitos.

Ha compuesto más de 200 canciones que se caracterizan por su auténtica expresión folclórica. Temas románticos con un sabor muy vallenato. Vive en Barranquilla desde hace unos 40 años, y ha seguido trabajando en pandemia, los primeros meses no, pero a partir de agosto del 2020 empezó nuevamente a cantar en presentaciones privadas, me cuenta su hija, que muy amablemente me colaboró para esta nota

Feliz cumpleaños maestro!

Marzo 3 de 1976: Muere Crescencio Salcedo

Muere El compae mochila de los pies descalzos. El apodo lo debió a que fue un hombre de gran sensibilidad; caminaba descalzo, según él, «para mejor sentir el contacto de la Madre Tierra». Crescencio Salcedo nació en Palomino, departamento de Bolívar. Su familia se dedicaba a la ganadería y a la agricultura, actividades en las que colaboraba y que inspiraron algunas de sus canciones.

Temerario y pícaro, nunca fue a la escuela, pero vivió una infancia envidiable al lado de su abuelo que lo inició en las artes de la cacería, la ganadería y la agricultura. De ese profundo amor por la naturaleza quedó el bambuco El rastrojito. Ya entrado en la juventud se fue a trabajar con un señor que comerciaba telas, mantas, toallas, franelas, ruanas y pantalones. En esas se hizo marinero de río y durante algún tiempo estuvo al frente de una lancha que cruzaba el Magdalena con toda clase de chucherías.

Se dejó hechizar por la música en las fiestas populares. En el libro Mi vida, publicado póstumamente se refiere a sus inicios: «¡Yo saborié tanto en mi juventud esos festivales en tiempo de Navidad! ¡Eso sí era pero muy bonito! Las piquerías de los barrios en los pueblos; los encuentros en las plazas, daba gusto! Empezó a escribir canciones y a construir sus propios instrumentos: «Desde niño. Nadie me enseñó. Eso me gustaba y hacía mis flautas a mi antojo, como me nacía hacerlas. Hasta que ya fui obteniendo mi poco de técnica y maestría, y fui haciendo las cosas como conocedor, aprendí cómo se cogía una flauta y se tonificaba bien». Y así dedicó su vida a la música popular y a la fabricación de gaitas y flautas, las que interpretó con destreza en los «perendengues» del pueblo.

Cuando murió su abuelo se fue de Palomino para no volver. Durante ocho años vivió en La Guajira con los indios. Ellos le enseñaron los secretos de las plantas. Se hizo yerbatero, oficio que nunca dejó de lado. Cuentan que era común verlo meter la mano en la inmensidad de su mochila y sacar una yerba sanadora.

Luego fue a probar fortuna a Santa Marta, a Barranquilla. Gabriel García Márquez recordando los músicos que desfilaban por las calles barranquilleras en los años cincuenta: «Uno muy popular era Crescencio Salcedo, un indio descalzo que se plantaba en la esquina de la Lunchería Americana para cantar a palo seco las canciones de las cosechas propias y ajenas, con una voz que tenía algo de hojalata, pero con un arte muy suyo que lo impuso entre la muchedumbre diaria de la calle San Blas. Buena parte de mi primera juventud la pasé plantado cerca de él, sin saludarlo siquiera, sin dejarme ver, hasta aprenderme de memoria su vasto repertorio de canciones suyas y de todos».

Le tocó vivir un momento de la historia en la que la figura del compositor y los conceptos de propiedad intelectual eran tomados muy a la ligera. A pesar de que aprendió a escribir a una edad avanzada, famosas fueron sus canciones: La múcura, Nunca olvido el año viejo, El hombre caimán, Mi cafetal. Sobre su obra decía: «Nunca me gusta hacerme pasar como compositor de ninguna obra. No he creído que uno compone nada, sino que lo único que hace es recoger motivos de lo que está con perfección hecho. Tampoco estoy buscando que me reconozcan como autor de ninguna obra, porque todas esas obras que he podido recoger siempre han sido recogidas por las costumbres del pueblo, y las costumbres del pueblo deben quedar completamente libres». El resultado de esa forma de ver su obra es que algunos personajes se apropiaron de sus derechos, registrando sus canciones como de su autoría, mientras el verdadero autor pasó sus últimos días en condiciones desdichadas en Medellín, donde vendía en las calles los instrumentos musicales que fabricaba. El poeta Manuel Hernández se lo topó en una de las calles más populares del centro, casi tullido, como un mendigo expuesto a la caridad pública. Así estaba uno de los juglares más extraordinarios de la cumbia en Colombia. Conmovido, logró que Artesanías de Colombia le comprara algunas de sus flautas artesanales. El dinero llegó quince días antes de la muerte del que en vida no fue reconocido por sus canciones, aún vigentes. Así somos …

Marzo 2 de 1931: Nace Gorbachov

Nace el que se convertiría en el hombre que cambió el mundo, el curso de la historia. El hombre que descongeló la Guerra Fría y ofreció democracia a 200 millones de personas; y que terminó poniendo fin a la Unión Soviética. Tres cosas que estaban en el campo de lo imposible.

Admirado en todo el mundo, en su país es ignorado y hasta despreciado. Gorbachov es difícil de entender, dijo el propio autor de la más reciente biografía. Tiene a su hija y dos nietas que pasan la mayor parte del tiempo en Alemania, así que vive en una casa enorme, con un cocinero, un conductor, y un guardaespaldas.

Su infancia y juventud las vivió en un pueblo en el norte del Cáucaso. Pasó por dos períodos de hambruna, primero con Stalin y luego durante la ocupación nazi. Casi siempre vivió en una situación de gran pobreza. Vio a los dos abuelos ser enviados al Gulag sin ningún motivo. Y sobrevivió a todo con los ojos bien abiertos.

Se puede decir que siempre tuvo la sensación de que algo andaba mal, pero al mismo tiempo fue adoctrinado y, en ese momento no era el hombre que luego cavaría la tumba del sistema. Recibió de sus abuelos y, especialmente, de su padre, la sensación de que el mundo es amigable a pesar de los horrores, que podía confiar en la gente, que tenía unos dones especiales, que era amado, que tenía el potencial de ser un líder. Y eso explica por qué se convirtió en demócrata y trató de desarrollar la democracia en un país que nunca había tenido ninguna tal experiencia. Fue también en esos años que aprendió a odiar cualquier tipo de violencia.

Fue un sobreviviente de tiempos terribles, pero decidió dar todos los pasos del poder hasta la cima. Por eso decidió no rechazar el sistema. Fue a la universidad más elitista de Moscú y aceptó las reglas del juego. No fue tan difícil, pues cuando se graduó, ya con Khrustchov al mando, el sistema era más abierto. Podía ser un idealista y aun así pertenecer al partido y aspirar a subir de rango. Sabía sin embargo que no podía expresar sus opiniones a voluntad, y cuando dejó la universidad, aunque no era disidente, ya era algo escéptico aunque seguía creyendo en los ideales originales de la revolución.

Es difícil entender cómo un hombre como Gorbachov, que cambió el mundo porque creía en la democracia y la justicia, tuvo como mentor principal al entonces jefe de la KGB, Yuri Andropov:»Andropov no era un agente de carrera de la KGB, como Putin. Una cosa se dice porque uno tiene que decirla, pero otra se piensa. Andropov pertenecía a este grupo de personas. Se llevaban bien, hacían picnics juntos con amigos, escuchaban música disidente. A Andropov le gustaba Gorbachov, lo apoyaba, lo admiraba y lo promovía».

Gorbachov mantuvo una vida privada separada su vida política manteniendo un círculo de amigos que pensaban como él, muy diferente a sus colegas del comité central. Era una persona muy reservada, y especialmente Raisa mantenían a la gente fuera de su vida privada. Sólo en ese círculo privado compartieron sus ideas.

Cuando llegó a la cima prácticamente no se llevó a ninguna de las personas que ya trabajaban con él porque «no eran lo suficientemente capaces». Pasó sólo siete años en Moscú antes de ser elegido secretario general del PCUS. Hubo cierta oposición, pero fue relativamente fácil, en parte porque otros fueron lo suficientemente inteligentes para darse cuenta de que él era más competente, que estaba interesado en algunas reformas necesarias. Pero también porque no hubo competencia. Los demás eran viejos, borrachos o estúpidos. O los tres al mismo tiempo. Él era joven. La economía iba mal y las tensiones eran muy altas en todo el mundo. Necesitaban a alguien capaz, con imaginación, energía y cierta flexibilidad. Conocía bien la situación económica del país. Sabía que era cada vez más difícil competir con Estados Unidos en términos tecnológicos y militares. Por lo tanto, no se trata solo de la idea de que las personas tienen derecho a ser libres. Sabía que para mejorar la vida de las personas no podía seguir manteniendo el gigantesco aparato militar-industrial. Por eso tenía tanta prisa de poner fin a la Guerra Fría. Si lograba convencer al mundo y, sobre todo, a los propios rusos, de que Estados Unidos ya no era una amenaza, podría reducir el gasto en defensa. Los líderes occidentales comenzaron a sospechar. No creían en sus buenas intenciones; las veían como un ardid para fortalecer al país. Esa desconfianza duró poco. Fue suficiente que comenzaran a conocerlo. Cuando Margaret Thatcher lo conoció  dijo: «Me gusta Gorbatchov. Creo que podemos trabajar con él, no es como los anteriores. Es cálido, abierto, hablaba un idioma normal».

Pero el verdadero milagro fue Reagan, porque de inmediato se entendieron. Eran similares, optimistas, ambos venían de pueblos pequeños, ninguno bebía, ambos estudiaron teatro. No fue el caso de Raisa y Nancy, que nunca se simpatizaron. Esta relación fácil fue muy importante, y el entorno internacional comenzó a cambiar. Los dos querían acabar con las armas nucleares y eso ayudó. Margaret Thatcher no quería nada de eso, pero aun así lo estimaba.

Gorbatchov creía que podía transformar el sistema desde adentro y que el socialismo seguía siendo posible y deseable después de las reformas. También creía que la Unión Soviética podría mantenerse aunque fuera de otra manera. Pero perdió el control de los eventos. 1989 con las primeras elecciones libres, el primer Parlamento real, la libertad de expresión y de prensa, marcó el comienzo de su declive. Muchos de sus colaboradores comenzaron a darse por vencidos. En cierto modo fue la última persona en perder la esperanza de mantener la Unión Soviética. Ni en su discurso de renuncia en 1991 dijo que se rendiría. Fue demasiado doloroso para él decir «Cesé mi actividad como presidente». A pesar de todo eso, lo que hizo en sólo cinco años provocó un cambio a escala global.

El lado triste de esta magnífica historia es que todos aman a Gorbatchov fuera de las fronteras de Rusia y, dentro de ellas muchos lo ignoran o lo desprecian. Inicialmente le agradaba a la gente. Lo rodearon en las calles, quisieron hablar con él, lo aplaudieron. Pero muchos rusos sintieron que sus vidas se habían vuelto más difíciles, creían que habían perdido un imperio y un estatus de superpotencia: al menos eran temidos, aunque no respetados. Esto explica la popularidad de Putin. Reconstruyó la imagen del orgullo y el poder. Algunos dicen que Gorbatchov escuchó demasiado. Otros que cambió de opinión con demasiada frecuencia. Lo que para muchos fue una prueba de flexibilidad, para los rusos, que sólo conocían a líderes fuertes, se volvió irritante.

Boris Yeltsin era lo contrario de Gorbatchov. Fue él quien señaló la puerta de salida. Había diferencias y también un odio personal. Dos personalidades que compartían el mismo compromiso de reformar el sistema, si hubieran unido fuerzas habrían formado una alianza poderosa y quizás hubieran logrado mantener la Unión Soviética; pero se convirtieron en enemigos. Creía en la democracia, no le interesara mucho la economía. Comprendió que un mercado más abierto probablemente sería mejor para la economía, pero temía lo que podría causar. Y terminó dejando esta reforma en manos de Yeltsin, que abrió la sociedad económica y políticamente, era pro occidental y se llevaba muy bien con Clinton. Pero era demasiado inestable, bebía demasiado, estaba enfermo y decidió darle poder a Putin. Y hoy estamos con Putin, un líder autocrático que profesa un nacionalismo agresivo. Pero para muchos rusos es una especie de retorno a la normalidad rusa. La mayor catástrofe geopolítica del siglo XX fue el colapso de la Unión Soviética, dice Putin, y culpa a Gorvachov. Nadie es profeta en su tierra, confirma el dicho popular…

Marzo 2 de 1939: Muere Howard Carter

Muere en Londres el brillante arqueólogo británico que logró una de las más ricas y célebres contribuciones a la egiptología. Este arqueólogo, que también estaba haciendo excavaciones, en 1922 descubrió la tumba prácticamente intacta del faraón Tutankamón.

Howard Carter tuvo una formación inicial como dibujante, y cuando surgió una oportunidad de trabajo no lo pensó dos veces. A los 17 años fue a Egipto por primera vez y se unió al estudio arqueológico patrocinado por los británicos. Hizo dibujos de las esculturas e inscripciones en el templo en terrazas de la reina Hatshepsut en la antigua Tebas. Luego se desempeñó como inspector general del departamento de antigüedades de Egipto. Su función incluía supervisar la arqueología en toda la región.

En 1901, el quinto conde de Carnarvon sufrió un accidente automovilístico en Alemania que lo dejó frágil y enfermo. Su médico le recomendó que pasara el invierno en climas más cálidos y en 1903 se fue a Egipto, donde la egiptología terminó convirtiéndose en su hobby.

Era un hombre apasionado por los deportes, un gran coleccionista de arte, y muy rico. Obtuvo una licencia para excavar, y al darse cuenta de que necesitaba un profesional capacitado, contrató a Howard Carter, quien le contó que había estado investigando la necrópolis desde 1902 y ya había descubierto las tumbas de otros faraones. Su deseo era encontrar la tumba de un faraón cuyos pocos objetos se habían encontrado en otras excavaciones. Era el hasta ahora desconocido Tutankhamon. Creía que podría estar enterrado en el Valle de los Reyes, a pesar de que los eruditos en ese momento desestimaban esa hipótesis. La excavación que comenzó en 1915 se interrumpió hasta 1917 debido a la Primera Guerra Mundial. Después de 1917, durante 5 años investigó en el Valle sin éxito, y en 1922 Lord Carnarvon decidió poner fin a su apoyo financiero. Su dinero comenzaba a agotarse, y empezó a pensar que quizás sería mejor suspender la búsqueda. Howard Carter lo convenció para que lo apoyara en su último intento. Las excavaciones siguieron sin éxito hasta 1922, hasta cuando el 4 de noviembre se encontró un escalón excavado en la roca al pie de la tumba de Ramsés VI. Encontraron un pasillo lleno de objetos que conducía a una puerta sellada detrás de la cual estaban los tesoros. En su diario capturó el drama del momento: «Después de hacer un pequeño agujero en la puerta, con una vela en la mano, me asomé a la tumba. Pasó algún tiempo antes de que pudiera ver, el aire caliente que escapaba hizo que la vela parpadeara, pero tan pronto como los ojos se acostumbraron al destello de luz, el interior de la cámara se asomó gradualmente ante mí, con su extraña y maravillosa mezcla de extraordinarios y hermosos objetos amontonados unos sobre otros. Sí, cosas maravillosas. Ciertamente nunca antes en la historia de las excavaciones se había visto algo tan maravilloso».

El 16 de febrero de 1923 abrió la puerta de la cámara funeraria y encontró un enorme sarcófago dorado. Había cuatro sarcófagos, uno dentro del otro, todos cubiertos de oro, siendo el último de oro puro, y dentro estaba el cuerpo de Tutankamón. Hizo el descubrimiento de su vida y dijo: «A veces, nos falta el habla».

Durante los siguientes 10 años supervisó la clasificación de su contenido, que en su mayoría está en el Museo Egipcio de El Cairo. Murió en su casa de Londres a los 65 años, y en la literatura popular, su figura empezó a surgir como víctima de una maldición por haber profanado las tumbas de los faraones.

Marzo 2 de 1953: Aniversario de Isadora

Sí. Hoy apaga las velitas María Teresa Villegas Garcés. La inolvidable intérprete de temas como Sabrás de mí, Tenlo presente, Llamarada. Cómo no recordar esa época de oro que marcó la vida de millones de colombianos en los años dorados de la música romántica. Isadora!

Isadora comenzó a cantar desde los 5 años por influencia de su mamá, un ama de casa que adoraba la música. Huérfana de padre y madre desde los 14, tuvo que trabajar desde muy pequeña, y a los 17 ya tenía experiencia como secretaria en la Organización Mundial de la Salud. Entonces decidió seguir sus instintos musicales y entró al Instituto Departamental de Bellas Artes para educar su voz, y a la Universidad del Valle para estudiar música.

Gana el Festival OTI Colombia y el derecho a representar al país en México, certamen  que terminó de corroborar un talento que enamoró a todo el país. Se asoció luego con un grupo de amigos y fundaron la programadora Proyectamos tv. Fueron 13 años como empresaria y les fue muy bien.

Una visita a la capilla de Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa en París le cambió para siempre la vida y se alejó del medio artístico. Todo comenzó en 1993 cuando una monja del santuario le sugirió arrodillarse ante la Virgen para pedirle tres gracias. Aunque en ese momento creía que no necesitaba nada porque era joven, famosa, bonita, adinerada y sin problemas familiares ni de salud, se arrodilló y le dijo: «Yo no vine a pedirte nada, pero si quieres, te regalo mi vida para que tú la manejes. Ahí ocurrió una revelación. Ante esa imagen sentí que mi vida y mi voz estaba destinada a otra cosa». Semanas después fue sorprendida por la llamada de un grupo de oración que le dijo: «El Señor puso en nuestro corazón que te invitáramos a una serenata a la Virgen». No sabiendo nada sobre estas organizaciones, aceptó la invitación pero sólo a cantar su repertorio. El día del evento interpretó algunos de los temas que le habían dado fama, y al final cantó Ave María: «Al cantarla sentí algo maravilloso, indescriptible que jamás había sentido en mis actuaciones. Fue algo casi celestial».

Al poco tiempo se vinculó al grupo y empezó a marginarse del mundo de luces y lentejuelas que la había proyectado como gran figura de la canción romántica en Latinoamérica, España y la comunidad latina de Estados Unidos, y que la aplaudió en escenarios como el Madison Square Garden en Nueva York, ciudad en donde la Asociación de Periodistas del Espectáculo le dio el premio como Mejor Cantante del Mundo Hispano 1977, y donde la llamaron Miss Llamarada.

Aunque evoca con orgullo los días dorados, considera que esa vida no la llenaba plenamente y que algo le faltaba en su realización personal: «El Señor, a través de la Virgen María, me quitó poco a poco las hojas viejas del árbol de mi vida. Cambié muchas cosas, empecé a orar más y me convencí de haber venido al mundo a servir, más que a ser servida, y la Virgen empezó a direccionar mi vida».

Descubrió que además de cantar tenía el don de escribir canciones, y empezó la tarea de ponerle música a sus alabanzas a Dios, María y el Espíritu Santo. Dos canciones que no son de su autoría son las más solicitadas en sus presentaciones: Ave María, e Imah. Según ella, durante la interpretación de esta última ha conocido casos de sanación de jóvenes. Asegura que en algunos recitales siente el olor a rosas frescas y nota que su rostro se llena de escarchas doradas o plateadas, signos que algunos místicos atribuyen a la presencia de la Virgen.

Desde el 2004 es directora de la Fundación Valor-Arte, entidad sin ánimo de lucro que ella fundó, especializada en enseñarles a los niños a valorar su vida a partir de expresiones artísticas. Su agenda está comprometida con parroquias, grupos de oración, fundaciones y organizaciones religiosas que la invitan a dar testimonio en varios países. Asegura que no extraña para nada los oropeles de la fama, y se siente feliz con el mejor papel en su vida: cantarle a Dios y a María. Sobre sus compañeros de época cuenta: «A Vicky, Óscar Golden, Billy Pontoni, Claudia de Colombia solo los veía en los programas de televisión que nos invitaban. Yo vivía en Cali, ellos en Bogotá, pero de todos tengo muy buenos recuerdos»

Marzo 1 de 1810: Nace Chopin

Nació a 60 kilómetros de Varsovia, de un padre francés y una madre polaca, el 1 de marzo según declaraciones de su familia, aunque en su certificado de bautismo la fecha era el 22 de febrero. Su talento musical se hizo evidente desde muy temprano, y se le comparó con el genio infantil de Mozart. A los siete años tocó por primera vez en público, y publicó su primera pieza. Después de su formación en piano estudió en el Conservatorio de Varsovia con J.K. Elsner, un famoso compositor que fomentó sus impulsos creativos. Lo presentaba: Caballeros! ¡Un nuevo genio!. El prodigio apareció en los periódicos de Varsovia, y se convirtió en la atracción de las recepciones que se daban en los salones aristocráticos de la capital.

Y en 1830 llega a París un joven pianista polaco que transformará la música para piano. Su nombre era Fryderyk Franciszek Chopin. Allí rechazó el escenario público y masivo. Como pianista estaba clasificado entre los más grandes de su época, pero no le gustaban las actuaciones públicas y aparecía raras veces y de mala gana. De hecho, representa el curioso fenómeno de un pianista legendario que dio aproximadamente 30 actuaciones públicas en toda su vida, para focalizarse en la composición e improvisación para ambientes burgueses selectos, decisión que le permitió establecer una relación más libre con su piano, sin las presiones que el gran público exigía. Sus amigos eran músicos, escritores, pintores. Sus alumnas, damas aristocráticas que pagaban bien por sus lecciones.

Mientras estaba en Alemania, renovó su relación con una antigua familia amiga, cuya hija María, ya adolescente, mostraba un gran talento musical; se enamoró de ella y al año siguiente le propuso matrimonio. Fue aceptado con la condición de que cuidara mejor su salud. El compromiso no terminó en matrimonio. Los padres de María, perturbados por el mal estado de salud y estilo de vida del prometido, lo veían inadecuado. Este rechazo fue una experiencia dolorosa y las cartas de la familia Wodzinski, atadas en un pequeño paquete, las etiquetó «Mi dolor».

Viajó a Londres con la esperanza de olvidar, y poco después entabló una estrecha relación con la escritora francesa conocida como George Sand. Autora de novelas atrevidas, seis años mayor y divorciado con dos hijos, le dio lo que más echaba de menos desde que salió de Varsovia: ternura, calidez y cuidado maternal. Lo llevó a Mallorca con la convicción de que mejoraría su salud. Desafortunadamente el clima era malo, su salud se deterioró y mostró síntomas de tuberculosis. Sin embargo continuó trabajando y compuso una serie de obras maestras.

A su regreso de Mallorca se trasladó a Nohant, la casa veraniega de George en el centro de Francia. Este fue el período más feliz y productivo de su vida. Durante 9 años ella fue su colaboradora más cercana. Aunque nunca se casaron, disfrutaron de un profundo amor, pero con el tiempo, la actitud cada vez más hostil del hijo de George provocó conflictos cada vez más graves. La separación final de caminos fue en 1847. Las dolorosas experiencias personales, así como la pérdida de Nohant, tan importante para su salud y creatividad, tuvieron un efecto devastador en su estado físico y mental. Abandonó casi por completo la composición, y desde entonces hasta el final de su vida escribió solo unas pocas obras.

En 1848, persuadido por Ana Stirling, una alumna, viajó hacia Inglaterra. Allí organizó conciertos en varias localidades, incluidos los castillos de la aristocracia escocesa, y tocó para la reina Victoria. Este estilo de vida agitado, junto con un clima perjudicial para sus pulmones, dañaron aún más su salud. Regresó a París poco después, viviendo de la generosidad de los Stirling. Su enfermedad progresaba y le fue imposible seguir dando lecciones. En el verano de 1849 su hermana llegó desde Varsovia para cuidarlo. En octubre murió de tuberculosis pulmonar en su apartamento parisino. De acuerdo con su voluntad, su corazón fue extraído y llevado por su hermana a Varsovia, donde fue colocado en una urna instalada en una columna de la iglesia de la Santa Cruz.

La música de Chopin inspiró muchas cosas. Desde lo obvio, como películas biográficas, hasta un videojuego en el que regresa del más allá. Y aunque nunca visitó Estados Unidos, hay muchas cosas que llevan su nombre allí. Una inspiración inesperada está en el mundo de la tipografía. La fuente Chopin Script.

Orgullosa de haber tenido un papel tan significativo en su vida, París lo dio la Rue Chopin, y también hay un pequeño hotel con mucho encanto con su nombre. En Varsovia están los pasos de cebra que recuerdan a los teclados de su piano. Un poco más lejos está el cráter Chopin en Mercurio, que demuestra su impacto estelar. Como el cráter, el protagonista del videojuego Frederic Resurrection of Music, también está fuera de este mundo. El gran pianista regresa del más allá para salvar al mundo de la música: «Los sellos musicales desalmados y las estrellas del pop producidas en masa han obstaculizado toda la creatividad. Y eres la única esperanza de recuperarlo. Lucha contra tus oponentes. Practica tus habilidades hasta la perfección y conviértete en el maestro del piano», fue la descripción del desarrollador.

Una inspiración más realista vino de los destiladores polacos detrás del lujoso Chopin Vodka. El sitio web hace que lo de la papa suene encantador: «Su perfil de sabor excepcionalmente cremoso y con cuerpo lo convierte en un gran vodka, ideal para beber solo o mezclado. Un vodka sofisticado para entendidos exigentes». En la elegante botella hay un retrato de Chopin, y debajo una cita. Otra inspiración viene en forma de perfume. El sitio web lo describe: «Los perfumes Chopin son una interpretación olfativa de las composiciones del Maestro. Los amantes de Chopin pueden elegir entre tres fragancias diferentes que combinan la atmósfera de la música clásica con el minimalismo moderno, donde el poder del aroma es igual al del sonido». Cada aroma lleva el nombre de una composición musical y la botella tiene grabada la firma. Así que si amas tanto a Chopin que te gustaría oler como su música, este es definitivamente el producto para ti.

Marzo 1 del 2013: Muere Rafael Puyana

Murió en París el que es considerado el primer y más grande virtuoso clavecinista de origen sudamericano. El Embajador cultural de Colombia que dedicó toda su vida a rescatar la música antigua. Rafael Puyana Michelsen perteneció a una de las familias que más aportaron al panorama cultural de la capital. Su bisabuela materna, Carmen de Michelsen, fundó la primera Sociedad Musical.

Comenzó sus lecciones de piano a los 6 años con su tía, y luego estudió piano con Giacomo Marcenaro, un profesor italiano radicado en Colombia. A los 13 debutó en el Teatro Colón de Bogotá tocando en un concierto benéfico.  A los 16 se fue a Boston para continuar sus estudios de piano. Posteriormente viajó a Berlín para estudiar clavecín con la profesora polaca Wanda Landowska, la gran impulsora del clavecín en la época moderna. Estudió ocho años bajo su dirección, y terminados los estudios viajó a París, donde estudió composición, teoría y filosofía estético-musical con Nadia Boulanger, una de las grandes personalidades de la música contemporánea.

Su carrera internacional empezó a finales de los años 50, con su presentación en el Town Hall de Nueva York. Desde su primer recital en 1957 fue reconocido como uno de los mejores intérpretes de su generación, y el diario The Times, de Londres, se refirió a una de sus presentaciones en la capital británica con el título: La perfección del clavecín». A partir de entonces recorrió los continentes haciendo presentaciones conquistando la exigente crítica musical europea que lo calificó como una de las figuras más destacadas de su generación.

Su  repertorio abarca desde música antigua hasta la contemporánea. A lo largo de su brillante recorrido, no solo grabó al lado de las figuras más famosas de su época como Andrés Segovia, sino que fue una figura de gran influencia para muchos músicos europeos de generaciones posteriores. Su influencia y conocimiento musical lo llevaron a ser invitado en varias ocasiones como intérprete y como jurado de prestigiosos certámenes en París, Londres, Segovia, Nueva York y Venecia. El Palacio de Versalles lo acogió en más de una ocasión.

Lo definían como un intelectual refinado, ajeno a cualquier pedantería, en constante búsqueda de la belleza y la perfección, plenamente consciente del complejo mundo del intérprete. Quienes lo conocieron recuerdan su don especial de gran conversador en varios idiomas. Aunque tenía poca paciencia para enseñar, lo hacía ocasionalmente durante las vacaciones a estudiantes europeos en cursos de verano. Durante varios años también fue profesor en el Festival Internacional de Granada. La Academia del Disco Francés le otorgó en dos ocasiones el Grand Prix International du Disque, y fue galardonado con el premio Deutsche Schallplatenpreis. Recibió de manos del entonces presidente Carlos Lleras Restrepo la Cruz de Boyacá, y en 1996 fue condecorado por el rey de España con la Orden de Isabel la Católica.

Vivió en París en la etapa final de su vida y allí fundó el Forum International du Clavecin. La última vez que tocó en Bogotá, en el Teatro Colsubsidio por allá en el 2009, al iniciar el concierto dijo que quería ofrecerlo «por la anhelada paz de Colombia». Murió a los 81 años y su colección de clavicémbalos, su biblioteca y partituras fueron donadas al Archivo Manuel de Falla, en Granada. 

Sobre Claudia De la Pava Abad

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